La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
Yo, que hice de mis brazos tu lecho, tu morada,
te aferraste a mis dedos, de niña con apego,
pediste mis nutrientes de madre, el desapego,
yo, que abracé tu cuerpo de niña iluminada,
quien me designó el rango de madre como aliada,
cumplí todos mis sueños, el fruto de mi riego.
Te anidaste en mi pecho, tu cuna mi sosiego,
yo, que hice de mis brazos tu lecho, tu almohada,
me consagré tu madre, velando tu niñez.
Creciste como árbol con sus ramas al cielo,
con todos los permisos, todas las libertades.
Y hoy que te siento cerca ¡lejana intrepidez!,
llenaste tu mochila surcando así tu vuelo.
Te extraño con el alma y acepto tus verdades.
Si fuesen soledades,
asumirá esta madre que su niña ha crecido,
bajo el místico manto de un cielo bendecido.
Porque después de todo he comprendido
por lo que el árbol tiene de florido
vive de lo que tiene sepultado.
Francisco Luis Bernárdez
Hermoso y justo homenaje en forma de soneto con estrambote. Creo que, cuantos hemos tenido hijos, en mi caso tres hijas, sabemos de qué hablas y entendemos los sentimientos que asoman a tus versos. Enhorabuena.
Salud.
Me identifico con tus versos. Has expresado con belleza la relación con los hijos y la capacidad para dejarlos ir cuando llega la hora. Me gustó el poema.
Abrazos
Julio Gonzalez Alonso escribió: ↑Sab, 30 Oct 2021 17:30
Hermoso y justo homenaje en forma de soneto con estrambote. Creo que, cuantos hemos tenido hijos, en mi caso tres hijas, sabemos de qué hablas y entendemos los sentimientos que asoman a tus versos. Enhorabuena.
Salud.
Muchas gracias Julio por tus lindas palabras, no estoy pudiendo entrar al foro. Las razones es que hay bajo internet por la interferencia que hacen las montañas, y cuando hay temporales con lluvias, se corta hasta la luz.-
Aprovecho en la madrugada.
Abrazos.-
Porque después de todo he comprendido
por lo que el árbol tiene de florido
vive de lo que tiene sepultado.
Francisco Luis Bernárdez
Pilar Morte escribió: ↑Dom, 31 Oct 2021 19:15
Me identifico con tus versos. Has expresado con belleza la relación con los hijos y la capacidad para dejarlos ir cuando llega la hora. Me gustó el poema.
Abrazos
Gracias querida Pilar por tu amable comentario,abrazos hasta tu cielo.-
Porque después de todo he comprendido
por lo que el árbol tiene de florido
vive de lo que tiene sepultado.
Francisco Luis Bernárdez
Mirta Elena Tessio escribió: ↑Sab, 30 Oct 2021 10:06Yo, que hice de mis brazos tu lecho, tu morada,
te aferraste a mis dedos, de niña con apego,
pediste mis nutrientes de madre, el desapego,
yo, que abracé tu cuerpo de niña iluminada,
quien me designó el rango de madre como aliada,
cumplí todos mis sueños, el fruto de mi riego.
Te anidaste en mi pecho, tu cuna mi sosiego,
yo, que hice de mis brazos tu lecho, tu almohada,
me consagré tu madre, velando tu niñez.
Creciste como árbol con sus ramas al cielo,
con todos los permisos, todas las libertades.
Y hoy que te siento cerca ¡lejana intrepidez!,
llenaste tu mochila surcando así tu vuelo.
Te extraño con el alma y acepto tus verdades.
Si fuesen soledades,
asumirá esta madre que su niña ha crecido,
bajo el místico manto de un cielo bendecido.
Hermoso, muy hermoso tu poema. Ya ves, coincido con Hallie pero, reitero mi opinión porque lo merece y, más aún la coincidencia.
Mirta Elena Tessio escribió: ↑Sab, 30 Oct 2021 10:06Yo, que hice de mis brazos tu lecho, tu morada,
te aferraste a mis dedos, de niña con apego,
pediste mis nutrientes de madre, el desapego,
yo, que abracé tu cuerpo de niña iluminada,
quien me designó el rango de madre como aliada,
cumplí todos mis sueños, el fruto de mi riego.
Te anidaste en mi pecho, tu cuna mi sosiego,
yo, que hice de mis brazos tu lecho, tu almohada,
me consagré tu madre, velando tu niñez.
Creciste como árbol con sus ramas al cielo,
con todos los permisos, todas las libertades.
Y hoy que te siento cerca ¡lejana intrepidez!,
llenaste tu mochila surcando así tu vuelo.
Te extraño con el alma y acepto tus verdades.
Si fuesen soledades,
asumirá esta madre que su niña ha crecido,
bajo el místico manto de un cielo bendecido.
Hermoso, muy hermoso tu poema. Ya ves, coincido con Hallie pero, reitero mi opinión porque lo merece y, más aún la coincidencia.
Felicidades y gracias.
Un abrazo.
Muchas gracias poeta por tus amables palabras. Abrazo grande.-
Porque después de todo he comprendido
por lo que el árbol tiene de florido
vive de lo que tiene sepultado.
Francisco Luis Bernárdez