Motivos

[Jerónimo Muñoz]

MOTIVOS


Fue porque la existencia se volvió inevitable
y se oyeron los cantos de las muñecas frívolas,
por lo que alguien gritó con una voz sin huesos
que hizo crujir las brasas de la inmoralidad.

Fue porque los ancestros resucitaron lúbricos
cansados de yacer en sepulcros impúberes,
por lo que las muchachas huyeron de sus risas
y el pájaro callado se volvió transparente.

Fue porque los gemidos rompieron el ocaso
y las vírgenes cándidas desnudaron sus ojos,
por lo que los oscuros bajaron a sus noches
rezando letanías de pólvora y sudor.

Fue porque, moribundo sin motivos ni llantos,
atravesé los cielos de labios y cristales,
por lo que la tortura que imponen las serpientes
no consiguió reabrir mis heridas insomnes.

Fue porque te amé rozando el desvarío
por lo que vivo ciego de corazones últimos.

[Hallie Hernández Alfaro]

La pasión desborda estos Motivos, querido poeta.

Es una experiencia muy hermosa seguir desde los ancestros este amor que crece y se multiplica en cada verso.
La estrofa de cierre me ha encantado; la siento apoteósica y alta, muy alta.

Felicitaciones sinceras y un abrazo grande.

[Ana García]

Fuera por lo que fuese, motivos nunca faltan, el prota de tu poema amó hasta la locura. Tiene un peligro...
Ese final lo dice todo. Cuando amas tan a lo bestia se da un final ciego a otros amores.
Genial. ¡Qué alto pones el listón, Jerónimo!
Un beso enorme.

[Francesch Vicent]

¡Uf!, un poema bellísimo y sobrecogedor, que describe con metáforas sublimes la forma de amar tan absolutamente entregada de los románticos suicidas del siglo XIX. Los dos últimos versos son excelsos. Un saludo

[E. R. Aristy]

MOTIVOS


Fue porque la existencia se volvió inevitable
y se oyeron los cantos de las muñecas frívolas,
por lo que alguien gritó con una voz sin huesos
que hizo crujir las brasas de la inmoralidad.

Fue porque los ancestros resucitaron lúbricos
cansados de yacer en sepulcros impúberes,
por lo que las muchachas huyeron de sus risas
y el pájaro callado se volvió transparente.

Fue porque los gemidos rompieron el ocaso
y las vírgenes cándidas desnudaron sus ojos,
por lo que los oscuros bajaron a sus noches
rezando letanías de pólvora y sudor.

Fue porque, moribundo sin motivos ni llantos,
atravesé los cielos de labios y cristales,
por lo que la tortura que imponen las serpientes
no consiguió reabrir mis heridas insomnes.

Fue porque te amé rozando el desvarío
por lo que vivo ciego de corazones últimos.

Bellísimo, maestro! Te felicito Jerónimo por tus talentos. Abrazos, ERA

[Pilar Morte]

Cuando se da un verdadero encuentro no razonas los motivos. Un poema precioso que cierra de la mejor forma, ciego a otros corazones. Me gustó mucho. Felicidades.
Abrazos

[Jerónimo Muñoz]

Queridos compañeros

Hallie Hernández Alfaro
Ana García
Francesch Vicent
E. R. Aristy
Pilar Morte

Siento mucho no poder responderos a todos individualmente. Epero poder hacerlo pronto.
Permitidme que con este único post os haga patente mi agradecimiento y mi afecto.
Abrazos.

Jerónimo

[Rafel Calle]

Tan bello como interesante trabajo, amigo Jerónimo.
Felicidades.
Abrazos.

[Ramón Castro Méndez]

Muy hermosos motivos para recordar o anhelar el amor. Maravillosas métaforas y muy impactantes imágenes.
Todo un placer de lectura.
Enhorabuena por tan inspiradas letras.

Abrazos.

[J. J. Martínez Ferreiro]

“Fue porque la existencia se volvió inevitable
y se oyeron los cantos de las muñecas frívolas,
por lo que alguien gritó con una voz sin huesos
…………………………..
Fue porque los ancestros resucitaron lúbricos
cansados de yacer en sepulcros impúberes,
por lo que las muchachas huyeron de sus risas
y el pájaro callado se volvió transparente.
…………..
Fue porque, moribundo sin motivos ni llantos,
atravesé los cielos de labios y cristales,
……………..
Fue porque te amé rozando el desvarío
por lo que vivo ciego de corazones últimos”


Tu poesía cada vez gana más fuerza con imágenes de gran originalidad y potencia expresiva.

Todo un placer de lectura, joven viejo amigo.

Abrazos y salud.