Mientras, seguirá despertando la mañana y la noche se habrá desvelado

[Alejandro Costa]

El amor es la puerta de salida del desencanto.

Es el refresco natural de la sequedad de la soledad,
el alma inagotable de un cielo de amapolas;
es agua, la que alimenta el suelo indefenso de las flores,
las gotas de una lluvia dormida en los cristales;
es mar, es tierra, el aliento que da vida
a la quebrantada fe de los mortales.

A veces se viste de ayer,
de mañana dormida, de tarde desnuda
o noche de sudor y carne,
más siempre se alimenta del celo
de dos corazones ungidos de hambre.

El amor es la seda de la noche,
la llama blanca de una partida de naipes,
la lana que cubre una piel erizada,
semilla dorada de un campo de trigales.

El amor son cuatro letras vestidas de desnudos,
de pasión, de lenguas sueltas,
de un beso, de un te quiero,
de placer sin límites,
a veces de un deseo
envuelto en cristal de luna,
dormido en un tiempo de futuro.

El amor es vida,
la vida se abre paso en el viento.

El ayer muere cada día,
el amor se regenera,
como renacen las hojas caídas del otoño.

Mientras, seguirá despertando la mañana,
la noche se habrá desvelado
entre sábanas de sudor mojado.

Éxtasis de deseo y pasión
de dos cuerpos enamorados.

[Hallie Hernández Alfaro]

El amor como protagonista insomne y personaje principal de todas las epopeyas.
Para los pragmáticos puede la ser la prueba final que lo invisible es tan real como la materia que consumimos o besamos.

Me ha gustado mucho leerte, querido compañero.

Gracias por compartir y estar.

Abrazos.

[Anita Lis]

El amor lo abarca todo, es infinito, tu has dejado aquí algunos de sus valores y me han gustado.
Saludos cordiales.

[Rafel Calle]

Bello e interesante trabajo, amigo Alejandro.
Felicidades.
Abrazos.

[E. R. Aristy]

El amor es la puerta de salida del desencanto.

Es el refresco natural de la sequedad de la soledad,
el alma inagotable de un cielo de amapolas;
es agua, la que alimenta el suelo indefenso de las flores,
las gotas de una lluvia dormida en los cristales;
es mar, es tierra, el aliento que da vida
a la quebrantada fe de los mortales.

A veces se viste de ayer,
de mañana dormida, de tarde desnuda
o noche de sudor y carne,
más siempre se alimenta del celo
de dos corazones ungidos de hambre.

El amor es la seda de la noche,
la llama blanca de una partida de naipes,
la lana que cubre una piel erizada,
semilla dorada de un campo de trigales.

El amor son cuatro letras vestidas de desnudos,
de pasión, de lenguas sueltas,
de un beso, de un te quiero,
de placer sin límites,
a veces de un deseo
envuelto en cristal de luna,
dormido en un tiempo de futuro.

El amor es vida,
la vida se abre paso en el viento.

El ayer muere cada día,
el amor se regenera,
como renacen las hojas caídas del otoño.

Mientras, seguirá despertando la mañana,
la noche se habrá desvelado
entre sábanas de sudor mojado.

Éxtasis de deseo y pasión
de dos cuerpos enamorados.

Bello canto a la fuerza mayor de la vida, Alejandro. Te felicito por tu buen hacer.ERA

[Alejandro Costa]

El amor como protagonista insomne y personaje principal de todas las epopeyas.
Para los pragmáticos puede la ser la prueba final que lo invisible es tan real como la materia que consumimos o besamos.

Me ha gustado mucho leerte, querido compañero.

Gracias por compartir y estar.

Abrazos.

Me ha gustado mucho encontrarte en mis letras.

Gracias, compañera.

Un beso.

[Alejandro Costa]

El amor lo abarca todo, es infinito, tu has dejado aquí algunos de sus valores y me han gustado.
Saludos cordiales.

Me alegra Anita que te gustara.

Gracias por seguirme.

Un beso.

[Javier Bustamante]

Bonita oda al amor, estimado Alejandro.

Me ha gustado la soltura de tus versos y el tema tantas veces tratado por los artistas y que sin embargo se renueva en cada verso

Saludos

Javier

[Alejandro Costa]

Bello e interesante trabajo, amigo Alejandro.
Felicidades.
Abrazos.

Gracias, Rafel.

Un abrazo.

[Alejandro Costa]

El amor es la puerta de salida del desencanto.

Es el refresco natural de la sequedad de la soledad,
el alma inagotable de un cielo de amapolas;
es agua, la que alimenta el suelo indefenso de las flores,
las gotas de una lluvia dormida en los cristales;
es mar, es tierra, el aliento que da vida
a la quebrantada fe de los mortales.

A veces se viste de ayer,
de mañana dormida, de tarde desnuda
o noche de sudor y carne,
más siempre se alimenta del celo
de dos corazones ungidos de hambre.

El amor es la seda de la noche,
la llama blanca de una partida de naipes,
la lana que cubre una piel erizada,
semilla dorada de un campo de trigales.

El amor son cuatro letras vestidas de desnudos,
de pasión, de lenguas sueltas,
de un beso, de un te quiero,
de placer sin límites,
a veces de un deseo
envuelto en cristal de luna,
dormido en un tiempo de futuro.

El amor es vida,
la vida se abre paso en el viento.

El ayer muere cada día,
el amor se regenera,
como renacen las hojas caídas del otoño.

Mientras, seguirá despertando la mañana,
la noche se habrá desvelado
entre sábanas de sudor mojado.

Éxtasis de deseo y pasión
de dos cuerpos enamorados.

Bello canto a la fuerza mayor de la vida, Alejandro. Te felicito por tu buen hacer.ERA

Muchas gracias Era por pasarte por mi jardín.

Un beso.

[Alejandro Costa]

Bonita oda al amor, estimado Alejandro.

Me ha gustado la soltura de tus versos y el tema tantas veces tratado por los artistas y que sin embargo se renueva en cada verso

Saludos

Javier

Te agradezco el comentario Javier.

Me alegra que te gustara.

Un abrazo.