Abstrusa soledad...
La soledad tiene nombres hermosos, por eso en todas las ciudades falta Laura, cuando subo al metro, ella ya bajó en Pajaritos, siempre veo sus cabellos rubios dar vuelta en una esquina indistinta del barrio bohemio de Bellavista; extraño tanto sus ojos, tienen el color de la lluvia de un jueves a las cinco y cuarto de la tarde, no puedo evitar extrañarte, Claudia, no quiero extrañarte Marisa, mi amada Susana; mi amor... ¡Oh! abstrusa soledad de tantos nombres.