Rafel Calle escribió:Un pedazo de cielo se dibuja en mi brisa
y se pintan sonrisas que no fueron de ayer,
una tierra caliente, un hogar sin promesas,
como el trigo que nace y que pide calor.
Un esbozo de risa se apodera y me atrapa,
una lluvia muy fina que me hace soñar,
un torrente que cambia y atraviesa mi vida
y que hiere y que moja y me hace llorar.
Una música blanda que me envuelve por dentro,
un espacio vacío que se llena de ti,
oleaje en mi alma que se encuentra tu cuerpo,
como un soplo de viento que te besa y se va.
Un azul infinito que nos mira despacio,
con la luz de una noche que nos dona su paz,
es el frío que escapa de mis manos ya frías,
de mis manos vacías, mesurando tu ardor.
Es la luna que ha vuelto a jugar con mis labios,
esperanza a diario que germina en mi ser,
el jardín de un milagro que florece en tus ojos
y que –suavemente- acaricia mi piel.
Es asombro y misterio que palpita y se agita,
es la sombra de un beso que te quiere besar,
corazón que se eleva en su nube de sueños,
es tu invierno maduro… el que me hace temblar.
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Hermoso trabajo, amiga Carmen, que, en cierta manera me ha sorprendido porque no sabía que escribieras poemas monométricos. Obviamente, es una grata sorpresa saberte en una combinación de versos alejandrinos anapésticos y mixtos.
Hablemos un poco del verso alejandrino, por si le puede servir a algún compañero.
El alejandrino anapéstico acentúa en 3ª y 6ª en cada uno de sus isostiquios (partes iguales de un verso, en este caso dos partes de 7 sílabas; si no son iguales se llaman hemistiquios). Este alejandrino también se llama dactílico, si analizamos el ritmo partiendo de la primera sílaba acentuada que es la 3ª, es decir, si formamos anacrusis con las 2 sílabas anteriores al primer acento (Navarro Tomás, Rafael de Balbín).
El alejandrino mixto acentúa en 1ª y 6ª, puede llevar acento en 3ª o 4ª. Se llama mixto porque con el grupo de 5 sílabas que se forma de acento a acento, nos quedan dos combinaciones: 1ª_ 3ª_ _6ª, troqueo y dáctilo y 1ª_ _4ª_6ª, dáctilo y troqueo.
Dado que el único isostiquio que no acentúa en 3ª, se da en el último verso de la penúltima estrofa: y que –suavemente- acaricia mi piel, y visto que para que el primer isostiquio tenga 7 sílabas, tenemos que aplicar una diéresis en “ua”, tal vez cabría una pequeña rectificación, por ejemplo, y que muy suavemente acaricia mi piel. De esta manera, evitamos que el verso comentado se muestre como el hermano pobre del poema, cantarín, el único de su especie…
Muy bien los hiatos, a mi juicio, su aplicación denota madurez, así que, siempre lo recomiendo cuando hallamos una tónica en la vocal inicial o final de dos palabras contiguas y con más razón cuando las dos son tónicas. En estos casos, le doy mucha importancia a la pronunciación culta, o sea, a la hora de leer, siempre aplico el hiato o lo que es lo mismo, nunca aplico la sinalefa.
Por cierto, el último isostiquio es el único que rompe la inercia del hiato. Ejemplo a modo de sugerencia: quien me hace temblar.
Por lo demás, dejas versos muy bellos a los largo de unas estrofas donde abunda la finalización aguda, ora rimadas, ora sin rimar, pero siempre con una decidida, trepidante y muy envolvente musicalidad.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema.
Un cordial abrazo.
Gracias Rafel, por el tiempo que has dedicado al poema, por el extenso comentario.
En primer lugar decirte, que no sé si a algún compañero le puede servir, lo cierto que a la primera en servirle es a mí misma.
Decirte que no he escrito el poema intentando hacer ningún tipo de alejandrino, no sé, y nunca me ha atraído el hecho de contar sílabas, quizás sea porque no tengo ningún conocimiento en esta materia.
Debo confesar que escribí el verso con una melodía en la cabeza, así pues es una canción. También debo confesar que una compañera de Alaire que escribe de maravilla, en mensaje privado me hizo notar que era un alejandrino que se rompía en una estrofa y me ofreció sus mejoras al respecto, que entendí y mejoraban el poema, lo cual le agradezco de corazón. Siempre que he hecho esto, escribir sobre una melodía los poemas han gustado,quizás más, pero, carezco totalmente de esos recursos, como he dicho antes no suelo contar sílabas ni mirar la acentuación, he leído mucha poesía, pero a mí lo que me llega es lo que dice o no dice el poema, la sustancia. Bartolomé apuntaba arriba que era musical por el polisíndeton y eso si lo he incluido en el poema, quizás es lo único que he hecho adrede, pues creo que le confiere siempre algo de fuerza al poema.
Ahora leo detenidamente lo que has escrito, veo como suena al leerlo, y es obvio que mejora sustancialmente la musicalidad del poema al leerlo, es muy obvio, ahora, para mí, pero confieso que carezco de formación, escribo porque es una necesidad para mí, algo que me acompaña desde siempre, también leo mucha poesía por lo mismo, pero, sé muy bien donde están mis limitaciones, que son muchas y muy grandes.
Con tu permiso, incorporo tus, siempre buenas, sugerencias, y te agradezco mucho este tipo de aclaraciones, que a mí me sirven mucho, algo, poco, o mucho me ayudan a mejorar, siempre intento leer y aprender de ellas, en la medida en que yo puedo.
Un abrazo grande, Rafel.
Carmen
La primera tarea del poeta es desanclar en nosotros una materia que quiere soñar.
Gastón Bachelar.