Te fuiste
como un soplo de aire suave,
cual ave
que vuela sin un sentido,
herido.
Heme aquí triste y hundido
añorando nuestro apego,
de nada sirvió mi ruego.
Te fuiste cual ave herido.
***
Nunca volveré a nombrarte
y amarte
poco o nada me valdrá,
será
como aumentar la condena,
mi pena
jamás se mostrará ajena.
Todo cuando di y he dado,
con veneno lo has pagado
y amarte será mi pena.