Como un sueño posible

[María Inés Iacometti]

En el ocaso de tus emociones,
cuando la rueda gire sin sentido
y se entremezclen con tu paso

todas las sombras.

En el preciso instante de la tentación,
esa que empuja al absoluto abismo
o invita al salto que contradice el vuelo...

Mi brazo se tornará en el puente
que llegue hasta tus pies
para ser sustento.

Mis manos aferrarán las tuyas
y fundirán empeños,
y dedos
y esmeros
y tiempos...

Se vaciarán tus penas en mis concavidades
y abrazaré tu río
para que tengas calma.

Me meceré despacio por tornarme alivio
y quitaré la tierra
que no muestre tus ramas.

Seré tu espacio abierto,
tu fluidez. Y lámpara
que encienda la armonía,
que apague las nostalgias,
que aún en pleno día
te salve del oscuro tormento
de las culpas.

Seré quien te rescate
sin que hayas pedido
ni el más escaso auxilio,

y afrontarás las dudas.

...

No temas el perderte
porque yo te he encontrado.
No temo el que me pierdas
porque esto que nos damos
va más allá de todo,
incluso del milagro.

En el ocaso cierto de nuestras emociones,
serás, seremos libres
y sin imposiciones.
Nos salvaremos juntos
raíz,
almendras,
flores.

No habrá ya más abismos
que quieran seducirte.
Seremos dos en uno

como un sueño posible.

[Hallie Hernández Alfaro]

Hermoso trabajo, María Inés.

Ambas partes consolidadas en la metafísica y la realidad.
Prolijo y lleno de buena energía.

Abrazos.

[javier eguilaz]

En el ocaso de tus emociones,
cuando la rueda gire sin sentido
y se entremezclen con tu paso

todas las sombras.

En el preciso instante de la tentación,
esa que empuja al absoluto abismo
o invita al salto que contradice el vuelo...

Mi brazo se tornará en el puente
que llegue hasta tus pies
para ser sustento.

Mis manos aferrarán las tuyas
y fundirán empeños,
y dedos
y esmeros
y tiempos...

Se vaciarán tus penas en mis concavidades
y abrazaré tu río
para que tengas calma.

Me meceré despacio por tornarme alivio
y quitaré la tierra
que no muestre tus ramas.

Seré tu espacio abierto,
tu fluidez. Y lámpara
que encienda la armonía,
que apague las nostalgias,
que aún en pleno día
te salve del oscuro tormento
de las culpas.

Seré quien te rescate
sin que hayas pedido
ni el más escaso auxilio,

y afrontarás las dudas.

...

No temas el perderte
porque yo te he encontrado.
No temo el que me pierdas
porque esto que nos damos
va más allá de todo,
incluso del milagro.

En el ocaso cierto de nuestras emociones,
serás, seremos libres
y sin imposiciones.
Nos salvaremos juntos
raíz,
almendras,
flores.

No habrá ya más abismos
que quieran seducirte.
Seremos dos en uno

como un sueño posible.

Maria Inés, preciosura, y hermosura de poema, en tu encuentro, y generosa dadivosidad
besos Poetisa
salud!
suerte
y sé feliz
cuídate mucho

[Ricardo Serna G]

María


Me encantó tu poesía....
tiene la esencia misma
de la imaginación y la realidad
como su compañera....


te felicito, querida amiga


Un abrazo fuerte
feliz día

[Rafel Calle]

Hermoso trabajo, amiga María Inés.
Abrazos.