Locura y Saldos Libertarios

[Ana García]

Hace una pelotilla con el celo y lo lanza contra la pared.

Tenía una exacerbada idea de la libertad.
Era patético verlo andar por la calle,
medio desnudo,
empujando y abriendo todas las puertas
de bares y comercios.

Hace jirones con el papel charol, ¡qué ironía de envoltorio!

En realidad no hacía daño ni se metía con nadie.
No soportaba controlar el aire,
ni que lo controlaran,
odiaba sentir ataduras o roces que escocieran.

Él era, ante todo, libre y creía que era lo único en este mundo por lo que no tenía que pagar.

En la clínica lo tienen controlado.

Se subió a la fuente,
jugó con el agua y saltó.
Llegó más abajo de lo que él pensaba.

"¿No te parece bonito el regalo? Es una camisa hecha especialmente para ti, estas mangas largas te ayudarán a alcanzar tu ansiada libertad."

Mientras caía pensaba en una edición
reducida de sí mismo, su vida:
Soportales, mercados, cuentos y cuentas.
Juegos y más juegos.
El cerdo degollado y otros difuntos.
Menestra de palabras para el corazón
—su cerebro—.
Menos juegos, más lenguas divertidas.
El sexo y otras extrañezas.
Exámenes y cine.
Universidad, el oso y el parque, la libertad.
Juegos universitarios nacionales.
¡Zas! Muerte no esperada, desechada,
intimidad, melancolía. Titulación.
Profesión-opción. Permanencia cuestionada.
¡Zas! Muerte inesperada
—desesperante—
cansancio.
Barrio, lucha, compromisos, despertares.
Cansancio, soledad.
No más horarios, amigos, viajes, más soledad.

Y...muerte, sí, esperada… la suya.


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Hace tiempo que no escuchaba a extremo. Pero hoy, al terminar el poema, pensé en este tema. Y aquí está.

[Antonia Mauro]

Es que los locos de verdad, de esos de remate, siempre fueron inofensivos. Recuerdo a un tal César, formó parte de mi infancia y de la de muchos. Cuando íbamos al cole, cuando volvíamos.
Los lunes, los martes, los domingos. Formaba parte del paisaje: pelo y barba blanca. Estaba loco, pero no se metía con nadie y a todos nos gustaba cruzárnoslo.

Estaba loco, o eso decían..

Ahora los locos no están diagnosticados. Y no están en la calle, aparecen en cualquier esquina y nadie sabe que lo están. Y algunos van disfrazados y bien vestidos.

Me encanta extremo. Esa canción la he escuchado muchísimo estos meses. El Robe es único. Tiene unas letras impresionantes. Sabes que de jovencita no les escuchaba? Qué tonta. Desde hace diez años más o menos, muchísimo.

Buen poema. Y buen homenaje a los locos de nuestra infancia.

Un abrazo.

[Pilar Morte]

Un poema, querida amiga, fuerte y dicente, que deja un sabor agridulce del personaje y despierta cierta ternura. Me gustó leerte.
Abrazos
Pilar

[Ana García]

No todos los locos son tan inofensivos. Ayer casi me mata del susto uno de los llamados "violentos". Pensó que yo le estaba mirando (cosa que no hay que hacer nunca, al menos de forma fija) y no era así. Miraba pensativa, si me apuras, al lado contrario. Pasé un mal rato.
Sin embargo, he pintado un personaje bueno, pero de los que no pertenecen a este mundo, y por eso mismo se bajó de él.
Gracias por tu comentario, Antonia.
Un abrazo.

Así es, Pilar, estas personas sacan lo mejor de ti. Saca la protección que puedas tener dentro. Más arriba cuento una mala situación y, por contra, tengo otra muy buena. Un poeta, rubio con carita de ángel, me dedicaba poemas cortos y muy tiernos. Claro que yo le conocí en su momento más medicado.
Gracias por leerme y comentar.
Un abrazo.

[Luis M]

Aquel que se crea lúcido y equilibrado que tire la primera piedra...La expresión "en este mundo de locos" es mucho más real de lo que parece.. Y es que el cerebro y la mente humana son tan desconocidos y fascinantes como frágiles. Buen poema, Ana. Un verdadero placer de lectura, amiga. Un abrazo.

[Pablo Ibáñez]

Ana,

me ha gustado el poema, amiga. Presentas un original formato en planos paralelos diferenciados por la fuente del texto. La negrita propone una inspiración plástica de la estrofa y la fuente normal la desarrolla con los detalles biográficos clave. La combinación de ambas delinea eficazmente al personaje del "loco" y el ambiente que le rodea. La evolución progresiva y ordenada del texto ayuda al desarrollo de la historia, pero no cae en la linealidad de la prosa. Todo lo contrario, en algunos tramos se adentra en meandros de irrealidad, o de surrealidad, que contribuyen al efecto narrativo.

A mí me ha gustado.
Abrazos.

[Lunamar Solano]

Dulce y sensible mirada que explota profundidad que captura querida amiga...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

[Ana García]

Hoy día hay más personas afectadas con enfermedades mentales de lo que creemos. A ello contribuye y mucho los accidentes de tráfico. Estos son los que mejor se podrían evitar.
Otros trastornos genéticos también deberían evitarse.
Los traumas (sobre todo infantiles), los daños emocionales o el abuso de sustancias contribuyen a esos trastornos mentales.
Así que sí, Luis, ni están todos los que son ni son todos los que están. Cada día es más fácil sufrir el vuelo del cuco.

Gracias por pasar y dejar tu comentario.
Un abrazo.

[Ana García]

Qué bueno lo que me dices, Pablo. Me cuesta mucho huir de la prosa pues en ella me muevo mucho mejor y que tú lo aprecies me llena de satisfacción.
Un gran abrazo. Muchas gracias por pasar.

Un gusto tenerte en mi rincón, Lunamar.
Un abrazo enorme.

[Armilo Brotón]

Hola Ana, creo que has materializado un poema emotivo por el tema que tratas. Entiendo que hay dos partes:
La primera una traslación narrativa del marco en el que se desenvuelve la última parte, estrictamente poética, que comienza el el verso:
"Mientras caía pensaba en una edición".
Te digo, como a Luis le apuntaba, que sobran versos entre guiones que son sintagmas naturales de la oración.
Ya te los remarco:

Era patético verle andar por la calle,
—medio desnudo—
El le es un lo, pues es complemento directo.Y esas comillas restan fluidez a la lectura y albergan un sintagma complemento del nombre, no una oración independiente.
empujando y abriendo todas las puertas
de bares y comercios.


No soportaba controlar el aire
—ni que lo controlaran—
Te digo lo mismo que anteriormente.
odiaba sentir ataduras o roces que escocieran.

¿No te parece bonito el regalo? Es una camisa hecha especialmente para ti, estas mangas largas te ayudarán a alcanzar tu ansiada libertad.
Sin embargo estos versos, que tienen un marcado carácter de diálogo, aparecen sin comillas.

Sólo son unos apuntes que me vinieron a la cabeza después de leer este poema que me recordó aquella canción de Sabina A la sombra de un león.
Un besazo

[Ana García]

Ahora que lo dices, Armilo, yo lo veo. Tienes razón, tenía que haber puesto más cuidado con mi leísmo, el abuso de guiones y el diálogo. Muy acertadas tus anotaciones.
Mañana podré corregir el poema con la mente más descansada. Quizás vea algo más.
Gracias por tomarte el tiempo que no tienes en leer y ayudar con los poemas. Hoy hemos disfrutado de tu tiempo Luis y yo. ¡Gracias, mil gracias por estar!
Un besazo.

[Rafel Calle]

Bello e interesante trabajo, amiga Ana.
Abrazos.

[Ana García]

Muchas gracias, Rafel, por pasar y dejar tu comentario.
Abrazos.

[Julio Gonzalez Alonso]

Puedo decir que tus versos me han impactado. Un mundo nuevo. Nos abres la caja de Pandora de lo innombrable. Estamos al límite de la comprensión. La vida se arma por derroteros que desconocemos. Todo nos envuelve en tu poema y nos compromete. Abrazo.
Salud.

[Ana García]

Qué bueno, Julio. Saber que te ha impactado es un halago importante para mi poesía.
Gracias por dejar tu impronta en este poema.
Salud (me encanta este saludo y hace mucho que no lo usaba).