prietas en la noche de tu boca,
cruza el hondo de la umbría y
ven.
Toma la luz,
pálpaLA,
tiéntaLA,
amásaLA
como amasas el pan ácimo de tu vida.
Es trémula ¿ves?
quiere sentirse en ti para que seas rayo
y te vistas de ola,
desnuda de ti.
Ven,
traspasa el umbral de la vida y
vive.
Los que decimos palabras al filo de lo imposible
te esperamos
en la redondez tangible de la Esperanza.
(La vida es demasiado precisa y preciosa, con todo lo que la llena, con todo absolutamente, para que se viva sufriendo. A ti, mujer, a ti, hombre, a ti, niña, que te obligan a mancillarla sin dejar de ser virgen. Hoy en Alicante, explosión de luz y color, me siento viva)
Retomo este poema en el día de hoy. Republico, mejor dicho