Los sueños de la noche son hilos con los que tejemos los trajes del días.
Poeta árabe ADONIS Ali Ahmad Esber
Las hilachas del tiempo
cada día mueren al costado del camino
abrevan lenguajes del pasado desierto
llevan cascanueces trémulos en los puños
sorprenden con sonidos perentorios mientras
marchitas rosas agonizan en el pueblo del exilio.
Cuando todos duermen
va en despojo el cuerpo por las avenidas
buscando mudas nuevas
desapegándose de hilachas del pasado.
Mortecina luz en las ventanas
alguien arrulla palabras de la medianoche,
luz como emanación de un perfume terminal
que adormece los sentidos,
no siempre es bueno despojarse del ayer,
hay hilachas con historia,
son el hilo de lurex
que brilla agigantado sobre la nada
quizá porque encierra una plegaria
un último perdón
dos miradas
un bastión de ternura
¿quién querría perder estos actos del tatuaje
enamorado de los días?
Arriba el porvenir con su mazo de cartas
desliza bajo la puerta una tirada
una carta maestra, una llave,
una lámpara, todo se vuelve clave
y nuevos hilos harán trama y urdimbre
días de ilusión a los que naceremos soñando
ojalá abrazados sueño a sueño
para fortificar nuestros frágiles cuerpos
esmaltando de nuevo las superficies que el viento
del amor y la vida deja a la intemperie.
Marisa Aragón Willner
@safe creative. all.