Ángeles de invierno

[Ana Muela Sopeña]

"Una ciudad es un mundo cuando amamos a uno de sus habitantes".
Lawrence Durrell


Pasa el tiempo desnudo sin que arranque la belleza de un tiempo inmemorial. En mitad de la niebla se presiente la soledad del frío. Escucho tras los muros invisibles la lluvia que enmascara los escaparates silenciosos.

Todo se ha vuelto gris en la distancia.
El sonido del agua es como el hambre.
Parece que la luz es un ensueño
adherido a la magia de las nubes.

Te has ido sin decir al menos un adiós con la mirada. Una palabra puede construir nuevos mundos, pero también hablar desde el mutismo de las tumbas. Un cementerio lleno de inquietud: preámbulo con ángeles de invierno.

Has querido marcharte de puntillas.
Como un ladrón descalzo en los abismos,
pero el rumor del viento es ya mi aliado.

No hay peor despedida que la nada envuelta en lo que pudo ser un día. Esa nada infernal que nos asfixia en el destierro infame del vacío. Ahora es necesario pasar página. Atemperar las lágrimas de sangre. Permitir a los muertos superarse y dejar su epitafio entre la escarcha sobre una blanca lápida con la flor abisal como recuerdo...


Ana Muela Sopeña

[Lunamar Solano]

Muy sensible querida amiga... un recorrido hondo y emotivo el de tus versos...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

[juan delgado]

Una lectura intensa y hermosa en la rotundidad de tus versos. Enhorabuena Ana.
Un abrazo.

[Ramón Carballal]

Intensidad y emoción en tus letras que invocan a la soledad y al dolor de la ausencia. He disfrutado con la lectura. Un abrazo.

[Pilar Morte]

Un adiós que duele porque no tiene despedida. Se siente la tristeza en tu hermoso poema. Me gustó mucho.
Besos
Pilar

[José Manuel F. Febles]

Escribir cuando el dolor aún es punzante, no es nada fácil. No lo es, explicar con tanta devoción, cuando el adiós no tiene ojos para ofrecerlo, cuánto menos. "La soledad del frío", cómo duele, Ana.

Desde mi isla, aprovecho un fuerte abrazo para incluir mi sincera felicitación.

José Manuel F. Febles

[Ana Muela Sopeña]

Muchas gracias Nancy, por venir:

Un fuerte abrazo
Ana

[Ana Muela Sopeña]

Me alegra, Juan, que te haya gustado este poema:

Un beso
Ana

[Ana Muela Sopeña]

Agradezco tus palabras, Ramón:

Un beso
Ana

[Ana Muela Sopeña]

Siempre es una alegría, Pilar, verte entre mis versos.

Un abrazo grande
Ana

[Guillermo Cumar]

Qué bien cuadras la elegancia, amiga. Me encantaron tus dos posiciones del escrito.

Un abrazo

[Marisa Peral]

"Una ciudad es un mundo cuando amamos a uno de sus habitantes".
Lawrence Durrell


Pasa el tiempo desnudo sin que arranque la belleza de un tiempo inmemorial. En mitad de la niebla se presiente la soledad del frío. Escucho tras los muros invisibles la lluvia que enmascara los escaparates silenciosos.

Todo se ha vuelto gris en la distancia.
El sonido del agua es como el hambre.
Parece que la luz es un ensueño
adherido a la magia de las nubes.

Te has ido sin decir al menos un adiós con la mirada. Una palabra puede construir nuevos mundos, pero también hablar desde el mutismo de las tumbas. Un cementerio lleno de inquietud: preámbulo con ángeles de invierno.

Has querido marcharte de puntillas.
Como un ladrón descalzo en los abismos,
pero el rumor del viento es ya mi aliado.

No hay peor despedida que la nada envuelta en lo que pudo ser un día. Esa nada infernal que nos asfixia en el destierro infame del vacío. Ahora es necesario pasar página. Atemperar las lágrimas de sangre. Permitir a los muertos superarse y dejar su epitafio entre la escarcha sobre una blanca lápida con la flor abisal como recuerdo...


Ana Muela Sopeña

Ana, me encantó este poema cuando lo leí pero no he podido contestar hasta ahora, que tengo un ratillo.
Me gusta esta mezcla de prosa poética con versos, alguna vez yo también he utilizado esta forma.
Y que me gusta mucho cómo escribes, compañera.
Tengo pendientes cosas pero ya te contaré, a ver si respiro... uffff
Un beso.

[Rafel Calle]

Hermoso e interesante trabajo, amiga Ana.
Abrazos.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Un poema de gran sensibilidad organizado entre versículos y versos.

Todo un placer de lectura, querida amiga.

Abrazos y salud.

[E. R. Aristy]

"Una ciudad es un mundo cuando amamos a uno de sus habitantes".
Lawrence Durrell


Pasa el tiempo desnudo sin que arranque la belleza de un tiempo inmemorial. En mitad de la niebla se presiente la soledad del frío. Escucho tras los muros invisibles la lluvia que enmascara los escaparates silenciosos.

Todo se ha vuelto gris en la distancia.
El sonido del agua es como el hambre.
Parece que la luz es un ensueño
adherido a la magia de las nubes.

Te has ido sin decir al menos un adiós con la mirada. Una palabra puede construir nuevos mundos, pero también hablar desde el mutismo de las tumbas. Un cementerio lleno de inquietud: preámbulo con ángeles de invierno.

Has querido marcharte de puntillas.
Como un ladrón descalzo en los abismos,
pero el rumor del viento es ya mi aliado.

No hay peor despedida que la nada envuelta en lo que pudo ser un día. Esa nada infernal que nos asfixia en el destierro infame del vacío. Ahora es necesario pasar página. Atemperar las lágrimas de sangre. Permitir a los muertos superarse y dejar su epitafio entre la escarcha sobre una blanca lápida con la flor abisal como recuerdo...


Ana Muela Sopeña

Un poema al dolor en todas sus agazapadas miradas. Me conmueve su belleza. El formato es superior y satisface a la expresión. Te felicito, Ana Muela Sopeña. Abrazos, ERA