El poema que yo nunca escribiría

[Alonso de Molina]

un vértigo, una ventana cerrada a tus ojos
un sueño que sangra, que duele

y estos versos que se clavan en la carne:


Porque estaba tan sola ante tu muerte,
tan campo sin estrellas,
tan poco fértil
que hasta me dio la risa
cuando aquel sacerdote misterioso me dijo:
reza porque la muerte es nuestro sur.



mi aplauso Carmen, un fuerte abrazo

.

[Blanca Sandino]

Permíteme, Carmen, que guarde silencio.

Blanca

[Hallie Hernández Alfaro]

Me uno al silencio de Blanca.

Besote y abrazote.

Hallie

[Marian Ramentol Serratosa]

Todos mis muertos me hablan,
aunque me tape los oídos,
susurran en sus tumbas el dolor
y el miedo.

Tropiezan con mi nombre y lo destrozan
porque sienten hambre.

Me recuerdan veranos y sonidos,
vaginas destrozadas por la luz.

Todos mis muertos dicen que me esperan.

Que maman de mis pechos
que se beben mis vértebras.

Padre, yo no quería que murieras
aquella noche.

Porque estaba tan sola ante tu muerte,
tan campo sin estrellas,
tan poco fértil
que hasta me dio la risa
cuando aquel sacerdote misterioso me dijo:
reza porque la muerte es nuestro sur.

Desde entonces yo vivo sin la lengua.

Que se me mueran todos
para que pueda ser un rostro seco.

La muerte sólo es asco.

Así es princesa, la muerte sólo es asco, menudas somos las dos para con la GRan Dama, deberíamos animarnos y reunir poemas de ambas sobre la muerte, sería interesante ver qué ocurre con el conjunto... jejeje.

[Pilar Morte]

Hay emoción y mucha fuerza en estos versos. Me gustaron
Un abrazo
Pilar

[Aubriel Camila de la Prad]

Todos mis muertos me hablan,
aunque me tape los oídos,
susurran en sus tumbas el dolor
y el miedo.

Tropiezan con mi nombre y lo destrozan
porque sienten hambre.

Me recuerdan veranos y sonidos,
vaginas destrozadas por la luz.

Todos mis muertos dicen que me esperan.

Que maman de mis pechos
que se beben mis vértebras.

Padre, yo no quería que murieras
aquella noche.

Porque estaba tan sola ante tu muerte,
tan campo sin estrellas,
tan poco fértil
que hasta me dio la risa
cuando aquel sacerdote misterioso me dijo:
reza porque la muerte es nuestro sur.

Desde entonces yo vivo sin la lengua.

Que se me mueran todos
para que pueda ser un rostro seco.

La muerte sólo es asco.

Un poema que golpea muy fuerte y deja el corazón apretadito. Un poema excelente, por lo que dice, por cómo lo dice, por las emociones que suscita.

Besos y mis felicitaciones.

[carmen iglesia]

Tienes razón, no lo escribas porque la muerte no es nada, nada, tan sólo la agonía de los vivos y asco y ausencia y dolor. Pero aparte de eso nada.

Un beso.

Un asco tremendo, Ignacio... sobre todo, muchas veces,todo lo que la precede...

Gracias por venir. Y besotes,

Carmen

[carmen iglesia]

.

Desde luego es un poema que a nadie le gustaria de escribir. Yo defini' la muerte de mi madre como un parto al reves que duele muchisimo. Estaba en la isla de Saint Christopher Kitts negociando el proyecto de un hotel cuando me llego' la noticia y esos son realmente recuerdos que uno nunca puede borrar de su memoria. En verdad en un cierto momento de nuestra existencia nos consideramos invulnerables al sufrimiento, porque no hemos enterrado a nadie, pero cuando esto sucede nos enfrentamos a lo inexorable. Ese por cierto es el unico entierro al que asisti' en mi vida. El tema de la muerte que a muchos poetas les gusta de abordar a veces con exceso no es uno de mis favoritos, sin embargo se' muy bien que un dia nos llegara' a todos, aunque yo me dedique escencialmente a vivir a tirarle a la vida todos sus aspectos positivos. Me han conmovido mucho tus letras. Enhorabuena por el poema, si es que se puede decir eso en estos casos...

Un besote - Iben Xavier

.

No es tampoco uno de mis temas favoritos... tal vez sí, uno de mis miedos, como el de todos... Este poema fue fruto también de un berrinche especial en el que quise recordar las cosas importantes y olvidar las chorradas, que son muchas...

Besotes. Y gracias por venir,

Carmen

[carmen iglesia]

Todos mis muertos me hablan,
aunque me tape los oídos,
susurran en sus tumbas el dolor
y el miedo.

Tropiezan con mi nombre y lo destrozan
porque sienten hambre.

Me recuerdan veranos y sonidos,
vaginas destrozadas por la luz.

Todos mis muertos dicen que me esperan.

Que maman de mis pechos
que se beben mis vértebras.

Padre, yo no quería que murieras
aquella noche.

Porque estaba tan sola ante tu muerte,
tan campo sin estrellas,
tan poco fértil
que hasta me dio la risa
cuando aquel sacerdote misterioso me dijo:
reza porque la muerte es nuestro sur.

Desde entonces yo vivo sin la lengua.

Que se me mueran todos
para que pueda ser un rostro seco.

La muerte sólo es asco.

Genial, magistral
escalofriante poema
me has dejado mudo.
No sabes como me ha gustado.
Mis felcitaciones Carmen y un fuerte abrazo.

Joan

Joan, agradezco que te gustara aunque creo que le sobran vísceras por todos lados... y ese punto de reflexión que siempre suele faltar en mi vida y en mi escritura...

Muchísimas gracias por estar.

Y abrazos grandes,

Carmen

[julián borao]

Impresionante, Carmen, emoción y rabia, intensidad y belleza. Esa explicitación del sentimiento ante lo inevitable, esa sinceridad que se vierte en la palabra que has hecho poema. Me ha impactado.
Un fuerte abrazo.
Julián Borao

[Just Gafar]

Ahhhh!!!

Te abrazo

[Joan Port]

Que se muera sola la muerte, maldita perra aullando en los adentros del alma.

Fuerza y pasion en tus letras, un gusto.

Saludos

[carmen iglesia]

Todos mis muertos me hablan,
aunque me tape los oídos,
susurran en sus tumbas el dolor
y el miedo.

Tropiezan con mi nombre y lo destrozan
porque sienten hambre.

Me recuerdan veranos y sonidos,
vaginas destrozadas por la luz.

Todos mis muertos dicen que me esperan.

Que maman de mis pechos
que se beben mis vértebras.

Padre, yo no quería que murieras
aquella noche.

Porque estaba tan sola ante tu muerte,
tan campo sin estrellas,
tan poco fértil
que hasta me dio la risa
cuando aquel sacerdote misterioso me dijo:
reza porque la muerte es nuestro sur.

Desde entonces yo vivo sin la lengua.

Que se me mueran todos
para que pueda ser un rostro seco.

La muerte sólo es asco.

La escritura, para muchos - entre los que me incluyo- resulta ser el hallazgo de una resignacion que de un tiempo a esta parte, y, sin ser demasiado conscientes, hemos ido aceptando poco a poco. La diferencia es que algunos nos resignamos de forma pasiva, quedamos callados, sin voz, ante esa intrascendencia dolorosa que, desgraciadamente ya nos ha dañado: lo mejor es no hurgar en la herida -pensamos...Sin embargo, en tu poesia, esa resignacion de la que hablo - que tambien esta presente- tiene, sin duda, un elemento beligerante, violento, no se arrincona tras haber recibido el golpe y se defiende con uñas y dientes ante los postulados del convencionalismo ¿religioso, politico de la ortodoxia social...? Es una resignacion activa, sin duda. La muerte para algunos valientes nunca sera trascendencia, tal solo asco...Pero solo para los muy valientes, Carmen. Un abrazo y gracias por tu poesia.

Bueno, en una cosa tienes razón y no tiene que ver con la escritura... yo me resigno pero antes pataleo... es una forma de ser jodidamente jodida que, a veces, incluso me quita la razón en todo... pero es lo que hay... Y respecto a la muerte sólo es un asco, cierto... eso lo afirmo y lo afirmaré mil veces... Un asco injusto, el más injusto y mira que hay ascos injustos...

Gracias a ti, Emilio. Muchas y muchos besos,

Carmen

[carmen iglesia]

No debías de haberlo escrito. Al menos, no en este momento.

Siento haber sido la inductora, aunque haya sido involuntariamente.

Yo me conozco todo lo que has escrito y he visto tu evolución desde hace cerca de tres años. Si hay gente que no ve más allá de sus narices, no es tu problema. Esta vida es demasiado corta y demasiado puñetera para estar perdiendo el tiempo en tonterías. Así que ya sabes, escribe de lo que te salga del moño.

Te envio un besazo desde esta orillita, hoy también fría.

Mira, nadie induce a nadie a nada... éso está ahí, en mi subconsciente a todas horas como tantas y tantas otras cosas y salen cuando tienen que salir. Pero ya estaban ahí... Nadie me las fomenta.
Respecto al resto, sinceramente, me importa poquísimo... Yo no escribo poesía para hacerme famosa ni hago tertulias en las que me crea Federico García Lorca... Yo escribo porque me da la gana y porque lo necesito egoístamente, punto...

Besotes para ti que hace frío y es Navidad, por desgracia jajaja, otra vez,


Carmen

[carmen iglesia]

Un poema que nace del dolor, la rabia y la impotencia. Esas son las sensaciones que todos tenemos cuando se nos va un ser querido. Tú lo has descrito de forma extraordinaria. Este poema es una prueba evidente de la variedad de tus registros poéticos. Enhorabuena y un beso.

Hola Ramón,

No soy muy propensa a tratar este tipo de temas, tú lo sabes... pero éste salió de la rabia... justo eso...

Besos para ti. Grandes,

Carmen