La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
Lunamar Solano escribió:
Se refugia la luz en los intervalos,
soporte magno y continente
del infinito…
Iniciarme en tu silencio
me exime del laberinto de arena;
consigue con su implacable manifiesto,
estremecer los umbrales de la carne…
Dejo caer mis pupilas
sobre la indomable vertiente
que mana de tu lengua…
Brincan mis ángeles;
pavonean su insondable centelleo
entre mil enigmas astrales…
Siempre me alcanzan tus dedos,
empapados del origen
de todo elemento...
La lírica de tu verbo rima
con mis lágrimas de plata,
cuyo celeste resplandor
eterniza nuestro poema del alma…
Muy cadencioso en su lectura. Buenos versos de cierre y subrayo esas estrofas centrales sobre las que creo que pivota el poema. Todas mis felicitaciones. Un abrazo.
Salud.
Bellísimas letras plenas de sensibilidad. Un placer pasarme por tus versos, que aplaudo.
Abrazos.
"¿Dices
que te tortura el no poder escribir
o que
no puedes escribir porque estás torturado?
¿Dices
que estos tiempos te han convertido en un escéptico
o que
estos tiempos confirman tu escepticismo?
Lunamar Solano escribió:
Se refugia la luz en los intervalos,
soporte magno y continente
del infinito…
Iniciarme en tu silencio
me exime del laberinto de arena;
consigue con su implacable manifiesto,
estremecer los umbrales de la carne…
Dejo caer mis pupilas
sobre la indomable vertiente
que mana de tu lengua…
Brincan mis ángeles;
pavonean su insondable centelleo
entre mil enigmas astrales…
Siempre me alcanzan tus dedos,
empapados del origen
de todo elemento...
La lírica de tu verbo rima
con mis lágrimas de plata,
cuyo celeste resplandor
eterniza nuestro poema del alma…
Muy cadencioso en su lectura. Buenos versos de cierre y subrayo esas estrofas centrales sobre las que creo que pivota el poema. Todas mis felicitaciones. Un abrazo.
Salud.
Muchas gracias por tus palabras querido amigo...
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy