Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Gracias, Bruno, por dejar tu amable palabra junto a estos versosBruno Laja escribió:Es dulce y lenitivo, como una medicina de invierno. Se lee con cauce y también permite el abandono, el dejarse ir, el descanso.
Un placer,Pilar.
Abrazos.
Hermoso, PIlar, de quien sabe pensar y decir... Mi enhorabuena!Pilar Morte escribió:Que sea suave tu voz,
que salpique el rostro una brisa sin mancha
y que vibre el cuerpo como un violín templado.
Ven al paso de huellas blancas,
alma en flor que abre sus pétalos al verdor del huerto
No traigas la tormenta en la garganta
ni granizo en el pensamiento
porque se mueren los versos de las manos
y se apagan las luces de mis lámparas
No es tiempo de sonidos destemplados,
de noches sin luna para no ver la ira,
de gritos que arrugan la piel.
Ven despacio,
que pensar no deshaga la armonía,
aún hay palabras dulces
cuando amargo es el fruto de la boca.
Recuérdame la luz de la memoria que escribió el tiempo,
para que pueda abrazar las raíces de tu mente.
Queda poco camino y hay que evitar caer
sobre los cardos que salpican las orillas,
en los surtidores del dolor que riegan el alma.
Que el tren de la paz conduzca el final del camino.
Gracias, Rosa, por tus amables palabrasRosa Martín escribió:Es complicado el camino hacia la paz, compañera,
pero iniciarlo ya es un logro...
Hermoso propuesta, Pilar,un placer de lectura.
Un abrazo y feliz semana.
