¡Elena!elena morado escribió:Mi madre me decía que no era bueno ponerse tampones
que eso no era para chicas solteras,
bajaba la cabeza y se ponía roja
porque a mi madre no le gustaba hablar de esas cosas
me acuerdo la primera vez que en mis bragas aparecieron manchas de sangre
me asusté,
tenía diez años pero apenas me había contado nada.
También se puso roja y me dijo que ahora tendría que ponerme unas compresas
que ya era una mujer,
La verdad, no recuerdo muy bien qué dijo, porque yo también me puse roja.
Me sentía avergonzada.
No quería compresas
no quería tetas
y no quería ser una mujer
Me gustaban mis vestidos bordados. Mis vestidos de ganchillo.
Mi hija sabe qué es la regla, qué son las compresas.
Ayer le expliqué qué son los condones
y el sida,
y las relaciones sexuales y las enfermedades venéreas.
Acaba de hacer diez años.
No le conté a mi madre que no me gustaban los tampones
tampoco le conté que ya había follado con mi chico de entonces
a los 17
Alguna vez oí que la primera vez tiene que ser especial y
no con alguien especialmente gilipollas
No me gustó.
Estaba deseando que acabara
igual que estaba deseando que acabara la clase de historia de don Manolo.
Estaba deseando que acabara como un lunes de trabajo.
Deseando que acabara como cuando espero media hora en la cola del súper y
la cajera no se mueve.
Sólo se movía el.
Después vinieron más orgasmos
algunos placenteros
en otros me vestí de negro.
Antonia Mauro del Blanco
Ya te lo han dicho todo en los comentarios precedentes, y la verdad es que dan en el clavo: frescura, valentía, e imágenes intensamente plásticas que meten de lleno a este texto en lo poético. En una poesía necesaria. En este mundo en el que vivimos hacen falta versos como los tuyos. Besos, valiente poeta.