I
Volaba con su escoba Margarita
echando al cielo entero maldiciones,
diciendo: "cerdos, ratas, ¡qué cojones!"
-malvada como nadie la brujita-
Es de nariz curvada, dientes pardos,
piel arrugada, más parece muerta,
es miope y de ojos claros; tira a tuerta.
Posa desaliñada entre los cardos.
Mas por andar grosera, en su descuido,
con un árbol gigante que asomaba
se dio tremendo golpe. (Ella lloraba)
y de la rabia le lanzó un hechizo:
"patas de rana, puerco y de serpiente,
dos setas venenosas, gallo y cabra.
¿Qué le falta al conjuro? ¡Abracadabra!,
¡conviértete madera en un chorizo!"
¿ Y adivinen qué?
Apareció la bruja sin un diente
con greñas chamuscadas: pelo rizo.