Marisa Peral escribió:Carmen López escribió:
Has visto el acabado mate del silencio,
sus vértebras moribundas,
sus auroras enmudecidas
en la arquitectura del mutismo.
Sabes que tiene cristales azules debajo de la lengua,
y entiende el frío como una parte más del cuerpo,
comprende la afonía de la noche,
y te llena los oídos de cenizas.
Sientes el vértigo sordo de los ángeles sin nombre
el crujir de sus alas a modo de respuesta
la afasia en su caída
y aun así, le gritas en tus sueños.
Has visto el acabado mate del silencio,
su mudez más absoluta
y aun así le pides en imposible ruego:
Miénteme, Miénteme, Miénteme.
Realmente bueno querida Carmen, llega hasta el fondo del alma.
Creo que el silencio, que muchas veces buscamos y necesitamos, está asociado a la soledad, a esa soledad dura y cruel que no buscamos y este poema me transmite eso silencio y dolorosa soledad.
Desde el título atrapa el poema y sinceramente no sé si será uno de los mejores que te he leído pero desde luego engancha hasta esa súplica final imperiosa y doliente.
Cuánto me gusta leerte, amiga mía.
Abrazotes grandes.
Pues yo pienso algo diferente...yo creo que el silencio que buscamos es otro, el que reside en una puesta de sol, en un paisaje marino, en un bosque, en los brazos de tu pareja después de haber hecho el amor,,,,ese silencio es el buscado en el sentido de que es bueno, pero ese no se puede crear, acontece...El de la soledad no creo que se busque tanto..y además siempre está repleto de ruidos que creamos nosotros mismos..., aunque se produzca por causas ajenas a nosotros o a nuestro interés. En todo caso, el silencio no nos engaña, aunque a veces nos gustaría que lo hiciese.
Me alegra encontrarte en lo que escribo, Marisa, me llega, siempre, un aliento que te agradezco y mucho.
Muchas gracias por tu tiempo y tus amables comentarios.
Abrazos a capazos, amiga.
Carmen
La primera tarea del poeta es desanclar en nosotros una materia que quiere soñar.
Gastón Bachelar.