![Imagen](http://img135.imageshack.us/img135/2197/image5lj8.jpg)
No era muy tarde, cuando sentí en mi espalda
el silencio abrumador de tu respiración.
No, no era tarde. Pero en mi alma, la oscuridad
era espantosa, y los rincones de mi inconciencia
no percibian la luz moribunda de tus besos.
Llegaste como un felino, dispuesto a dar el zarpazo
final de tu ignorancia; esa ignorancia de hombre
guapo que se encuentra con la vida, y piensa
que merece vivirla sin complicaciones.
El olor de tu piel me pareció extraño,
enrarecido, mundano y perverso, con la infiel
evocación de otros cuerpos.
Con el sello indeleble de otros encuentros.
Entonces, cerré mis ojos, y te desterré de mi mente…
¡Te aborté de mis recuerdos!
Gracias a Dios, todo se redujo a un mal sueño.
No era muy tarde…