Pablo Iglesias y podemos, creo que van en este orden.

[F. Enrique]

No sé lo que dice, no lo hace en la única lengua que existía antes del Desastre de Babel, pero me convence su alegria. Es la mauvaise herbe, esa que nunca muere.



Me siento un poco triste por la actitud abiertamente hostil y siempre evocando al desastre sin orden, al mal latente en las buenas intenciones y a los jinetes del Apocalipsis que el periódico que leo casi desde su fundación ha tomado contra Podemos, en general y, especialmente contra su cabeza visible, Pablo Iglesias.

Voté a Podemos en las pasadas elecciones europeas, me alegré mucho de su clamoroso éxito y permanezco inmerso en el idilio porque a día de hoy mi intención es seguir votándoles.

Por la personalidad de su líder entiendo las alusiones a una vuelta al mesianismo hispánico, de tan funestas consecuencias bajo los Austrias menores que precipitaron al país por debajo del umbral de la ruina, y que nos adviertan de la facilidad que tenemos los españoles para llegar más abajo del fondo en cuanto se nos da una oportunidad para hacerlo.

Por ello, ni yo mismo descarto que podamos ir de lo malo a lo peor. Pero no lo creo, no creo que un partido consciente de que la causa principal de su éxito habría sido la corrupción de los otros partidos cometiera el error de permitir muchas licencias en ese aspecto a sus miembros, ya sé que el PP de Aznar vivió una situación parecida para asaltar el poder e intentó parecer honrado todo el tiempo que pudo con resultados desastrosos, pero entre la derecha española tomar lo público como privado y viceversa según la conveniencia es un hábito muy extendido y lo han exportado, con no poco éxito, a los demás. Sé que Podemos ahora tiene la exigencia de tener que concretar un programa, los conservadores temen una concatenación de locuras extremistas, no lo veo así, pienso que hay propuestas que causan pavor en el electorado que deben ser mantenidas firmemente porque, desde mi punto de vista, se está en lo cierto. Además van a bajar un poco las aspiraciones de sus ideales e intentarán mostrar unos proyectos con mucha más concreciones y menos ideas de las que tienen hoy en día para ponerse en consonancia con la gente de nuestro tiempo, ésa a la que pretende gobernar. Los progresistas se verán abandonados por parte de su electorado y denunciarán la usurpación insidiosa del nombre de Pablo Iglesias por parte del líder de Podemos y harán uso de todas las triquiñuelas afectas al conceptismo barroquista con las que ni afirman ni niegan y tópicos manidos pero eficaces aún; ¡ay, el dichoso mal conocido que nos corroe! Utilizarán con tanta retórica como les dejó Zapatero una dialéctica tan enrevesada que parecerá que hablan desde el pálpito y no desde el púlpito, pero no es cierto. Su experiencia en el ruedo político la exprimirán para avisarnos de los peligros que corremos en manos de estos jovencitos irreverentes, tan bien formados pero llenos de desviaciones y con la cabeza en las nubes. Si los políticos que tenemos ahora tienen los pies en el suelo deben pisar sobre arenas movedizas y los que caen no son ellos.

Existe la posibilidad, por desgracia la más probable, de que Podemos lo haga mal, pero creo que sería en los términos que conocemos, la fascinación irresistible del poder y de la buena vida, que no cambiaran de ropa pero sí de marca, que encontraran con facilidad trabajo familiares y amigos, que tuviéramos a una inútil al frente de la ciudad más bonita del mundo, que empezaran a aflorar casos de corrupción... Pero no es una elección vitalicia, podemos quitarlos de donde los pusimos a la primera oportunidad.

A pesar de mis temores reafirmo que mi voto será para ellos, sin ninguna duda, porque en el origen de su triunfo estaría la reforma profunda y democrática de los partidos tradicionales. En su lenguaje osado vería implícito la posibilidad de aprobar otra constitución. Una constitución debe ser algo sagrado mientras sirve y se adecúa a los tiempos y a las circunstancias, cuando no es así, hay que cambiarla. Es necesario solucionar de una vez por todas las relaciones con los territorios secesionistas, cuyos partidos tradicionales, al menos en Cataluña, han demostrado las pocas virtudes y los muchos defectos de los de ámbito nacional.

Ceuta y Melilla cambian de rostro, ¿a alguien le importa? A los políticos ceutíes, por lo menos, en absoluto.

Si Brassens volviera, yo sería su escudero y Podemos se quedaría sin mi voto.

[Hallie Hernández Alfaro]

Buenos días, F. Enrique.

El texto que compartes es un breve pero intenso ensayo con una actualidad innegable.
Me ha gustado cómo distribuyes argumentos y los posicionas en ángulos que buscan objetividad.
La última línea es especialmente hermosa.

Respetable tu discurso tan bien logrado. Espero sea un punto de encuentro entre muchos compañeros y amigos de Prosa.

Carmen López publicó hace unas semanas un breve (muy gráfico e ilustrador) acerca del mismo tema.
De Poder es el título. Quizá sería interesante leer su propuesta y los comentarios recibidos.

Salud y felicidad.

[F. Enrique]

Gracias, Hallie. En España resulta difícil hacer autocrítica. Soy un pensador, por lo tanto muy mal político, pero he dicho lo que siento.

Un abrazo.

[Julio Gonzalez Alonso]

Me gusta tu alegato y comparto la mayoría de tus criterios. Me siento huérfano, abandonado y sin compañeros después de haber militado en organizaciones como la CNT y tardíamente haberme decidido votar y apoyar a unas izquierdas hoy diluidas en el laberinto del poder y desparecidas ideológicamente. ¿Tendré que volver a los antiguos principios y convicciones libertarias? No sé. Lo dudo. Aunque la afirmación de Lord Acton (1887) de que el poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente se hace cada vez más patente y de este destino no escapará ni Podemos, me temo.

El modelo comunista no pudo ser superado en ningún país, con más comunismo. El modelo capitalista tampoco será superado con más capitalismo. ¿Nos queda algún modelo? Creo que sí, que hay que gestarlo, impulsarlo, llevarlo adelante, recuperando la democracia secuestrada, haciendo que ser político no sea una profesión (para eso ya tenemos a los tecnócratas, muy bien pagados, por cierto) y que el que quiera servir al pueblo y la sociedad lo haga por un periodo máximo de cuatro o cinco años, dando cuenta de sus negocios a la entrada y la salida y haciendo balance de su gestión, que si fue mala, pueda llevarle a la cárcel. Al más puro estilo ateniense. Nada de prebendas y sueldos a perpetuidad por haber sido parlamentario o ministro. Y, en todo caso, que se apliquen las medidas que acuerdan y se busquen trabajo con el salario mínimo que ellos decreten para los trabajadores. Y por los políticos llegaremos a los empresarios y grupos económicos de poder. Algo habrá que cambiar en las reglas de juego de la economía, incluso el dinero, su valor o su forma de existir, la distribución de la riqueza e impedir su acumulación ilícita siempre en pocas manos, un salario máximo para todos... y yo qué sé cuánto más haría falta. Pero, de momento, estamos en esta crisis que nos la trajeron para no irse y hay que hacer que salir de ella sea que salgan con la misma los corruptos,los modos,las leyes y el sistema que lo permite.

Bueno, me has dado la oportunidad de desahogarme un poco con tu texto político. Todo es necesario y hace bien. Gracias y un abrazo. Salud.

[Arturo Rodríguez Milliet]

Apreciadísimos amigos.

No soy quién para hablar de la realidad sociopolítica que vive España en la actualidad, sin embargo, me pesa demasiado la amarga experiencia que -desde hace 15 años- vivimos en mi país, Venezuela. No deja de sorprenderme las marcadas semejanzas (idénticas, en realidad) que observo entre el debate que hoy sostienen en España y los que protagonizamos los Venezolanos hace 16 años. En aquellos tiempos, estabamos signados por una profunda frustración arrastrada durante gobiernos democráticos de un bipartidismo que se había alternado en el poder por 40 años. Las quejas?... las mismas que he leido de ustedes en este foro y otras tantas fuentes más de este mundo tan interactivo.

Por aquellos tiempos recuerdo intensas tertulias entre amigos en las cuales argumente, infinidad de veces, cosas muy, pero muy parecidas a las que he leido de tí y de Carmen en este foro...

De este lamentable caldo de cultivo surgió, también repentinamente, un liderazgo nuevo, tremendamente carismático, fresco y entusiasta, con un discurso bien argumentado y sustentado que destacaba como urgencia prioritaria el restablecimiento de la ética y la moral en el ejercicio del poder y un larguisimo etcétera que -para no agotarlos- podrán encontrar facilmente en los discursos de Iglesias.

Quién hoy se constituye como el máximo lider del movimiento Podemos, ha visitado nuestro país y se ha manifestado abiertamente a favor del proceso "involucionario" que bajo la conducción de Hugo Chávez nos ha llevado a la más severa crisis de nuestra historia. Hay quienes afirman que, incluso, recibió apoyo financiero (no me consta, pero de igual modo ha sido una práctica bien documentada y común de este gobierno para aumentar su influencia en otros paises de la región)

Actuamente tenemos: el mayor indice de criminalidad impune (50 asesinatos cada fin de semana sólo en la ciudad capital); la tasa de inflación más alta del mundo; devaluación de la moneda con un sistema de paridad cambiaria que en ninguna parte del mundo logran entender (El cambio oficial es de Bs 6,30 por Dolar pero Ud solo lo consigue en el mercado paralelo a Bs 184,50... si, leyó bien); nuestra producción petrolera bajo estrepitosamente y parte de ella practicamente se regala a Cuba a cambio de... espejismos revolucionarios; niveles de desabastecimiento en todos los rubros jamás vistos en nuestro país; secuestro paulatino de todos los poderes públicos que actualmente son una extensión servil del poder ejecutivo; elecciones amañadas; persecución descarada a la oposición política con presos de conciencia, represión brutal y violación de derechos humanos a quienes manifiesten contra el gobierno, muy particularmente nuestros estudiantes universitarios...

No quiero agotarlos, resultaría interminable la sola mención de todos los males que no aquejan, pero algo si puedo decirles... la corrupción nunca fue combatida y hoy en día es mil veces más grosera y asqueante.

La primera vez, también yo vote por Chávez... "para darle un chance de cinco años y probar que tanto podría hacer, total si no funcionaba en las siguientes elecciones lo sacaríamos..." Nunca contamos con que, en cinco años, apoyado en su popularidad, lo único que hizo fue propiciar todos los cambios para no salir nunca del poder. Ni siquiera con su muerte, pues nos impuso un sucesor que es un poco más de los mismo.

Algunos amigos cubanos me decían en esos tiempos que estabamos comenzando a transitar el rumbo que ellos sufrieron 50 años atrás... nunca les creí, me pareció una exageración porque nuestras realidades eran muy diferentes y bla, bla, bla... el equivocado fui yo...

En esta oprtunidad, preferiría ser yo nuevamente el equivocado... pero creo que están por comenzar lo que nosotros padecemos desde hace 15 años.

Los quiero y aprecio mucho, sólo por eso me permito estas líneas, no pretendo polemizar, tan solo les presto un espejo donde espero que jamás se encuentren reflejados.

F E L I Z N A V I D A D

[F. Enrique]

Dado el interés de lo que dices y la vigencia que tiene lamento darte una respuesta tan tardía, Julio. Estoy de acuerdo con tu posicionamiento, creo que esta democracia nuestra nos ha llevado al desencanto y que lo más probable que el idilio que muchos tenemos con Podemos sea fruto del aborrecimiento que sentimos por los partidos tradicionales empezando por los dos que se turnan en el ejercicio del poder. Poco puedo añadir a lo que dices, sigo encantado con tu talante y con tu compromiso, eres un ejemplo de coherencia ideológica y de persistencia en la lucha por la justicia y la igualdad.

Un abrazo, Julio, muchas gracias.

[F. Enrique]

Comprendo, Arturo, la decepción que sufres por la situación de tu país y que encuentres ciertos paralelismos con el mío mirando hacia atrás y analizando el momento en el que empezó a gestarse esta situación, pero pienso que la historia no tiene porque repetirse. No creo que Podemos vaya a ganar las elecciones, en caso de hacerlo no lo haría por mayoría absoluta y necesitaría coaliciones y encontraría una oposición dispuesta a encaminarse en la misma dirección en caso de tener que frenarle los pies ante un uso abusivo del poder. Pienso que desde que Podemos empezó a tener posibilidades reales de entrar con fuerza en el juego político ha empezado a moderar su discurso y a valorar las soluciones de los problemas desde un punto de vista más pragmático y menos radical. El problema principal que tenemos es el bipartidismo maleado, su falta de responsabilidad y su tolerancia respecto a la corrupción, está bien que empiece a sentir el aliento de una tercera fuerza política. A pesar de que Podemos ha ido perdiendo algo de fuerza en estos meses sigo viendo las cosas tal como las expresé entonces, puede ser una opción interesante para cambiar algo, para que dejemos de percibir que la democracia está estancada y para que se pongan sobre la mesa viejas y legítimas aspiraciones.

Te agradezco mucho, Arturo, tu comentario extenso y tan bien documentado, me siento comprensivo ante él aunque no lo comparta en lo que se refiere a la irrupción de este nuevo partido en España. Creo que difícilmente vamos a poder comprobar quien tiene razón; el electorado español no acaba de castigar severamente a los partidos que llevan años gobernándole, los tiene asumidos como un mal inevitable.

Un abrazo.

[Malak D. Ffiomme]

estimado compañero, me gustó tu escrito, yo tambien les vote porque como tu pienso que mas mal no pueden hacerlo, en eso confio. un abrazo

[F. Enrique]

Te doy toda la razón, ni adrede se puede hacer tan mal como lo han venido haciendo durante muchos años. El pueblo español tiene derecho a experimentar otras cosas, a comprobar que la corrupción se castiga y que un político puede ser un hombre honrado.

Un abrazo, Malak.