Certeza

[Hallie Hernández Alfaro]

Se acabó. Se acabó vivir a oscuras
esperando que tu voz abra unos ojos
que se negaron a mirar
más allá de tu figura.


casi diría, que tu poema hace el amor con la vida
y entrega su etéreo ser ....

Q grande eres


Gracias

Curra

Curra, muchas gracias por tu solidaridad y cariño para mis humildes cosas.

Abrazote.

[Hallie Hernández Alfaro]

Magnífico poema, querida amiga Hallei, con versos muy sugerentes y de gran profundidad y valor.
El final, ese alearse en vuestra sed, me ha parecido genial.
Mi enhorabuena.
Fuerte abrazo.

Miguel Ángel, te agradezco mucho tu generosidad y cercanía.

Abrazo y felices horas.

[Hallie Hernández Alfaro]

Excelente, Hallie. Un abrazo.

Muchas gracias por tu huella siempre valiosa, Ramón.

Abrazo y felicidad.

[Hallie Hernández Alfaro]

Buen poema, Hallie. Me gustó leerte
Besos
Pilar

Muchas gracias por estar, querida poeta.

Beso grande y felicidad.

[Hallie Hernández Alfaro]

Excelente poema. Un sincero abrazo.

José Manuel F.Febles

José Manuel, muchas gracias por tu paso generoso y tu atención.

Abrazos y felicidad.

[Luis M]

.

...eran la insolencia del calor,
sus muslos blancos,
el tetrix enamorado.

.

Un poema precioso de una sensibilidad y calidad metafórica realmente notables.
Siempre es un verdadero placer leerte, querida amiga. Mis felicitaciones y abrazo.

[Hallie Hernández Alfaro]

Lo de "tetrix enamorado" me ha parecido muy original. Superpones un reloj en la misma esfera ocular, con un iris fragmentado en minutero y segundero. Esa "levedad divisoria del trece" da que pensar.

Un fuerte abrazo, Hallie.

Óscar amigo, gracias miles por tu generoso reflejo.
Tetrix enamorado, el juego y su adrenalina, la figuración, los movimientos, la ingeniosidad que requiere...; y el tiempo tan subjetivo, tan milagroso, tan enigmático; puede con muchas cosas si actúa como cómplice, si lleva el viento a favor. Las pupilas-reloj, los ojos, el visor, el anhelo.
El trece es un número muy importante para mí, le debo mucho a esa cifra aparentemente menos dotada de suerte. El trece o la nada. El poemilla intenta dar fe de la Certeza, de la entrega firme y definitiva.

Va mi abrazo fuerte.

[Hallie Hernández Alfaro]

La espera apasionada, los segundos como promesa, el misterio del encuentro se enriquece de palabras de prórroga, expectativa que inunda el abrirse hacia el mundo y ser torrente de los sentidos en versos, en ebullición ardiente y augurio.
Que placer es leerte Hallie.
Un beso grande

Tus palabras hermosísimas son un honor para mi humilde trabajo.

Gracias de corazón, querido amigo.

Abrazos.

[Hallie Hernández Alfaro]

Hallie Hernández Alfaro, Gracias poeta, tu fina pluma se desliza. Siento
que te abres a los tiempos y compartes con la vida lo que tienes dentro.
Mis respetos, y mi abrazo sincero.
Desde mi humilde mirada, allá, en mi Argentina.

Mi querida Mirta, sos pura generosidad y cariño. Muchas, pero muchas gracias, por tu valiosa presencia en mis cosas.

Abrazote y felicidad.

[Hallie Hernández Alfaro]

Hallie, me ha gustado mucho, y el final es impactante. Un placer amiga leerte y un abrazo muy fuerte.

Mil gracias por tu visión más que generosa, querido amigo.

Abrazo fuerte.

[Hallie Hernández Alfaro]

Interesante y sugerente, Hallie. ¿Qué papel cumplen las manecillas del reloj? A ellas apunta nuestra mirada, pero ellas, ¿alrededor de qué orbitan? Todas estas cuestiones, que giran alrededor de la cuestión filosófica del tiempo, creo que las aborda tu precioso poema. Por lo menos esto me sugirió a mí.

En todo caso, ha sido un placer leerte.

Un fuerte abrazo.

Buenas noches amigo. Gracias por detenerte aquí y dejar tu impronta siempre amable y ponderada.
Las manecillas del reloj, esas agujas irreverentes que despliegan expectativas, pasan veloces, tardan en ser. Son posibilidades subjetivas a veces carentes de significado y otra más, vitales para nuestro propio universo. El tiempo está fuera y dentro, en ocasiones muerde y en otros momentos, nos hace un guiño para la valiosa noción de la felicidad.

Un placer recibir tu comentario.

Abrazos.

[Hallie Hernández Alfaro]

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...eran la insolencia del calor,
sus muslos blancos,
el tetrix enamorado.

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Un poema precioso de una sensibilidad y calidad metafórica realmente notables.
Siempre es un verdadero placer leerte, querida amiga. Mis felicitaciones y abrazo.

Muchas gracias por tu generosidad, amigo. Tu sensibilidad me favorece, lo sé.

Abrazo y felices horas.

[Julio Gonzalez Alonso]

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Manecillas luminosas que todo lo podían.
Horadaban fechas para crear infinitud en la esperanza,
besaban la levedad divisoria del trece y el vacío,
curaban cualquier daño residual;
parecían un ardid convincente
en tu ausencia los domingos nublados.

Resbalaban alucinadas
para anidar en la vida de tus palmas;
eran la insolencia del calor,
sus muslos blancos,
el tetrix enamorado.

Solían reincidir en péndulos ciegos, sordos, húmedos
y marcar en cada hora tu alma lamiendo mis versos
con la certeza de abrigar el mismo aire.

Manecillas sabias que todo lo podrán,
niego la furia del ocaso
para alearme en vuestra sed.

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La certeza la da el paso del tiempo por entre el cual haces transitar tus versos para el amor. Me ha sorprendido el uso de alearme, supongo que del verbo alear y que al ser intransitivo no admite la forma reflexiva, una licencia gramatical muy efectista.
Un abrazo primaveral, Hallie. Salud.

[Maria Pilar Gonzalo]

Cuando te leo querida Hallie, tengo la sensación de que diseccionas los detalles de la vida, no solo unos pocos, creo que separas aquí y allá y encuentras amor y devoción en cada instante. Envidio esa calidad que a mí me falta.

Un placer seguirte de cerca querida amiga.

Abrazos.

[Marisa Peral]

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Manecillas luminosas que todo lo podían.
Horadaban fechas para crear infinitud en la esperanza,
besaban la levedad divisoria del trece y el vacío,
curaban cualquier daño residual;
parecían un ardid convincente
en tu ausencia los domingos nublados.

Resbalaban alucinadas
para anidar en la vida de tus palmas;
eran la insolencia del calor,
sus muslos blancos,
el tetrix enamorado.

Solían reincidir en péndulos ciegos, sordos, húmedos
y marcar en cada hora tu alma lamiendo mis versos
con la certeza de abrigar el mismo aire.

Manecillas sabias que todo lo podrán,
niego la furia del ocaso
para alearme en vuestra sed.

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Es un lujo leerte, amiga Hallie, mi felicitación sincera y admirada.
Remarco estas dos estrofas que me parecen geniales e imprescindibles.
Beso grandote.