Hoy no consigo ni recordar tu nombre.

[Marisa Peral]

Hoy no consigo ni recordar tu nombre.
Nada fuera de lo común.

Nuestras horas caminan dando la espalda al tiempo
y finos dedos de luz van hilando visillos.
Este ligero viento repentino sacude las sábanas
con la esperanza falsa de otros días mejores.

Qué fue de aquel sueño.
Qué del sortilegio de las velas.

Hoy palidece la casa junto al mar con ventanas cerradas
y gaviotas que buscan su alimento
entre los desperdicios de palomas -ya muertas-
acosadas por legiones de hormigas.

Nada fuera de lo común.
Hoy no consigo ni recordar tu nombre.

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©MAR

[Rafel Calle]

Hermoso poema de Marisa.

[Pilar Morte]

Las cosas no son ya lo que fueron, todo cambia para bien o para mal. Un poema nítido que se
lee con agrado. Un placer
Besos
Pilar

[F. Enrique]

Este melancólico poema que cierra con los primeros versos en distinto orden me ha traído hasta aquí, Marisa, he podido saborear ese aroma en el aire de alas caídas, y me ha gustado, vaya si me ha gustado.

Un abrazo.

[Miguel Ángel Martínez Góm]

Marisa, me gustó leerte en este nostálgico y bello poema.
Un abrazo.

[Virginia Nas]

Desolador...

[Manuel Alonso]

Un hermoso poema amiga lleno de nostalgia y desencanto, un placer, un abrazo.

[Marisa Peral]

Hermoso poema de Marisa.

Gracias, compañero

[Marisa Peral]

Las cosas no son ya lo que fueron, todo cambia para bien o para mal. Un poema nítido que se
lee con agrado. Un placer
Besos
Pilar

La realidad, Pilar, es que es mucho mejor no mirar hacía atrás porque nada es como lo recordamos y hemos idealizado.
Un placer es que vengas y me leas con tanto cariño.
Besos, amiga.

[Ventura Morón]

Un aire de nostalgia traido con sentimiento y sensibilidad. Es un lujo leerte Marisa.
Un beso

[Marisa Peral]

Este melancólico poema que cierra con los primeros versos en distinto orden me ha traído hasta aquí, Marisa, he podido saborear ese aroma en el aire de alas caídas, y me ha gustado, vaya si me ha gustado.

Un abrazo.

Agradezco muchísimos tus palabras F.Enrique y me alegro de que te haya gustado este poema.
Gracias de nuevo y un abrazo.

[Ramón Carballal]

Es un buen poema, Marisa. He dsifrutado con la lectura. Un abrazo.

[E. R. Aristy]

Hoy no consigo ni recordar tu nombre.
Nada fuera de lo común.

Nuestras horas caminan dando la espalda al tiempo
y finos dedos de luz van hilando visillos.
Este ligero viento repentino sacude las sábanas
con la esperanza falsa de otros días mejores.

Qué fue de aquel sueño.
Qué del sortilegio de las velas.

Hoy palidece la casa junto al mar con ventanas cerradas
y gaviotas que buscan su alimento
entre los desperdicios de palomas -ya muertas-
acosadas por legiones de hormigas.

Nada fuera de lo común.
Hoy no consigo ni recordar tu nombre.

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©MAR

Me conmueve la belleza y melancolía de tu poema, MAR. Abrazos, ERA

[Josefa A. Sánchez]

Lo peor de la pérdida es recordar lo perdido. Un poema cargado de desesperanza y belleza que me ha encantado leer.
Un abrazo.
Pepa

[Ernesto Ravelo]

Hoy palidece la casa junto al mar con ventanas cerradas
y gaviotas que buscan su alimento
entre los desperdicios de palomas -ya muertas-
acosadas por legiones de hormigas.


Bello poema, descriptivo.
Saludos Marisa