Rojo

[M. Sánchez]

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[Concha Vidal]

Este es un dulce poema intimista, penetrante, que da como algo meterse en él.

Desde tu rojo mar , hasta el azul mio y mediterráneo., buenos días.

[Pilar Morte]

Todo tú, tu intimidad hecha verso. Magnífico, Manuel. Una preciosidad. Felicidades
Besos
Pilar

[Mitsy Grey]

Hermosa mitificación del colorido... rojo, poder y voltaje.... Un saludo desde mi tierra la Argentina.

Mitsy Grey

[J. Paz]

Precioso, Manuel. Un placer de lectura.
Feliz día y un fuerte abrazo,

Judit

[Liz Barrio.]

Porque ha sido pensarte cierta parte del pecho,
cuando venga de estar una noche a caballo
en las playas de Cádiz, voy a pasar por ti,
aunque sea imposible el latido del viento
de hace ya veinte años.
Olvidarás tu cuerpo sobre el mío,
y habrá un rincón oscuro que sabrá de nosotros.

Hay tantos meses fríos guardados con esfuerzo,
que mi desnudo busca en qué pensar
para acabar rendido a la intemperie.

Permanece el silencio demasiado sonoro,
y las paredes quietas, igual que una mirada
en cuyo rostro veo
un sol para quemarme.

Me llenaré de fuego,
no importa que no arda,
y este mar será rojo,
algo mucho más rojo que un alto color rojo,
una herida de rojo que curarme.

Uff, qué poema tan hermoso. Me ha llegado hondamente.
Un abrazo, un beso y claro... gracias por escribir así, POETA

[M. Sánchez]

Amigos lectores y comentadores, un abrazo muy fuerte para todos.

[Marisa Peral]

Porque ha sido pensarte cierta parte del pecho,
cuando venga de estar una noche a caballo
en las playas de Cádiz, voy a pasar por ti,
aunque sea imposible el latido del viento
de hace ya veinte años.
Olvidarás tu cuerpo sobre el mío,
y habrá un rincón oscuro que sabrá de nosotros.

Hay tantos meses fríos guardados con esfuerzo,
que mi desnudo busca en qué pensar
para acabar rendido a la intemperie.

Permanece el silencio demasiado sonoro,
y las paredes quietas, igual que una mirada
en cuyo rostro veo
un sol para quemarme.

Me llenaré de fuego,
no importa que no arda,
y este mar será rojo,
algo mucho más rojo que un alto color rojo,
una herida de rojo que curarme.

Hola, querido amigo, acabo de llegar -casi- y apenas leo de carrerilla tu hermoso poema y te saludo... antes de nada.
Y remarco esos tres versos que me han erizado la piel
Vuelvo, vuelvo para leerte y volveré a remarcar otros versos porque todos me llegan y me gustan, lo sabes.
Un beso grande.

[M. Sánchez]

Hola Marisa, espero que ese regreso sea de unas vacaciones fantásticas.
Gracias por leerme.
Un fuerte abrazo.

[F. Enrique]

Siempre he tenido debilidad por tu poesía y en este Rojo vuelvo a encontrar los motivos de ello, un baño de nostalgia y de melancolía que hace temblar los cimientos del idioma,muy bueno, con versos que estremecen, con secuencias que rompen los esquemas.

Un abrazo.

[M. Sánchez]

Enrique, para mí es un honor poder compartir contigo estas cosas que publico. Pero si encima, como me dices, sé que pasas un rato agradable leyéndolas, entonces es una satisfacción mayor aún. Te agradezco mucho el que hayas querido leerme y dejarme este valioso comentario.
Un fuerte abrazo.