Mi boca no calla

[Noemi Sánchez]

Mi boca no calla

Tengo miedo de mí,
de las palabras,
de esa boca que no calla nada.

De la locura, de mi risa,
de mis carcajadas
aquellas tardes en la colina,
caminando, tratando de olvidar la pesadumbre
de la tarde negra.

Tengo miedo a la caída,
al dolor de la herida,
miedo a las escupidas
y a los aullidos que cortan las almohadas.

Pero mi miedo se hace más corto,
cuando me tomas las manos y te siento conmigo,
y reímos haciendo ecos por los valles floridos.

Aquella manada que diga y que ruja,
mientras la gente no coma gente
no corro peligro...
que sigan los ladridos
mientras los dos reímos.

[Víctor Vergara Valencia]

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Las manos, mi amiga.
¡Qué importante son las manos!, ¿verdad? que nos dan cobijo, calor, asidero para no caer. Y que devuelven ese roce sagrado de la vida.

Precioso, Noemi. Un beso.


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[José Manuel Sáiz]

Noemí, creo que este es uno de los poemas que más me han gustado de ti. Pienso que está muy bien escrito y llega al corazón al leerlo. Te felicito amiga.
Un abrazo. Y celebro verte de nuevo por aquí.
J. manuel

[Sara Castelar Lorca]

Un poema donde el ser amado se convierte en el refugio donde nada puede hacernos daño, tan necesario, tan vital.
Un texto muy emotivo, Noemí.

Abrazos

Sara

[Ricardo Serna G]

Noemi Sánchez,

Corazón y sentimiento
en tu poema..

me encantó


Un abrazo fuerte, amiga

[Noemi Sánchez]

Víctor las manos son muy importantes como las miradas, esas que nos hace olvidar que hay gente mala y que lastima, esa que daña cuando abre la boca.

Gracias por estar en mis letras.

Un beso igual para ti.

[Noemi Sánchez]

Manuel, (Txopo) intento día a día mejor mi forma de escribir, quiero aprender y creo que cuando las palabras llegan a mis manos sin estar rebuscando, salen mejor, y este fue así… de un instante.

Agradezco mucho tu comentario mi querido Manuel, yo también me siento feliz por estar de regreso.

Un fuerte abrazo para ti, me gusta verte en mi letra.

[Noemi Sánchez]

Sara, tienes razón sostenida de aquella persona lo de mas es lo de menos.
me alegra verte en mis letras.

Un abrazo y mi cariño para ti.

[Noemi Sánchez]

Sr. Ricardo, el placer es mío por verle en mis letras, de igual manera le mando un abrazo con cariño.

[Raúl Castillo]

Mi boca no calla

Tengo miedo de mí,
de las palabras,
de esa boca que no calla nada.

De la locura, de mi risa,
de mis carcajadas
aquellas tardes en la colina,
caminando, tratando de olvidar la pesadumbre
de la tarde negra.

Tengo miedo a la caída,
al dolor de la herida,
miedo a las escupidas
y a los aullidos que cortan las almohadas.

Pero mi miedo se hace más corto,
cuando me tomas las manos y te siento conmigo,
y reímos haciendo ecos por los valles floridos.

Aquella manada que diga y que ruja,
mientras la gente no coma gente
no corro peligro...
que sigan los ladridos
mientras los dos reímos.

Precioso poema de como se sobreviene al temor, al dolor con el apoyo de un ser querido. La ultima estrofa es un deleite. Un placer leerte amiga poeta.

Un abrazo.

[E. R. Aristy]

Mi boca no calla

Tengo miedo de mí,
de las palabras,
de esa boca que no calla nada.

De la locura, de mi risa,
de mis carcajadas
aquellas tardes en la colina,
caminando, tratando de olvidar la pesadumbre
de la tarde negra.

Tengo miedo a la caída,
al dolor de la herida,
miedo a las escupidas
y a los aullidos que cortan las almohadas.

Pero mi miedo se hace más corto,
cuando me tomas las manos y te siento conmigo,
y reímos haciendo ecos por los valles floridos.

Aquella manada que diga y que ruja,
mientras la gente no coma gente
no corro peligro...
que sigan los ladridos
mientras los dos reímos.

Aquella manada que diga y que ruja,
mientras la gente no coma gente
no corro peligro...
que sigan los ladridos
mientras los dos reímos.


Me envolvió con su tul sublime tu poema querida Noemí. El héroe es quien cruza su propio miedo y quien llega a entender la sabaduría de la duda. En particular me gusta mucho éste final, aunque sabemos que el hombre es bestia que se traga a la gente viva, y hemos estado en su vientre, literalmente, no somos caníbales...que sigan ladrando, algunos y que siga la risa sonora de los amantes. Me encantó tu poema.

[Noemi Sánchez]

Raúl Castillo, estoy de acuerdo contigo, el dolor se sobrevive mejor tomada de la mano de ese alguien que te ama, gracias por tu comentario tan especial, me alegra encontrarte en mis letras y que te haya gustado.

Otro abrazo para ti.