Apocalipsis doméstico.

[Javier Dicenzo]

Me parece simpático este poema un placer pasar por tus versos.

[Mauro Colomina]

Pepa, la sencillez y sus metáforas hacen de este poema algo grandioso. Enhorabuena.

[Nésthor Olalla]

"el desorden de estar vivo", sí, así es, ya nos llegará la muerte ordenadora de todo.

Me ha gustado tu "apocalipsis" de andar por casa, compañera.


Besos2

[Luis M]

Jeje, ...me da que no eres ni mucho menos la única inmersa en este tipo de catástrofes. Muy original y simpático tu poema, Pepa. me gustó mucho. Un abrazo, amiga.

[Marius Gabureanu]

Estupendo poema que condensa visiones oníricas del desastre, hay una tonalidad irónica, algo que hace sonreír a pesar de la gravedad. Muchos abrazos, me ha encantado, Pepa.

[Arturo Rodríguez Milliet]

Las divinas paradojas... con cuanta armonía y exquisites estética nos muestras "el desorden". Sublime poética de lo cotidiano. Saludos a esos duendes que, en vez de libros, escupen ideas. Un abrazo.

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Luna , por el generoso comentario. Me había olvidado de este poema (otra vez el desorden).
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Jorgesalvador. La alegría es que pases, a pesar del polvo.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, José Manuel. Tu presencia siempre da un plus de categoría a mis letras.
Un abrazo.
Pepa

[Ignacio Mincholed]

"el desorden de estar viva...", ya tienes razón ya, Josefa.

Felicidades y un abrazo.
Ignacio

[Jerónimo Muñoz]

Los verdaderos poetas sacan poesía, verdadera poesía, incluso de las cosas más triviales. Pero no es trivial tu poema, que tiene un final profundo y de gran lirismo.

Besos.

Jerónimo

[C.P. Fernández]

Muy bueno, Pepa. No sé por qué me suena tan familiar. Todo un acierto el desorden de estar vivos. Un placer.


Un abrazo.

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Victor, por vernir y traer la varita mágica que fabrica comentarios tan amables como este.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Manuel, por pasar y comentar.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Carlos, por venir a leer y contármelo.
Un abrazo.
Pepa