E. R. Aristy escribió:Enol Sanyago escribió:
Dos vidas te pido,
(aunque sé que te inventaste
lo de arrojar monedas
a la fuente
para distraer a turistas
de asfalto).
Una que tirar por la borda
con viento de poniente.
Para ser sombra la otra,
tu sombra,
como espejo mudo
que consuma su designio.
Porque llegará la tarde en la que volemos
cometas y zapatos,
y parta al fin este barco,
anclado frente a los acantilados del Averno.
Al sol las espumas de mar.
A la mar las huellas sin dueño del camino.
Al camino los poros abiertos de tu piel.
A tu piel mi piel,
y unidas,
alfombra persa de alas.
+a+b+r+a+z+o+
enol.
sanyago
Porque llegará la tarde en la que volemos
cometas y zapatos,
y parta al fin este barco,
anclado frente a los acantilados del Averno.
Al sol las espumas de mar.
A la mar las huellas sin dueño del camino.
Al camino los poros abiertos de tu piel.
A tu piel mi piel,
y unidas,
alfombra persa de alas.
Quiméricas imágenes de exaltada magia imaginativa. Tu poema el salto de fe hacia el inefable poder del amor. Me he deleitado grandemente con tu poesía, estimado Enol.
Como en alguna ocasión ha comentado el colega
Batania, precisamente en el tema de las imágenes es en lo que más me empeño en trabajar últimamente. Yo sigo considerando que son demasiado leves, incluso convencionales en muchas ocasiones. Es verdad que en esta ocasión quise hacer algo quimérico, pero con todo, sigo sin satisfacerme en este plano. Tengo problemas graves en este punto porque al leer otros poemas de muchas más calidad, me encuentro con una sobrecarga de visiones que acaban haciendo que no entienda nada de lo que leo. Y no creo que esto sea bueno para la poesía en su conjunto.
En fin, uno sigue con la dura tarea del aprendizaje. Veremos hacia dónde nos lleva.
Muchas gracias por estar aquí y con ellas, beso agradecido hacia New York.