Confidencial

[M. Sánchez]

Se me han ido quedando
las cosas que quería
como muertos dispuestos al borde de un camino.
Y yo sin enterarme de quien pone
esos sabores lacios en la boca,
esas vacilaciones en la vista,
sin comprender del todo
que existir hace daño,
sin aprender siquiera a recorrerme.
Porque otra cosa no sabré, lector amigo,
pero morir, tampoco.

Ya estamos los dos solos.
Nunca ha venido a vernos
ni la conversación ni la paciencia
cuando el frio parece detenido
por detrás de la puerta,
y la ciudad se duerme en una noche helada.
No siempre es lo mejor estar de acuerdo,
pero mirarnos, sí.
Mirarnos para vernos,
para cruzar despacio nuestras sombras
y adivinar la ropa subterránea
de acceso protegido.
No es posible
que el cansancio de un día lo haya olvidado todo
y que la indiferencia haya salido en busca
de alguna imitación de los sentidos
que llevarse a la boca.

Llegarán nuestros brazos nocturnos
de cuerpos silenciosos,
y pasarán de largo
como el misterio azul de las gaviotas.
Ahora, en nuestras vidas
ya no hay tráfico,
y el sueño de un pasaje con personajes íntimos
parece interminable.

[Cecilia Martos]

Un poema precioso, de esos que se van filtrando despacito en el alma, me ha encantado, un placer leerte poeta.

Un saludo.

Cecilia

[Luna de Nos]

Manuel, cuando un poema logra traspasar la barrera del sentimiento que lo origina y volverse universal en su l vvgenguaje, quien lee, lo hace propio, porque segzzuramente se identifica en alguno o varios de los puntos en un sentido valioso, ya que se 'descubre' en otro y puede de esta manera comprenderse y quizas en algun caso hasta
disculpando, disculparse. un gusto leerte, saludos Luna.-

Se me han ido quedando
las cosas que quería
como muertos dispuestos al borde de un camino.
Y yo sin enterarme de quien pone
esos sabores lacios en la boca,
esas vacilaciones en la vista
sin comprender del todo
que existir hace daño,
sin aprender siquiera a recorrerme.
Porque otra cosa no sabré, lector amigo,
pero morir, tampoco.
Ya estamos los dos solos.l.l
Nunca ha venido a vernos
ni la conversación ni la paciencia
cuando el frio parece detenido
por detrás de la puerta,
y la ciudad se duerme en una noche helada.
No siempre es lo mejor esftar de acuerdo,
pero mirarnos, sí.
Mirarnos para vernos,
para cruzar despacio nuestras sombras
y adivinar la ropa subterránea
de acceso protegido.
No es posible
que el cansancio de un día lo haya olvidado todo
y que la indiferencia haya salido en busca
de alguna imitación de los sentidos
que llevarse a la boca.

Llegarán nuestros brazos nocturnos
de cuerpos silenciosos,
y pasarán de largo
como el misterio azul de las gaviotas.
Ahora, en nuestras vidas
ya no hay tráfico,
y el sueño de un pasaje con personajes íntimos
parece interminable.

[Guillermo Cumar.]

Magnífico el poema, Manuel. Esa conversación con el lector trasmite
mucho. Da conversación y agrado al mismo tiempo que abre
el corazón de la palabra a cada imagen gozosa y consentida.

un abrazo

[Pilar Morte]

Auténtico y sincero poema que he leído con gran interás. Un gusto asomarme a tu palabra
Besos
Pilar

[Francisco J. Ortega]

Precioso poema! He disfrutado leyéndolo!! Saludos!

[Josefa A. Sánchez]

El poema es magnifico, pero lo que más me gusta es la cercanía y naturalidad con que esta escrito, parece que hablas directamente conmigo. Un disfrute.
Un abrazo.
Pepa

[Bruno Laja]

Hola, Manuel,
me gustó mucho este poema, mucho, porque es un ejemplo de cómo puede hacerse poesía sólo con el aliento. La materia y su pulso se concentran, un ramo hace una flor.
No hay contextos adquiridos para decir. Un verdadero placer. Recibe un abrazo.

[Hallie Hernández Alfaro]

Precioso y trascendente tu poema, Manuel.

He de volver con más tiempo; mientras tanto, que no cesen los aplausos!

Abrazos y felicidad.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Mirarnos para vernos,
para cruzar despacio nuestras sombras
y adivinar la ropa subterránea
de acceso protegido.

Un poema hermoso, pero de una especial belleza, donde la poesía se recrea en esas reflexiones en alto sobre la circunstancia íntima de estar vivo.

Todo un placer de lectura.

Un abrazo.

[M. Sánchez]

Muchas gracias,Cecilia,Luna,Guillermo,Pilar,Francisco,Pepa, Bruno,Hallie,J.J.M. y perdón por mi tardanza en contestar a vuestros amables comentarios. Sigo sin ordenador y me resulta muy dificil conectarme. Os agradezco vuestras palabras y el tiempo dedicado a la lectura de este poema.
Un abrazo fuerte.

[Rafel Calle]

Bellísimo poema de Manuel.

[C.P. Fernández]

Me ha encantado. Un poema muy, muy hermoso.
Un abrazo

[Víctor F. Mallada]

Es como una tesis vital, Manuel, lo que aquí dejas.
Me gusta el tema, el desarrollo, el ritmo con sus apoyos tónicos en sexta y su distribución melódica en binario-ternario-binario en muchos versos.

Buen trabajo, poeta.

Víctor