Monólogo atributo ad libitum

[E. R. Aristy]

Monólogo atributo ad libitum
ERA circa Siglo XXI


Me arropa un aura hoy de misticismo y no debería intentar hablar de sacrilegios y desventuras, no debería nada más que sucumbir a la ola que me arrastra. Suspensión que me es familiar y que me recuerda mis experiencias en útero.

Los sueños son esa información que se proyecta desordenadamente en imágenes, valores corruptos de un lenguaje desencajado. Sus muecas son la expresión que me dicen que tengo que salir a caminar.

Pero los sueños también son esa ventana por donde se filtran las magnéticas ondas de remotas proximidades. Vislumbro escenas, eventos que siguen una lógica interna desde el mismo núcleo de mi caos. Sintonizar, difundir su estática es posible. Entrar en ondas de comunicación modulada y ser antena que traspasa el eco que sale del canal auditivo de los despegues y los pasajes que cruzan entre las dimensiones, el brillo direccional de los eventos cosmológicos. Su vértice transmuta la física y llega al fuego de sus geminaciones. Tantas veces su aura multicolor abstrae, y arresta mi sensualidad. Pero invariablemente estos viajes me dejan un vacío. Una sensación que reversa las percepciones innatas de mi naturaleza de límites y solo puedo pensar en Dios. Nada de lo que han visto mis facultades se traduce en una información relevante a éste estado de pugna y encarcelaciones al que estoy acostumbrada ya. Es un padecimiento si se quiere, que raya en las fronteras de la locura fresca de los visionarios como yo.
Ir a donde nadie va. Perderme entre las formulaciones desmembradas del lenguaje mítico de lo que son mis más fantásticas aventuras, interpolar.
Volver a mirar el fregadero repleto de platos sucios, o éste teclado lento de mis dedos es una realidad que abrazo con patetismo. Las enfermedades son esa frustración de no coincidir con el tiempo. Sin embargo en cada regreso me afinco a esta sensación familiar de cosas que fui, de objetos que traen la historia de momentos precisos cuando hubo algún intercambio trivial y humano, es por eso quizás que algunos, como yo, siempre vamos a desenterrar los muertos para ver sus huesos. Los orígenes son cosas que nos eluden y nos motivan sensualmente, ontológicamente a hacer reconstrucciones que formen alguna indicación, un punto de partida que explique ¿por qué, qué hago aquí hoy?
El sentido de propósito es una fuerza congruente que busca significado, Mi significado es hoy sentarme aquí a divagar, a arañar la tierra que me sofoca y buscar resucitar en mí la memoria de mis orígenes. Pensar me cansa y es cierto que la mente sufre distorsiones, deterioros reparables por esa divinidad que sé que somos y que debe desenterrarse de los artificios de la semántica, de los prejuicios y artes de embalsamar.
No sé en absoluto traducir, descifrar éstos jeroglíficos. En la arquitectura subliminal de mis propias metáforas, que no son mas que la acumulación sedentaria de residuos a simple vista y que se perfila a veces como una generación propia de mi recepción. Atributos que trae el espíritu pero que sin saber utilizar sus botones caemos al fallido arañar de la piel en busca de sentir su sangre.

Ante las atrocidades y degüellos de tantos de mis hermanos, mi propia incomprensible manía de autodestruirme al mismo tiempo que busco la indestructible fibra de mis orígenes, no me queda más que resumir mi imperfecta condición humana. Y cada regreso a esa propiedad conceptual izada de mi abstracción es una conformidad que asegura que estas condiciones son nada más que el punto de partida.

En el deshumanado teatro he aprendido a apreciar lo elemental. Sin esa reevaluación de las medidas básicas de los límites de mi imperfección y de la imperfección de mi entorno, no tendría, francamente, más que el nihilismo, la negación de referencias de mapas oceánicos que miden distancias y examinan efectos. La causa de la existencia es su origen y todos nuestros atentos son eso, formar una trayectoria lógica. la lógica es el clímax de las resoluciones. Pero es en la ilógica abstracción que gravitamos a esferas de involuciones resolutas que ejercitan la necesidad de germinar, es decir de generar conexiones y pasajes propios . Al ser así siento que tengo la autoridad de posesión y dominio de mis facultades, de lo contrario sería un mono inteligente. Aprecio éstas depresiones, y ondulaciones que me arrestan, o me encausan a circulares espirales, rotaciones de velocidades que ocultan mi núcleo. Esa fuente, blackhole que se esconde detrás de mis galaxias y cuya inmaterial presencia no se disipa jamás. Descender a él supone deshacer todo lo que conozco por ir tras de mi nacimiento, eso es morir en las manos de Dios.

Es muy probable que cognitivamente no se arribe al lecho líquido, etéreo y movedizo de afirmaciones místicas. Es muy probable que sea una reservación para el desnudamiento total del sensual esquema de sangre que somos.

Por ahora la semántica, la sintaxis, el léxico del lenguaje verbal me anula. Sin embargo me quedan los sueños. Cada noche muero en una asimilación onírica que devela el triangulo, la ecuación arquetípica de mi arqueología y veo con los ojos del espíritu esa nada flotante detrás de la cual se alza la sinfonía.


Long Beach, New York
E. R. Aristy
ERA Copyright © 2001

[Ventura Morón]

Encontrar este texto tuyo, es encontrar un tesoro. Introspectivo deslizarse, como por un tobogán magnético que atrapara un deslizarse enormemente profundo, reflexivo y consciente en ese bucear en la inconsciencia. Tan lleno de un transitar lúcido y sensible, que conmueve y fascina al mismo tiempo. Un texto fundamental, que sobrepasa culquier comentario que yo pueda hacer, que me conduce a esa dmiración que produce siempre tu lectura. Esencial su lectura y su aprehension.
Un beso grande querida Era

[Maria Pilar Gonzalo]

Me siento absolutamente identificada con este maravilloso texto. Esa capacidad además, de dominio absoluto de lenguaje, de viaje interior lleno de conexiones sensibles resulta imprescindible.
El final me parece perfecto, ese morir cada noche y que te lleva a la nada es majestuoso.

Un placer seguirte de cerca.

Abrazos.

[Óscar Distéfano]

Profunda introspección existencial. Y con qué claridad lingüística y conceptual expones tus pensamientos. En verdad, amiga mía, me ha dejado rendido a su riqueza semántica este texto tuyo. Es seguro que volveré a leerlo. Ello nos hace más libres.

Un gran abrazo.
Óscar

[E. R. Aristy]

Encontrar este texto tuyo, es encontrar un tesoro. Introspectivo deslizarse, como por un tobogán magnético que atrapara un deslizarse enormemente profundo, reflexivo y consciente en ese bucear en la inconsciencia. Tan lleno de un transitar lúcido y sensible, que conmueve y fascina al mismo tiempo. Un texto fundamental, que sobrepasa culquier comentario que yo pueda hacer, que me conduce a esa dmiración que produce siempre tu lectura. Esencial su lectura y su aprehension.
Un beso grande querida Era

Gracias, Ventura. Tu profunda lectura me anima y confirma que hay que dar voz a la complejidad que somos. Un beso grande a tu bella mente. ERA

[Ventura Morón]

De nuestra biblioteca, disfrutemos de sus tesoros.
Arriba con este hermoso trabajo