La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
Hay un verdugo oculto en cada uno de nosotros como vaga el espíritu de Borges por el lago de Ginebra siempre acorde con la capucha negra del verdugo en espera del difunto es cosa rara lo que emana sintiéndote inseguro. como un joven inexperto que lo toma una prostituta para el sexo.
Los que conocen la ciudad saben que en la Rue General Dufour el placer por dinero se aparece aunque nadie lo tiente, El Ródano se funde y se besa con el lago haciendo sus estragos, una ventisca se filtra, penetra y congela y el invierno se vuelve más triste en la oscura Ginebra.
Rosa que no era hermosa pero con una mirada que desarma venía de Burdeos, llevaba rosas negras para la tumba del maestro, nos encontramos en el cementerio -Todos los años vengo-me dijo y me tomó la mano como si me conociera hace un siglo.
El cementerio de Rois invita a morirse de algún modo por ser tan precioso todo es un parque que se expande entre los árboles cuyas ramas se derraman hasta besar el suelo, hay un verdugo no lo dudo pero Rosa no me deja sólo ni un momento.
lázaro.
!Hay que ser valiente para ser poeta!
Hay que estar loco.
A la literatura, al amor y a los animales
no se les puede hacer trampas.
Realmente, hay poemas que merecen navegar contracorriente, que necesitan todo el inmenso mar para ellos sólos, por eso debe ser que está en "ausencia de comentarios"
Y vengo yo e irrumpo en su soledad, lo lanzo de nuevo al infinito.
Un recorrido lleno de imágenes nos dejas Lázaro.
Rosa no te puede dejar sólo, que te pierdes por esas tumbas de Dios....
Un placer pasar por aquí.
Un abrazo.
Sí amigo, o somos verdugos de nosotros mismos o lo somos de los demás.
Un buen análisis mortuorio para hacer una visita al cementerio en soledad
o acompañado de Rosa y de las magníficas imágenes que escondes
debajo de la capucha negra de estos versos.
Hay un verdugo oculto en cada uno de nosotros como vaga el espíritu de Borges por el lago de Ginebra siempre acorde con la capucha negra del verdugo en espera del difunto es cosa rara lo que emana sintiéndote inseguro. como un joven inexperto que lo toma una prostituta para el sexo.
Los que conocen la ciudad saben que en la Rue General Dufour el placer por dinero se aparece aunque nadie lo tiente, El Ródano se funde y se besa con el lago haciendo sus estragos, una ventisca se filtra, penetra y congela y el invierno se vuelve más triste en la oscura Ginebra.
Rosa que no era hermosa pero con una mirada que desarma venía de Burdeos, llevaba rosas negras para la tumba del maestro, nos encontramos en el cementerio -Todos los años vengo-me dijo y me tomó la mano como si me conociera hace un siglo.
El cementerio de Rois invita a morirse de algún modo por ser tan precioso todo es un parque que se expande entre los árboles cuyas ramas se derraman hasta besar el suelo, hay un verdugo no lo dudo pero Rosa no me deja sólo ni un momento.
lázaro.
El poema en su totalidad es buenísimo, sólo me he permitido resaltar los versos que profundamente y -sin piedad-, me abordaron el espíritu con el especial tañido de su canto.
Un abrazo y un beso, poeta