Repentino (L VIII)

[Josefa A. Sánchez]

Repentino



¿Dónde estabas tú? el día
en que las nubes se quedaron cuajadas en el cielo
como grumos de esperma
derramado en un gran retrete azul.
El día en que al sol
le salieron tumores de llamas
que reventaron luego
dispersando en la tierra
su bilis luminosa.

¿Dónde estabas aún?
cuando el mar se violentó a si mismo
preñándose de olas imposibles
que se petrificaban en su altura.

¿Dónde? cuando la tierra
se retorció en espasmos de volcanes
y vomitó la sangre de mil siglos
a través de sus grietas boquiabiertas.

Cuando mi carne irresoluta
por una vez se sublevó del todo
gritando por los poros
consignas libertarias.

¿Dónde estabas? el día,
-irrelevante al resto de mortales-
en que mis labios ciegos de agonía,
mis ojos sedientos de retratos,
mis manos hambrientas de promesas
y hasta este corazón loco de olvido
descubrieron de golpe que te amaban.



Pepa

[M. Sánchez]

Formidable poema, Pepa, Mi felicitación.
Un fuerte abrazo

[Víctor F. Mallada]

Muy bueno, Pepa.
Como un quejío, contado a golpe de tacones, desde la primera pregunta al precioso cierre de ese corazón loco. Muy buen ritmo en mi opinion.

Un abrazo,

Víctor

[F. Enrique]

Lo tuyo, Pepa, es pura pasión desordenada, es fuerza que se muestra a medida que el poema va avanzando y culmina en una estrofa hermosísima, la repito y, verdaderamente, es cierto.

Un abrazo.

[Julio Gonzalez Alonso]

Vehemencia, apremio y consignas libertarias a este lado del amor. ¡Qué formidable poema! Con un abrazo de admiración, Pepa.
Salud.

[Roberto López]

[quote="Josefa A. Sánchez"]Repentino



Este poema es un grito escarnecido, un quejido a borbotones. Saludos.

[Guillermo Cumar.]

A golpe de libertad y de denuncia nos dejas estos versos
con ese interrogante audaz que te contempla sola y poeta.

Un abrazo

[Hallie Hernández Alfaro]

Una maravilla de poema, Josefa. Para leerlo, disfrutarlo y aplaudirlo con fervor.

Un abrazo,

Hallie

[Israel Liñán]

Un poema con mucha pasión y rabia cabalgando por sus versos.

Un abrazo, Pepa.

[Ramón Ataz]

Joer, Pepa (y perdona el exabrupto) qué tremenda fuerza contiene este poema. Desde esa estrofa que lo inicia, desde ya inolvidable, hasta ese final en el que toda la pasión desplegada se concreta en un solo verso que lo cierra de forma incontestable.

Te veo en una etapa poética muy fecunda, Pepa, de lo que, como lector, me alegro mucho.

Un abrazo.

[Javier Dicenzo]

¿Dónde estabas aún?
cuando el mar se violentó a si mismo
preñándose de olas imposibles
que se petrificaban en su altura.

Me quedo con tus versos un fuerte abrazo un verdadero placer pasar por tus letras repentinas,
javier

[Pablo Ibáñez]

Pepa,

Me ha gustado el tono incisivo que tan bien has sabido imprimir en este mensaje. El amor parece reinvindicar sus derechos con energía ante su objeto, que ni siquiera sospecha la profundidad del sentimiento que provoca. ¿Dónde estabas tú cuando me enamoré de ti? Ya solo la pregunta convoca un mar de significados.

Un abrazo.

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Manuel, por abrir el turno de comentarios con tus amables palabras.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Victor, por ese ritmo de tacones con el que acompañas estos humildes versos. Verte por mis torpes intentos siempre es un placer.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, F. Enrique, por tu amable y generoso comentario.
Un abrazo.
Pepa