Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Pilar Morte escribió:Eres dulce, pero tus versos transmiten un fuerza increíble, una combinación perfecta.Un placer, como siempre
Felicidades a los dos
Un abrazo
Pilar
Antonio Justel escribió:Hallie Hernández Alfaro escribió:La agonía puede matar
o puede sustentar la vida
pero la paz es siempre horrible
la paz es la peor cosa
caminando
hablando
sonriendo
pareciendo ser.
Abraza la oscuridad, Charles Bukoswski.
Y que las calles mitiguen el vuelo del cóndor
-navío de rojos culpables, hospicio de amargas dudas-;
que sacien, además, la pulsión medieval del Gótico
y los versos feraces, en tierra de Llobregat.
Y que las noches cobijen el trámite oscuro de la miseria
o las manzanas congelen sus agujeros de pánico.
Es tiempo de que las hadas muerdan el cuello del kamikaze
en la utópica fiebre de un sólo poema.
Hallie
... sean o no improntas, eres tú y tú las firmas "Hallie"; por eso repartes y citas a Bukowski para llegar a la conformación febril y utópica al amparo de un sólo poema, lo cual y en principio entraña una dificultad desmesurada, pero en ti puede ser psoible (pero permítaseme, siquiera, invocar la paz de que Tolstyoi hablaba, pues probablemente no sea la misma que la de Bukowski) y eso es importante; un fuerte abrazo, Hallie; Orión
Mario Martínez escribió:Hola Hallie
Es tiempo de que las hadas muerdan el cuello del kamikaze
en la utópica fiebre de un sólo poema.
Excelente final, amiga mía, para este poema dedicado a Jaume que me ha encantado por su fuerza y sus imágenes. Abrazos a ambos.
mario.
Hallie Hernández Alfaro escribió:La agonía puede matar
o puede sustentar la vida
pero la paz es siempre horrible
la paz es la peor cosa
caminando
hablando
sonriendo
pareciendo ser.
Abraza la oscuridad, Charles Bukoswski.
Y que las calles mitiguen el vuelo del cóndor
-navío de rojos culpables, hospicio de amargas dudas-;
que sacien, además, la pulsión medieval del Gótico
y los versos feraces, en tierra de Llobregat.
Y que las noches cobijen el trámite oscuro de la miseria
o las manzanas congelen sus agujeros de pánico.
Es tiempo de que las hadas muerdan el cuello del kamikaze
en la utópica fiebre de un sólo poema.
Hallie