La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
Rossana Arellano escribió:Nésthor :
Siempre me gustó leer tu poesía, ahora puedo hacerlo una vez más y eso me provoca una sensación de placidez con sonrisa.
Recibe un abrazo
Rossana Arellano
Me alegra que te agrade leer mis "tropelías" y además salgas con una sosnrisa de ellas.
Me ha encantado este poema y me he quedado encantado pensando en él mientras el tiempo avanza y yo estoy quieto, pero eso si por quieto que este el tiempo, mi tiempo sigue retroediendo hacia delante, hasta que un día ese reloj se detendrá.
Me ha gustado mucho esa idea inversa del tiempo que yo interpreto como el tiempo que nos queda.
Mis felicitaciones por un poema que casi me pierdo y un abrazo.
Nésthor Olalla escribió:el reloj de la vida nunca avanza
hacia atrás
la epopeya insoslayable
de su sombra
siempre retrocede
hacia adelante
Nésthor Olalla
Nésthor...me gusta los poemas que te dejan meditando...aquí el protagonista, como dijo un tal Shakespeare, es el gran tirano del tiempo...la vida se evapora, muere en un suspiro y nosotros los hombres vivimos instalados en el pasado o en lo que vendrá, perdiéndonos el momento presente...la vida eterna, la eterna muerte...somos esclavos de él, esclavos de la mente que da las horas, pero nunca aquí, ahora...esto me sugirió a mí la lectura de tus versos...grato placer asomarme a ellos..un afectuoso abrazo compañero.
Rossana Arellano escribió:Nésthor :
Siempre me gustó leer tu poesía, ahora puedo hacerlo una vez más y eso me provoca una sensación de placidez con sonrisa.
Recibe un abrazo
Rossana Arellano
Gracias por tu lectura, querida amiga. Siempre es un placer tu visita.
Jaume vendrell KYUSS escribió:me ha encantado...lo material de la aguja del reloj o de un reloj electrónico nunca retrocede...pero nosotros, monos indecentes, bajo esa premisa, nos dirigimos a la nada a cada paso estúpido que damos...un gusto...abrazos fuertes
Gracias por asomarte, compañero. Ha sido muy grato para mí tu amable visita.
Óscar Distéfano escribió:Curioso y original poema, amigo, que hace pensar. Me he detenido un buen tiempo en él, barajando sus intrincadas posibilidades. Me ha gustado, y me lo guardo.
Un abrazo.
Óscar
ÓSCAR...
Gracias por asomarte y por tu amable comentario, compañero.
"Nésthor Olalla"el reloj de la vida nunca avanza
hacia atrás
la epopeya insoslayable
de su sombra
siempre retrocede
hacia adelante
Nésthor Olalla
Por circunstancias X, no había leído este extraordinario poema, y aunque guardo poco tiempo de mi existencia, o para ella, en mi agudeza mental me resulta muy difícl si el cielo ceniciento tiene nubes o más bien niebla. Creo en la exactitud del poema, porque proyecta en sí mismo una sombra, vagamente diurna en cualquier sentido. Te felicito y te envío mi más cordial abrazo.
Tristany Joan Gaspar escribió:Me ha encantado este poema y me he quedado encantado pensando en él mientras el tiempo avanza y yo estoy quieto, pero eso si por quieto que este el tiempo, mi tiempo sigue retroediendo hacia delante, hasta que un día ese reloj se detendrá.
Me ha gustado mucho esa idea inversa del tiempo que yo interpreto como el tiempo que nos queda.
Mis felicitaciones por un poema que casi me pierdo y un abrazo.
Joan
TRISTANY...
Gracias por asomarte, compañero. Siempre un gusto tu visita.
Rossana Arellano escribió:Nésthor :
Siempre me gustó leer tu poesía, ahora puedo hacerlo una vez más y eso me provoca una sensación de placidez con sonrisa.
Recibe un abrazo
Rossana Arellano
Te agradezco la visita y el generoso comentario, compañera; no sin antes disculparme por responderte a ello con tanto retraso.
Nésthor Olalla escribió:el reloj de la vida nunca avanza
hacia atrás
la epopeya insoslayable
de su sombra
siempre retrocede
hacia adelante
Nésthor Olalla
Nésthor...me gusta los poemas que te dejan meditando...aquí el protagonista, como dijo un tal Shakespeare, es el gran tirano del tiempo...la vida se evapora, muere en un suspiro y nosotros los hombres vivimos instalados en el pasado o en lo que vendrá, perdiéndonos el momento presente...la vida eterna, la eterna muerte...somos esclavos de él, esclavos de la mente que da las horas, pero nunca aquí, ahora...esto me sugirió a mí la lectura de tus versos...grato placer asomarme a ellos..un afectuoso abrazo compañero.
javi
Gracias por la visita y tu rico comentario, compañero, además de mis disculpas por el retaso al contestarte.
José Manuel F. Febles escribió:"Nésthor Olalla"el reloj de la vida nunca avanza
hacia atrás
la epopeya insoslayable
de su sombra
siempre retrocede
hacia adelante
Nésthor Olalla
Por circunstancias X, no había leído este extraordinario poema, y aunque guardo poco tiempo de mi existencia, o para ella, en mi agudeza mental me resulta muy difícl si el cielo ceniciento tiene nubes o más bien niebla. Creo en la exactitud del poema, porque proyecta en sí mismo una sombra, vagamente diurna en cualquier sentido. Te felicito y te envío mi más cordial abrazo.
Desde muy lejos recibe, llegará, un gran abrazo.
José Manuel F. Febles
Gracias por tu paso por estas "digresiones" mías, compañero y disculpas por el retraso al contestarte.
José Manuel F. Febles escribió:"Nésthor Olalla"el reloj de la vida nunca avanza
hacia atrás
la epopeya insoslayable
de su sombra
siempre retrocede
hacia adelante
Nésthor Olalla
Por circunstancias X, no había leído este extraordinario poema, y aunque guardo poco tiempo de mi existencia, o para ella, en mi agudeza mental me resulta muy difícl si el cielo ceniciento tiene nubes o más bien niebla. Creo en la exactitud del poema, porque proyecta en sí mismo una sombra, vagamente diurna en cualquier sentido. Te felicito y te envío mi más cordial abrazo.
Desde muy lejos recibe, llegará, un gran abrazo.
José Manuel F. Febles
Gracias por tu paso por estas "digresiones" mías, compañero y mis disculpas por el retraso al contestarte.