Efecto mariposa (Para el libro)

[Mario Martínez]

Quedó desnudo el aire de su crisol de aromas
y fue la pestilencia de un mundo corrompido
la que tomó con prisa los campos y las calles
ganando por sorpresa los rincones más puros.
Se expandió como nunca el olor a egoísmo
destilado cobarde por corazones huecos
y flatulentos vahos de avaricia y mentira
recorrieron el orbe con efluvios de cieno.
Asfixiando razones, sentimientos, conciencias,
las palabras cubrieron con hedor de silencios,
y al morir la cordura sobre tierra inodora
germinó la semilla del rencor más abyecto.
Espirales de infamia barrieron libertades
y fue muñeco el hombre en el guiñol del miedo,
se erradicaron logros y el tufo a intolerancia
filtróse entre las mentes que perfilaban sueños.
La peste de la envidia fue plaga de ambiciones,
se rompieron tratados, amistades, acuerdos,
acabaron las armas de enterrar la esperanza
y anidó la tristeza en los olores nuevos.

Secuelas de aquel día que hastiadas de que el viento
robase su perfume para alegrar al hombre
sin que él lo agradeciera, las flores decidieron
comenzar una huelga de pétalos caídos.




Mario.

[Rafel Calle]

Un poema, querido amigo Mario, hermoso en la forma y poco gratificante en el fondo, ya que la denuncia que conlleva es dura como el pedernal y hiere como el hedor a cadáver.
El último verso inspiradísimo, es muy triste, pero es un verso para enmarcar.
En fin, ha sido un placer leerte tan bien construidos alejandrinos. Felicidades.
Un fuerte abrazo.

[Alonso de Molina]

"Una huelga de pétalos caídos" contra el caos irascible que nos invade

denuncia oportuna a ritmo de alejandros que dominas como nadie

te aplaudo Mario

.

[Fermín Lasarte]

Mario excelente poema! Ese final es sublime. Toda la obra muestra la decadencia en la que hemos caído, no sé qué humo nos ha corrompido, pero aquí estamos devorándonos entre nosotros. me encantó mario, se ve un cuidadoso trabajo desde lo formal que ayuda a darle forma a la profundidad de los versos, y, como te dije, esa última estrofa para enmarcar.
Un abrazo grande.-

[Luna de Nos]

Quedó desnudo el aire de su crisol de aromas
y fue la pestilencia de un mundo corrompido
la que tomó con prisa los campos y las calles
ganando por sorpresa los rincones más puros.
Se expandió como nunca el olor a egoísmo
destilado cobarde por corazones huecos
y flatulentos vahos de avaricia y mentira
recorrieron el orbe con efluvios de cieno.
Asfixiando razones, sentimientos, conciencias,
las palabras cubrieron con hedor de silencios,
y al morir la cordura sobre tierra inodora
germinó la semilla del rencor más abyecto.
Espirales de infamia barrieron libertades
y fue muñeco el hombre en el guiñol del miedo,
se erradicaron logros y el tufo a intolerancia
filtróse entre las mentes que perfilaban sueños.
La peste de la envidia fue plaga de ambiciones,
se rompieron tratados, amistades, acuerdos,
acabaron las armas de enterrar la esperanza
y anidó la tristeza en los olores nuevos.

Secuelas de aquel día que hastiadas de que el viento
robase su perfume para alegrar al hombre
sin que él lo agradeciera, las flores decidieron
comenzar una huelga de pétalos caídos.




Mario.

Mario, es un poema magnìfico, es el adjetivo que me vino a la mente al leerlo, supongo que no es un comentario apropiado, pero en este momento me siento 'pequeña' para hacerlo. Un abrazo, Luna.-

[Ramón Ataz]

Excelente final para un poema excelente, Mario. Se va acumulando en el lector el torrente de infamias que derramas con el ritmo pausado y constante de los alejandrinos, y al final lo dejas con ganas de sumarse a esa huelga de pétalos caídos que además de ingeniosa, resulta una imagen de una fuerza inaudita.

Un afectuoso y admirado abrazo.

[Pilar Morte]

Todos nos hemos fijado en ese final tan logrado, un acierto enorme. Un placer
Abrazos
Pilar

[José Manuel Sáiz]

He leído los comentarios antes de comentar yo y veo que coincidimos todos tanto en la calidad del poema como lo sorprendente de la estrofa final.
Sólo queda felicitarte, querido amigo.
Un abrazo.
J. manuel

[Aubriel Camila de la Prad]

Quedó desnudo el aire de su crisol de aromas
y fue la pestilencia de un mundo corrompido
la que tomó con prisa los campos y las calles
ganando por sorpresa los rincones más puros.
Se expandió como nunca el olor a egoísmo
destilado cobarde por corazones huecos
y flatulentos vahos de avaricia y mentira
recorrieron el orbe con efluvios de cieno.
Asfixiando razones, sentimientos, conciencias,
las palabras cubrieron con hedor de silencios,
y al morir la cordura sobre tierra inodora
germinó la semilla del rencor más abyecto.
Espirales de infamia barrieron libertades
y fue muñeco el hombre en el guiñol del miedo,
se erradicaron logros y el tufo a intolerancia
filtróse entre las mentes que perfilaban sueños.
La peste de la envidia fue plaga de ambiciones,
se rompieron tratados, amistades, acuerdos,
acabaron las armas de enterrar la esperanza
y anidó la tristeza en los olores nuevos.

Secuelas de aquel día que hastiadas de que el viento
robase su perfume para alegrar al hombre
sin que él lo agradeciera, las flores decidieron
comenzar una huelga de pétalos caídos.




Mario.

Qué poemazo, Mario! Me gusta desde la primera palabra hasta la última.
La estrofa final es magnífica (bueno, todo el poema lo es), lo que quiero decir es que me parece un cierre muy logrado.

Besos, querido amigo, y mis aplausos a tu talento una vez más.

[Mario Martínez]

Un poema, querido amigo Mario, hermoso en la forma y poco gratificante en el fondo, ya que la denuncia que conlleva es dura como el pedernal y hiere como el hedor a cadáver.

Hola, Rafel. Sí a lo que parece el día que lo escribí mi ánimo estaba bastante decaído.
Me alegra que te haya gustado, amigo mío. Un fuerte abrazo.
Mario.

[Mario Martínez]

Gracias, Alonso, por dejarme tu cálido comentario. Abrazos, amigo mío.
Mario.

[Tristany Joan Gaspar]

Un poema tan excelente como doloroso.
Sabes transmitir ese dolor de forma directa pero enmarcada en un poema muy bello y muy elaborado.
me ha gustado mucho.
El final es impactante, pero hay muchos versos que tras una segunda lectura se presentan creando un fuerte impacto también.

Un verdadero placer de lectura, lleno de dolor, pero un poema inmenso creado por un gran poeta.

Un fuerte abrazo

joan

[Mario Martínez]

Gracias Fermín.
Sí, realmente, amigo mío, fue un poema inmensamente trabajado, pero creo que mereció la pena el esfuerzo. Abrazos.
Mario.

[Ricardo Serna G]

Mario Martínez

El jardín de las flores
en versos milagrosos
con sol de ritmo
rendidos en una tierra fértil


Un abrazo fuerte, querido amigo

[Javier Dicenzo]

Mario excelente tu poema, gran talento
javier