Ese río de hormigas dulces me parece un acierto de primera magnitud sobre el que se desgrana todo tu poema. Me ha causado cierta tristeza, pues la dulzura del pasado, bien versada en todas esas palabras que nacen por doquier, contrasta con la falta de futuro. Un gran ejemplo de cómo transmitir el fl...

¡Loida, qué alegría, porque tu poesía es verdadera y adictiva! Te destaco el hallazgo de las pocas ganas de poesía cuando la tristeza se acrece demasiado. Los doscientos poemas más niña y el sonarse los tacones con el pañuelo... bufff.

Te sigo siempre.

Un placer.

Abrazo grande.

Hasta pronto.

Ay, Pepa, qué bien escribes: ¡con qué puntillismo nos has ido desgranando la lluvia fina para llegar al nosotros!

Todavía sigo sintiendo la pelusa de la respiración entrecortada.

Acierto. Enhorabuena.

Abrazo.

Hasta pronto.

Gracias, Ana , gracias, Ignacio . El poema quería ser un homenaje a las tías Tulas que siempre me han apasionado, mujeres de mucho carácter que sólo ríen una vez cada dos jueves. Las mujeres que siempre se están riendo, las que ríen incluso antes de que se diga nada gracioso, antes de que te esfuerc...

No parece pequeño el argumento de la no escucha para que la niña deje de llorar. Los tercetos son deliciosos, musicales, buenos. El poema me termina subiendo y dejando una salida, eso que tanto me gusta.

Abrazo.

Hasta pronto.

Enhorabuena: ni las nubes ni los aguaceros podrán ni con gana de seguir caminando ni con la gana de hacer poemas buenos como los tuyos.

Abrazo.

Hasta pronto.

Ay, esa aguda espina, José Manuel, es la que me domina y se me impone en todo tu poema. Quieren decirme tus versos que el amor, si ha existido y ha sido fuerte, tiene una segunda vida, la evocadora de sus momentos más felices, y esa segunda vida es tan bella (y tan triste, sobre todo) como la primer...

Me llega un poema donde la decadencia es tan palpable como su resistencia a ella. Esas llamaradas y ese oír la bestia me confirman en que lo más humano siempre es ciego y tiende a la vida.

Abrazo.

Hasta pronto.

Me ha llegado un poema estático pero a la vez desasosegante, donde el sol se me aparece cayendo a plomo y los versos finales me acrecientan y me confunden en ese estatismo semoviente.

Un abrazo. Para leerlo varias veces.

Hasta pronto.

Creo que ya te lo han destacado, pero yo te lo repito: los dos tercetos son mucha calidad; el nombre que llega en pico de gaviota es de una sensibilidad no frecuente.

Un acierto.

Hasta pronto.

En este poema se ve por todos los lados la crisis económica y el sálvese quien pueda, ahora que ya creo que se atreven a llamarla crisis.

Abrazo.

Hasta pronto.

Bufff, Blanca, gracias. Yo sólo te había pedido unas líneas, pero me he visto superado por tu generosidad. Ya sabía yo que tenían mucha miga, que eran de esas palabras-píldora.

La verdad es que arjé me sonaba, pero lo de pléroma nada de nada. Ahora sí. No las voy a confundir.

Hasta pronto.

Gracias, Alejandra. Batania me desgasta mucho, por lo que tengo que escribir este tipo de poemas para airearme. Pero fíjate que la palabra más bonita que digo es miel.

Abrazo grande.

Hasta pronto.

Me gusta el poema porque es hacia arriba, porque no condesciende con el sentimentalismo fácil hacia abajo sino en la esperanza difícil, en el seguir, en el recordar, en el pasarse el testigo...

Bravo.

Hasta pronto.

¡Épica, Javier, épica! Poema arrebatado y apocalíptico. Pareces Caupolicán. Mira que si matas todas las palabras disonantes voy a tener que dejar la poesía.

Fuerza. Intensidad. Se lee como arrastrado por un caballo.

Enhorabuena.

Hasta pronto.