Querer decir y no saber hablar

[curra anguiano]

Querer decir y no saber hablar.

En el temprano,
sin luz,
con frío,
sola
o a veces demasiado acompañada,
nunca sé muy bien,
alimentando
con recodos la sonrisa.

Intento
expresar el sentimiento
en sus formas,
en sus vidas,
y no consigo
pronunciar las palabras que siento
sentir.

Hoy no hay borde a la nostalgia,
mi blanca princesa,
mi niña del alma,
todos proyectos,
ilusiones y triunfos,
y mil sonrisas,
enternecedoras.

Camina el verde entre mis plantas
y llega
un poco mosca,
lleno de vida,
tierno y noble,
siempre atento,
como os quiero a los dos,
os quiero.

Los coros,
que suenan lejanos,
pero están muy dentro,
mío fijos,
muy dentro,
son mis ángeles del amor bendito.

Amigos,
que me han dado tanto,
tanto consuelo,
tanta alegría,
incluso lo momentos únicos,
deseos bendiciones,
ternura,
incluyó a los desaparecidos,
también me son muy queridos,
solo puedo daros las gracias a todos,
por lo que conmigo habéis compartido.

Dios mío,
a ti mil gracias,
siempre me tiras para arriba,
incluso en sórdidos momentos
que este año hemos vivido,
entre los noes y la Luz,
cómo no podría quererte,
si eres mi vida.

[Administración Alaire]

Sale de la Sala de Espera.

[Guillermo Cumar.]

conceptos de interes y de l0u

lucha por ver y devatir cuestiiones de sentir para bien medrar.

Un abrazo

[Concha Vidal]

Querer decir y no saber hablar.

En el temprano,
sin luz,
con frío,
sola
o a veces demasiado acompañada,
nunca sé muy bien,
alimentando
con recodos la sonrisa.

Intento
expresar el sentimiento
en sus formas,
en sus vidas,
y no consigo
pronunciar las palabras que siento
sentir.

Hoy no hay borde a la nostalgia,
mi blanca princesa,
mi niña del alma,
todos proyectos,
ilusiones y triunfos,
y mil sonrisas,
enternecedoras.

Camina el verde entre mis plantas
y llega
un poco mosca,
lleno de vida,
tierno y noble,
siempre atento,
como os quiero a los dos,
os quiero.

Los coros,
que suenan lejanos,
pero están muy dentro,
mío fijos,
muy dentro,
son mis ángeles del amor bendito.

Amigos,
que me han dado tanto,
tanto consuelo,
tanta alegría,
incluso lo momentos únicos,
deseos bendiciones,
ternura,
incluyó a los desaparecidos,
también me son muy queridos,
solo puedo daros las gracias a todos,
por lo que conmigo habéis compartido.

Dios mío,
a ti mil gracias,
siempre me tiras para arriba,
incluso en sórdidos momentos
que este año hemos vivido,
entre los noes y la Luz,
cómo no podría quererte,
si eres mi vida.

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¡ Qué poema tan delicioso Curra, entre el sí y el no, la plegaria y el agradecimiento a la vida, a la LUZ.

Abrazos mediterráneos.

[Pilar Morte]

Es una suerte esa confianza que te da la Luz. Preciosos versos
Abrazos
Pilar

[Alejandro Costa]

Imaginativos versos, sin duda.

E inteligentes.

Un beso.