La cama de las frustraciones

[LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge]

Gracias Fermín, te agradezco tan extenso, valioso y nutrido comentario. Creo que Alonso está más acertado, más certero, son cosas que pasan en cualquier vecindario de los arrabales, y de no arrabales también. No hay nada de patología de nada, son cosas de personas consideradas totalmente normales por la sociedad y por su entorno personal. Gracias de nuevo Fermín, querido amigo, querido compañero, y un gran abrazo, un abrazo muy fuerte al corazón.

[LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge]

Perdón Ramón, me pareció tan maravilloso tu comentario, perdón Ramón.

[Rossana Arellano]

Lemoine : Lemoine Jorge = Brillante
Ya leí esta parte

El autor destaca de modo violento , sin compasión ni misericordia ( por qué además debería hacerlo? ) es SU OBRA.

Por lo general sucede a quienes leen y comentan ( lo digo con respeto) se autoidentifican con una especie análisis de Jung e intentan meterse en el centro del que escribe, cuando la idea principal es METERSE EN EL CENTRO DE SI MISMOS.

Es un texto que me triza , ( en otras secciones ) desde lo humano, sin traumas de existencia, sobreviviendo a este mundo de pesadillas.

UN ABRAZO LEMOINE
Rossana

[LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge]

Emerio, Emerio Henríquez, querido Emerio, el Nobel O'Neill escribió despectivamente que "todos los negros son iguales", y la Asamblea del Nobel le dio el premio. Esto no es una declaración jurada, no es un informe judicial, es literatura, es ficción, y al igual que el Nobel Hemingway, no estoy para nada de acuerdo con mis personajes, los judíos, los negros, los mestizos, los homosexuales, los inmigrantes, los locos, los sidosos, los mogólicos, los italianos, son seres humanos, y deben ser tratados, respetados y considerados como todos los demás, como el resto del mundo, como nosotros, y las bestialidades que hacen mis personajes, nada que ver con el sexo, son dignas de la cárcel. Es más, simplemente lo que dicen es digno de la cárcel, porque creo que la discriminación está castigada por la ley, para la cual todos los hombres son iguales. Por un lado. Y por el otro, querido amigo, amigo tan querido, querido Emerio, querido compañero, te agradezco tu comentario, mucho te lo agradezco, tan noble, tan generoso, tan bondadoso. Gracias Emerio, muchas gracias Emerio, un abrazo muy fuerte.

[emerio henriquez]

¿Y que hacer para acabar con todas estas bestialidades? ¿o debemos resignarnos y aceptaras como parte de la bestia que somos?.
Quizas lo primero es no mirar a otro lado, no cerrar los ojos, y desde luego con tu obra nos los dejas bien abiertos.
Un abrazo, amigo.

[Benjamín León]

Tu poesía, Jorge, tiene notas de genialidad; hay que disfrutarla, aprender a leerte y reconocerse en tu voz, en la implicancia que hay en tu obra. Me parece un excelente trabajo, con una fuerza notable, de una belleza estética, conversacional, reseñable. Un gusto leerte.

Un abrazo fraterno, Benjamín.

[LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge]

Marcos, Marcos de la Mancebía, gracias Marcos, gracias por escribir querido Marcos, un abrazo muy fuerte.

[LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge]

Gastón, mi querido Gastón, mi querido Gastón d'Aurignac, casi no tenés nombre, gracias Gastón, gracias Gastón, gracias.

[LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge]

Gracias Alonso, gracias, amplia comprensión la tuya, demostrada sabiduría, sabés cómo funciona la vida y cómo funciona el mundo, gracias hermano, gracias Alonso, gracias querido amigo, muchas gracias.

[Mario Martínez]

Hola Jorge

A mi el poema me ha parecido más bien una historia contada en verso en lugar de en prosa. Una historia provocadora, eso sí, a menudo demasiado para mi idea de lo que debe ser un poema, aunque sea un poema que busque eso, no dejar indiferente.
En fin, no soy un meapilas ni un pazguato, pero creo que existe una línea que no debe traspasarse y algunos de estos versos la traspasan. Admiro un poema erótico con su crudeza pero contado dentro de un contexto de sensualidad aunque no esté exento de dureza, pero no algo sacado de ese contexto usando a la ligera imágenes y palabras que pueden herir sensibilidades, aunque sea con la excusa de que la vida es así.
Creo, amigo Jorge, que te he leído poemas que me gustaron más.
Un abrazo.
Mario.

[LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge]

Bueno Mario, después te contesto por turno, pero esto es una generalidad necesaria, nos dedicamos todos a lo mismo.

La mejor defensa es un buen ataque, pero yo no voy a atacar. Me voy a defender un poco.
Yo soy un poeta de Internet, o sea un aficionado. Internet es una fantasía. Un apagón y no quedó nada. Los poetas famosos no publican en foros, lógico, evidente, yo soy un aficionado. Pero hay cosas inexplicables e incomprensibles, impenetrablemente misteriosas. Así, por ejemplo, tengo dos premios de Suecia. El Jämför y el Hämtar de la Orden de Onsladen de la Administración Pública de Suecia. Poesía, 1996/97. ¿Más misterio? ¿Más misterio inexplicable? Lo hay mi querido Mario, lo hay. Por ejemplo, con mis versitos de Internet, estoy en la Enciclopedia Británica. Fijate. Comprobá. Poné en Google "Enciclopedia Británica". Da clic en Buscar. En Enciclopedia Británica-Wikipedia (en doscientos idiomas) da clic para que abra. De nuevo Buscar. En Buscar poné todos, todos, todos los poetas de Internet. No está ninguno. Ninguno. Ni uno solo. Y yo sí estoy. Yo sí. El único. El único, Mario. ¡Ahí están las celebridades mundiales! Y ojo, ni siquiera está Alberola, que es la poeta máxima del idioma. O sea que el misterio me sobrepasa. Demasiado para mí. Se supondrá que lo que escribo es de un valor inmenso, no sé de qué otra manera puedo estar ahí. Porque ahí no hay ninguno más. Ni uno. Comprobá. Fijate. Ponelos todos. De Internet no hay nadie, nadie. Ni uno, ni uno solo, ninguno, nadie, solamente yo. Soy el único poeta de Internet que está en la Enciclopedia Británica.

Pero vayamos a lo tuyo. No me fijé de qué país sos. Perdón, perdoname. En España había un escritor tan grande que directamente no cabía en España. Camilo José Cela. La izquierda siniestra (si cabe la redundancia) lo humilló todo lo que pudo. Pero la Asamblea del Nobel no. Se movieron frenéticamente las universidades norteamericanas, se movieron frenéticamente los Nobel de Literatura que estaban vivos, y la Academia Sueca le dio el Nobel. A esa gente, los Nobel vivos, a esa gente la Asamblea del Nobel sí que les hace caso. A nadie más.

El Cervantes es un premio insignificante al lado del Nobel, no existe, directamente no existe. Es más, se puede decir sin exagerar demasiado que el Nobel es el único premio que hay. Rafael Alberti era premio Cervantes, y el escritor más grande de España, Cela, no. Pero era Nobel. Te repito que la izquierda siniestra española lo humilló todo lo que pudo. Entonces Cela, ya desde muy alto, demasiado alto, demasiado grande, demasiado intocable, dijo que Alberti era un ganapán del Gobierno, puede ser que no haya mentido para nada. Un ganapán de la izquierda siniestra.

Pero bueno, yo soy un aficionado, un niñito se puede decir, lo que soy escribiendo. Un poeta de Internet. ¿Qué podés pretender? Menos que cero. Pero Cela no. Pero Cela no. Premio Nobel. Más no hay. Es lo máximo. Más no hay. Y Cela escribió la pornografía más escabrosa del mundo en el lenguaje más bajo y más grosero. Porque el poder depende del lenguaje. El lenguaje iguala a los hombres. El control del sexo y del lenguaje cumple una función social como soporte de las ideologías totalitarias. El verdadero arte tiene la particularidad de poner nerviosa a la gente. La única reacción que producen las malas palabras en los cerebros vacíos es asco. En Suecia en las escuelas primarias a las alumnas les dan anticonceptivos. En Estados Unidos está prohibido rezar en las escuelas. El Primer Mundo. Nosotros de todo eso no sabemos nada. La pornografía más escabrosa del mundo es Premio Nobel. Callar y aprender. La pornografía vuelve pacífica a la gente. Así que podés ver mis palotes, esta obra, estos versos, estas niñerías, estos infantilismos de escritor que recién empieza, de poeta mínimo, es decir de poeta de Internet, los podés ver, digo, a mis palotes de principiante, estos versitos, mis ejercicios pornográficos y de lenguaje de pichoncito, los podés ver, digo, comparar, leyendo el "Diccionario secreto" de Camilo José Cela, que más que Nobel no es, hay que repetir. Estaba aprendiendo a escribir. Los grandes autores no se callan nada. A tal fenómeno tal vocabulario. Y entonces sacá tus conclusiones.

Bueno, creo que es todo. Más o menos.
Saludos Mario. Gracias por escribir. Después te contesto por turno. Todo esto son generalidades para cualquiera, sí, para todos, curiosidades se puede decir didácticas, ojalá. Lecciones de literatura, el arte de nosotros, qué sé yo, digo.

[LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge]

http://es.wikipedia.org/wiki/Jorge_Lemoine

[Mario Martínez]

Hola Jorge.
No creo que seas un simple poeta de Internet (dando por sentado que en Internet he encontrado poetas fabulosos), se que eres un excelente poeta, y no he tratado de ofenderte, cada uno es libre de escribir lo que le parezca, pero también el que lee es libre de decir lo que piensa y lo que le gusta o no, y a mí ese tipo de poemas no me va, compañero.
Eso no quita para que tengas multitud de lecturas (como ese "Libro de poemas), que me encantan y que leo con verdadero placer.
Por cierto, yo sí soy un poeta de pueblo, un poeta insignificante que ha ganado algunos premios a nivel provincial y sólo uno a nivel internacional, y que con mucho esfuerzo y sacrificio ha conseguido publicar tres poemarios. Poemarios que seguramente pasarán sin pena ni gloria por este mundo de escritores aficionados, como los de otros muchos. Es algo que explico perfectamente en mi último poema publicado "Uno de tantos"
En fin, amigo mío, no pretendo entrar en litigio contigo, porque no es mi estilo y porque sé que saldría perdiendo (por la lectura de tu comentario intuyo tu sapiencia sobre el mundo de la escritura y el verso). Así que sigamos leyéndonos y comentando y si en algo te ofendí, perdona, no era mi intención.
Un abrazo.
Mario.

[Óscar Bartolomé Poy]

LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge,
Este "poema" me ha parecido de un exhibicionismo fatuo y gratuito que yo, sinceramente, no llamaría poesía. Ni siquiera lo puedo llamar transgresor, porque repite una fórmula de lo más convencional: llamar la atención recurriendo a lo escabroso y escatológico, sin proponer nada nuevo. Por todo ello, no puedo sino darle la razón a Mario Martínez.

De otro lado, me ha parecido de un pésimo gusto citar comentarios de otros foros sin la autorización de sus autores.

Lo de presumir de premios va con el carácter de cada cual, pero casa mal con una pretendida modestia.

Siento si este comentario te ofende, Jorge, pero es lo que pienso.

[Óscar Bartolomé Poy]

Ay Poy, me cansaron tus agresiones. Firmé Lezica un poema decoroso y me trataste de loco. Ahora me tratás de fatuo y gratuito. Lo tuyo es ofender, puede ser porque sos un resentido. Lo mío es elogiar. Elogiar siempre, no importa qué, conozco lo que valgo como poeta, no necesito ofender, no siento esa necesidad de ofender que sienten los resentidos. Porque vos ofendés por todo, por lo que sea, te retorcés y algún razonamiento para agredir y ofender encontrás. Lo de Lezica era inatacable. Pero en tu retorcimiento de resentido te las ingeniaste. También es posible que seas un poeta muy menor, lo que lo explicaría todo, la ineptitud, la inservibilidad, la envidia, la envidia, las agresiones gratuitas y por todo y por lo que sea, el rebuscado, retorcido, resentido razonamiento de inútil, para agredir, para ofender, de inútil para la poesía. Sí Poy, no servís, no servís para la poesía. La modestia es la virtud de los que no tienen otras. Y la modestia no debe ser parte del poeta. De un insignificante como vos sí, es coherente. La modestia no debe ser parte del poeta. Aprendiste algo más. Un abrazo.

Tilín, tilín. Campana y se acabó. Has repetido dos veces la palabra "envidia" e "inútil". Estás descalificado.

Sí, lo tuyo es elogiar. Por eso copias y pegas los mismos comentarios banales en todos los poemas, que, faltaría más, ni te molestas en leer. ¿Lo haces para que te devuelvan los comentarios y así te inflen el ego? En fin, yo soy un ser insignificante, pero aún conservo mi orgullo y dignidad, y no necesito ir mendigando puerta por puerta para que me hagan caso.

¿Lezica? No sé de qué me hablas. Amigo, tú deliras.

Como he dicho, me declaro inútil e insignificante (creo que nunca me darán el Nobel, snif, snif), pero te doy la razón en una cosa: he aprendido algo de ti, a cómo no ser: arrogante, vanidoso y, lo que es peor, tedioso.

Un abrazo, Lemoine.