La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
Buen ejemplo de cuánto da de sí el soneto, como armazón de la lengua, delicada aguja de oro fino. Me gusta mucho y lo veo muy logrado y espléndido en su forma y contenido. Mi enhorabuena, Sergio. Gracias por compartir.
Un abrazo.
Tu profecía, poeta.
-Mañana hablarán los mudos:
el corazón y la piedra.
-¿Mas el arte?..
-Es puro juego,
que es igual a pura vida,
que es igual a puro fuego.
Veréis el ascua encendida.
Si ; como en los verdines los resbalones vitales son...sorpresivos... con el tiempo se aprende a preverlos hasta que ¡ZAZ! el talón del destino te lo recuerda. Tantea como el sabio que escucha a su mula.
Soneto difícil de resolver, Sergio, y tú lo has hecho con suficiencia y muy buenas maneras.
Un abrazo.
***
Toda verdad corre el riesgo de ser modificada por el tiempo.
cuando vivir era un pecado,
un cilicio sujeto a la ceniza posada en tu frente,
el estigma de un amor que nunca abandonó
las pulsaciones nerviosas de tu pecho
ni el bálsamo de luz que me turbaba en tu mirada.
(Playa de la Almadraba)
En el transcurso de la vida hay muchos tropiezos y heridas que siguen supurando, pero prima el intento por alcanzar los sueños.
Bello soneto, Sergio. Avanti con esa inspiración.
Abrazos.
Poesía.
Recinto de las divinidades
en el vestir de la metáfora.
Encaje de su magnificencia.