Editorial Alaire

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Escribir en un domingo
es robarse todas letras de la semana,
o mejor dicho, resumirlas.
Contar cosas tan sencillas
como saber que después del lunes,
a todos no cae en la cabeza el martes.
Relatar que el miércoles tuve momentos felices,
cuando dos labios me besaron con mucha intensidad,
mas irremediablemente el jueves tuve que despedirme,
porque el viernes estaba empujándome para fuera.
El sábado debería haber lavado el automóvil,
o hacer cualquier cosa que me evitara de pensar
lo que debería hacer el domingo.
Así se va una semana de esas,
en las que no sucede casi nada.
Realmente necesito viajar nuevamente.
A veces el cotidiano me fastidia
y no llamo al cotidiano de rutina,
tan sólo repetir con demasiada frecuencia
las mismas cosas y entonces mi espirito nómada
despierta y me jala para otro sitio,
donde después de un cierto tiempo,
aunque no lo quiera, se repetirá el mismo ciclo.

Iben Xavier Lorenzana

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A veces la monotonía nos despoja de la inspiración,
pero es en ella donde debemos reflejar nuestros momentos
para escribir, y dejar huella.
Me encantó leerte.

Lila Manrique escribió:A veces la monotonía nos despoja de la inspiración,
pero es en ella donde debemos reflejar nuestros momentos
para escribir, y dejar huella.
Me encantó leerte.

Muchisimas gracias por inaugurar estas letras.

Besos - Iben

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A todos nos atrapa esa rutina en que los dias nos persiguen con fiereza. Bien contado.
Un abrazo.
Pepa

Editorial Alaire

DIMANCHE

DIMANCHE

Lila Manrique