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Publicado: Jue, 15 Abr 2010 20:12
LLUVIA
Noche dulce que llega con mis nervios alterados
temblando al recuerdo de pies sobre el baldosar blanco
fué de aquella vez impía en que probaba el frío
con la dolorosa sensación de que este hielo de hoy sea el ensueño
buscaba palabras callejeras, conocidas
sonidos que entretejieran el bocabulario amor
con sílabas cantoras de alma vaga que cansada
ha llegado a casa para romper el cántaro vacio
tenso, mis músculos son cables de tensión alta
que aún de poca astucia estan fundiendose por dentro
con la regularidad de golondrinas chamuscadas
que secan sobre el barro su peyejo
Acaso buscando un nombre entre los libros
no he encontrado el tuyo, ese que rima con el viento
y tuve que ir armando a pedazos la vieja estantería
no vendrá la niebla esta noche, la lluvia se ha hecho eternidad
lentamente el salón va quedando sólo
puedo entonces respirar, siento ahora como ensancha
el aire mis pulmones deteniendo los relojes y las lámparas
tan bajas que susurran canto de hormiguitas
duelen los ojos con las luces blancas
otra vez es todo corazón mojado
cuánto pesa un sentimiento desconocido que se instala en los callejones
nuestro subversivo sueño de ir amontonándo penas
Noche dulce que llega con mis nervios alterados
temblando al recuerdo de pies sobre el baldosar blanco
fué de aquella vez impía en que probaba el frío
con la dolorosa sensación de que este hielo de hoy sea el ensueño
buscaba palabras callejeras, conocidas
sonidos que entretejieran el bocabulario amor
con sílabas cantoras de alma vaga que cansada
ha llegado a casa para romper el cántaro vacio
tenso, mis músculos son cables de tensión alta
que aún de poca astucia estan fundiendose por dentro
con la regularidad de golondrinas chamuscadas
que secan sobre el barro su peyejo
Acaso buscando un nombre entre los libros
no he encontrado el tuyo, ese que rima con el viento
y tuve que ir armando a pedazos la vieja estantería
no vendrá la niebla esta noche, la lluvia se ha hecho eternidad
lentamente el salón va quedando sólo
puedo entonces respirar, siento ahora como ensancha
el aire mis pulmones deteniendo los relojes y las lámparas
tan bajas que susurran canto de hormiguitas
duelen los ojos con las luces blancas
otra vez es todo corazón mojado
cuánto pesa un sentimiento desconocido que se instala en los callejones
nuestro subversivo sueño de ir amontonándo penas