Editorial Alaire

LATIDOS


No me dejéis conmigo a solas
rodeado de látigos latidos
que me pegan duro
y se escabullen
...............................y me retan.

¿Cuál de estos ruidos fontaneros
será el que ahora se despiste
.............................................y salga fuera
contento de afilar su día por romperme?

Donde mi soledad
guardo cien venas descarriadas
y rebeldes, todas a una,
dispuestas para dar, y darme fuerte
de explosiones
en cada cavidad desconocida.

Y así con efusiones se doblan
y adjetivan mi nombre
y lo salpican de olvido como sangre
-todo alaridos-
y me quitan el aire de los dedos

....................................................y los muerden.

Necesito apartarme de este bullir
de vida relativa, interna y aprensiva,
salir hasta los medios,
y allí, silenciado y ausente,
saberme solo y lejos,

.................................y al fin volverme mío.



...

Necesito apartarme de este bullir
de vida relativa, interna y aprensiva,
salir hasta los medios,
y allí, silenciado y ausente,
saberme solo y lejos,

.................................y al fin volverme mío.

ESe final me deja una grata sensación de libertad, todo el recorrido descriptivo es como un grito de libertad, pero el final es una revelación, un soltarse las amarras...

Magnífico trabajo, Ignacio. Como todo lo tuyo.

Ssaludos y abrazos.

Hola Ignacio.
Me gustó tu poema, como siempre, y tal y como dice Marina, los versos dejan al final un canto de libertad.

No me dejéis conmigo a solas
rodeado de látigos latidos
que me pegan duro
y se escabullen
...............................y me retan.

Me gustó el empleo de esas dos palabras de sonido parecido y a la vez tan diferente.
Un abrazo, amigo mío.
Mario.

Late la soledad y lates tú en cada verso. Me encanta pasar por tus letras, ya es vicio.
Un abrazo
Pilar

Bueno ya tienes una voz totalmente tuya o eso me parece a mí. De nuevo nos traes un tema universal y necesario. Y otra vez volvió a gustarme. Se te nota mogollón el amor y la dedicación. Y yo me alegro mucho porque lo disfruto.

Un besote,

Carmen

Hola Ignacio.
Me ha gustado mucho este poema.
Tanto en la forma como en el contenido.
Con la forma le das un ritmo excelente, como unos latidos que van marcandote el ritmo y que te enganchan a seguir leyendo.
Y en cuanto al contenido me he sentido identificado en esa angustia que te leo y en esa necesidad de escapar.

Un poema realmente excelente se mire por donde se mire.

Un afectuoso abrazo

Joan

Gracias Marina por tu lectura y apoyo. No te imaginas lo bien que me sabe.

Otro.

Puff, Ignacio, este poema es estremecedor. En general me gustan tus poemas, y este no es una excepción, y sé que lo leeré otras veces.

Y como ya te han dicho, la aliteración "látigo-latido", tiene una especial fuerza.


Un abrazo.

Gracias Mario por tu lectura atenta y tu comentario grato.

Un abrazo.

"Donde mi soledad
guardo cien venas descarriadas "


".................................y al fin volverme mío."

Ignacio, qué hermosas imágenes!!!

He tenido el gusto de arrancar el día con unos poemas espléndidos y el tuyo los corona.

Felicitaciones, ha sido un gustazo leerte.

Un beso enorme!

Gracias Pilar, también tengo vicio yo con encontrar tu comentario y tu aliento.

Un beso.

Gracias Carmen por todo lo que implica este comentario que me haces, sobre todo porque siempre andamos con las dudas.

Un beso enorme.

Gracias Tristany por tu lectura y tu exquisito comentario. Así da gusto escribir.

Un abrazo y hasta el próximo.

Un acierto el poema en su totalidad. Ritmo, lenguaje y sensaciones se amalgaman en un buen equilibrio.

Ese "látigo latido" me ha gustado mucho mucho, quizás por lo peculiar.

Te dejo un beso, Ignacio
Felicidades
Ana

Muchas gracias Juan por tu generoso comentario. Me alegro de que te haya gustado.

Un abrazo.