Recital de instrumentos de viento
Publicado: Mar, 06 Abr 2010 4:48
Digamos que era el alma un bocado de pan
al que un indigente
desgarró con su aliento.
Digamos que el sentir era una eva o un adán
con un reptil azul
reptando sobre su sueño.
Digamos que soy yo de misticismo carnal,
un ser humano fugaz,
pero también soy eterno.
Digamos, por decir, que no me encuentro mal,
que tampoco estoy okey
y menos aún estoy muerto
y; sin embargo, tal vez, soy profeta de la sal,
un mesías del adiós,
un judas en desencuentro.
Digamos que en tu risa hallé felicidad,
que en tu dolor, dolor;
y en tu existir, infiernos.
Digamos, sin decir ni una palabra de más,
que he encontrado a dios
como prensa en tu cabello.
Digamos otra vez todo lo dicho ya,
pues se puede despertar
en la cuna del reloj
el más mórbido silencio.
al que un indigente
desgarró con su aliento.
Digamos que el sentir era una eva o un adán
con un reptil azul
reptando sobre su sueño.
Digamos que soy yo de misticismo carnal,
un ser humano fugaz,
pero también soy eterno.
Digamos, por decir, que no me encuentro mal,
que tampoco estoy okey
y menos aún estoy muerto
y; sin embargo, tal vez, soy profeta de la sal,
un mesías del adiós,
un judas en desencuentro.
Digamos que en tu risa hallé felicidad,
que en tu dolor, dolor;
y en tu existir, infiernos.
Digamos, sin decir ni una palabra de más,
que he encontrado a dios
como prensa en tu cabello.
Digamos otra vez todo lo dicho ya,
pues se puede despertar
en la cuna del reloj
el más mórbido silencio.