Editorial Alaire

Inequívoco trazo del virus de tu ausencia,
revolcándose en la sombra,
reubicando la sinfonía de algunos besos a oscuras.

Siempre fui peores mujeres que esta que me convoca ahora,
prendando la piel que intentó fugar,
abanicando premisas de raíz desprotegida.

Hoy ha corrido lejos el descaro
y desde lejos me llegan sus tambores.

Anochece en la casa y todo sigue en silencio,
por ejemplo, te miro
y por ejemplo, nadie me ve.

Hay días más suicidas que otros,
ojos lactantes aprovechando el gesto de la soledad,
manojos de minutos acomodados en un costado.

A la vanguardia se le aferra la cobardía en los talones,
sal en las manos,
vestigios del caído que no supo levantarse.

Perdí la curiosidad de un anémico latido
y eso lo ha signado todo.

Y acá estamos casi todos:
la resaca de un amor vulgar
con lágrimas y pensamientos,
la discusión monocromática de tus besos
las tribunas como cadenas de Alcatraz
y el tintineo de unas llaves alejándote.

Yo pensaba que el adiós,
era una cuneta gris al olvido.

Hoy ha corrido lejos el descaro
y desde lejos me llegan sus tambores


Soy un desastre interpretando poemas, pero éste tuyo me ha hablado de la ausencia, y de la aplastante soledad posterior, fundamentalmente porque el adiós no puede evitar que subsista el recuerdo.

Me ha transmitido melancolía, impaciencia, y bastantes emociones más, como me suele ocurrir con tus poemas, siempre ricos en imágenes e ideas.

Me ha gustado mucho, Daniela, por lo visto los altibajos vitales no implican altibajos en la calidad de tus poemas.

Un gran beso.

Daniela tus poemas son todo fuerza, rabia y en ocasiones cierta desesperación bellamente enmarcadas en versos contundentes, me alegra mucho tener la oportunidad de asomarme tu rinconcito en sombras.

Un abrazo

Qué manera de hacer poesía, niña! Éste es un abalorio descollante de sentimientos y lírica. Todos los versos en su santo lugar y con un ritmo impactante!!!

Aplausoss y felicitacionesss.

Un beso grande,

Hallie

Juan Fionello escribió:Hoy ha corrido lejos el descaro
y desde lejos me llegan sus tambores


Soy un desastre interpretando poemas, pero éste tuyo me ha hablado de la ausencia, y de la aplastante soledad posterior, fundamentalmente porque el adiós no puede evitar que subsista el recuerdo.

Me ha transmitido melancolía, impaciencia, y bastantes emociones más, como me suele ocurrir con tus poemas, siempre ricos en imágenes e ideas.

Me ha gustado mucho, Daniela, por lo visto los altibajos vitales no implican altibajos en la calidad de tus poemas.

Un gran beso.

Juan, no es necesario interpretarlo. Creo que con desenredarlo es suficiente. La virtud más noble de la poesía es justamente encontrar en uno mismo un universo.

Un beso enorme.

Gracias por tu cálida presencia.

Israel Liñán escribió:Daniela tus poemas son todo fuerza, rabia y en ocasiones cierta desesperación bellamente enmarcadas en versos contundentes, me alegra mucho tener la oportunidad de asomarme tu rinconcito en sombras.

Un abrazo

Gracias Isra, es un placer tu visita.

Un beso enorme!

Hermoso poema de incomprensión y distancias. Un placer seguir estos versos
Abrazos
Pilar

Daniela Miño escribió:Inequívoco trazo del virus de tu ausencia,
revolcándose en la sombra,
reubicando la sinfonía de algunos besos a oscuras.

Siempre fui peores mujeres que esta que me convoca ahora,
prendando la piel que intentó fugar,
abanicando premisas de raíz desprotegida.

Hoy ha corrido lejos el descaro
y desde lejos me llegan sus tambores.

Anochece en la casa y todo sigue en silencio,
por ejemplo, te miro
y por ejemplo, nadie me ve.

Hay días más suicidas que otros,
ojos lactantes aprovechando el gesto de la soledad,
manojos de minutos acomodados en un costado.

A la vanguardia se le aferra la cobardía en los talones,
sal en las manos,
vestigios del caído que no supo levantarse.

Perdí la curiosidad de un anémico latido
y eso lo ha signado todo.

Y acá estamos casi todos:
la resaca de un amor vulgar
con lágrimas y pensamientos,
la discusión monocromática de tus besos
las tribunas como cadenas de Alcatraz
y el tintineo de unas llaves alejándote.

Yo pensaba que el adiós,
era una cuneta gris al olvido.

Daniela, no es novedad que tu forma de decir me moviliza, aunque cada nuevo poema, signifique nuevas dimensiones de expresiòn (no estoy segura de saber comunicar lo que deseo) formas de decir tantas cosas que tal vez sean comunes en su sentir, y con esto quiero decir compartidas, pero con una forma de hacerlo que transporta. En fin, me encanta leerte siempre, un abrazo, Luna.-

Hallie Hernández Alfaro escribió:Qué manera de hacer poesía, niña! Éste es un abalorio descollante de sentimientos y lírica. Todos los versos en su santo lugar y con un ritmo impactante!!!

Aplausoss y felicitacionesss.

Un beso grande,

Hallie

Gracias Hallie!

Qué gusto verte por acá!

Un besote!

Hay un montón de versos hermosos y sublimes en tu poema. Si tuviera que enumerarlos todos creo que volvería a escribir de nuevo tu poema... pero entonces sólo sería la caricatura del mismo... como su propio título indica. Pero si tuviera que destacar alguno de entre todos, me quedo con los dos últimos de final. Perfectos. Consigues siempre motivar mi atención con tus palabras.
Un abrazo, querida amiga.
J. manuel

Pilar Morte escribió:Hermoso poema de incomprensión y distancias. Un placer seguir estos versos
Abrazos
Pilar

Gracias Pili, siempre es un gran gusto encontrar tu comentario aquí.

Un beso enorme!

Luna de Nos escribió:

Daniela Miño escribió:Inequívoco trazo del virus de tu ausencia,
revolcándose en la sombra,
reubicando la sinfonía de algunos besos a oscuras.

Siempre fui peores mujeres que esta que me convoca ahora,
prendando la piel que intentó fugar,
abanicando premisas de raíz desprotegida.

Hoy ha corrido lejos el descaro
y desde lejos me llegan sus tambores.

Anochece en la casa y todo sigue en silencio,
por ejemplo, te miro
y por ejemplo, nadie me ve.

Hay días más suicidas que otros,
ojos lactantes aprovechando el gesto de la soledad,
manojos de minutos acomodados en un costado.

A la vanguardia se le aferra la cobardía en los talones,
sal en las manos,
vestigios del caído que no supo levantarse.

Perdí la curiosidad de un anémico latido
y eso lo ha signado todo.

Y acá estamos casi todos:
la resaca de un amor vulgar
con lágrimas y pensamientos,
la discusión monocromática de tus besos
las tribunas como cadenas de Alcatraz
y el tintineo de unas llaves alejándote.

Yo pensaba que el adiós,
era una cuneta gris al olvido.

Daniela, no es novedad que tu forma de decir me moviliza, aunque cada nuevo poema, signifique nuevas dimensiones de expresiòn (no estoy segura de saber comunicar lo que deseo) formas de decir tantas cosas que tal vez sean comunes en su sentir, y con esto quiero decir compartidas, pero con una forma de hacerlo que transporta. En fin, me encanta leerte siempre, un abrazo, Luna.-

Gracias Lunita, siempre es bienvenido lo que quieras decirme.

Un fuerte abrazo!

José Manuel Sáiz escribió:Hay un montón de versos hermosos y sublimes en tu poema. Si tuviera que enumerarlos todos creo que volvería a escribir de nuevo tu poema... pero entonces sólo sería la caricatura del mismo... como su propio título indica. Pero si tuviera que destacar alguno de entre todos, me quedo con los dos últimos de final. Perfectos. Consigues siempre motivar mi atención con tus palabras.
Un abrazo, querida amiga.
J. manuel

Gracias José Manuel, por tu inmensa presencia en esta hojita.

Un beso enorme!

Me gusta el desdoblamiento, el hablar desde adentro y de repente poder mirarse desde otra perspectiva. Y bueno, este verso "Siempre fui peores mujeres que esta que me convoca ahora" jaja, siempre elijo los más de escoba y sombreros puntiagudos.

Un gusto, che, abrazos.

Martín Desormeaux.-

Hola Daniela.
Un poema intimista y nostágico, amiga mía, con un punto de amargura.
Excelentes imágenes en tus versos.
Por cierto me quedo con el pareado final:

Yo pensaba que el adiós,
era una cuneta gris al olvido.

Pero yo le eliminaría la coma en "adiós", queda más rotundo y la creo innecesaria.

Un fuerte abrazo, amiga mía.
Mario.