Editorial Alaire

Francisco, me gusta como escribes, pero te envuelves a veces en un pesimismo poético que solo remontas en los versos. Dejemos que los muertos entierren a los muertos, pero nosotros sigamos con aquello que nos es imprescindible. Un placer leerte, de veras
Abrazos
Pilar

Francisco Lobo,

Magistral, le felicito

le dejo una grabación espero que le guste:

http://www.youtube.com/watch?v=QlQto-HXldM



Un abrazo fuerte, querido maestro

Esta visión de la poesía actual, escéptica y pesimista, la desarrollas con una calidad que, como te dije en otro poema, te desmiente. La poesía ha estado siempre con el hombre, y supongo que en cualquier época, lo malo será más numeroso que lo correcto, y lo genial será siempre una excepción.

En la tumba de Baudelaire hay siempre flores recién cortadas, y poemas, también poemas.


Con admiración, un abrazo.

Sigue lanzando mierda con la fuerza de tu poesia.

Hace tiempo que no huelo a podrido en este foro, gracias por ello.

Abrazos

"Los cálices no están vacíos,
en su interior gritan los versos.
Bebed, bebed, malditos,
la plenitud de los símbolos.
No florecen amapolas en la nieve."

Un cierre magistral, Francisco!! Van aplausos fuertes y sostenidos, eh!

Hallie

Francisco Lobo escribió:Ejercicio insano
*
Boudelaire duerme entre pétalos ruinosos.
*
Los cálices no están vacíos,
en su interior gritan los versos.
.

Creo que la lírica, como género, nunca se encamó lejos de lo fronterizo, del riesgo emocional e intelectual, de lo maldito, de la locura de la lucidez. En ti apremian estos presupuestos en versos que se desenvuelven en la melopea del suplicio. Yo no veo nada pesimista en tu trabajo: percibo -más bien- un saludable regodearse y contemplarse de manera narcisista y sin complejos en el marasmo de las emociones, deseos, sueños, realidades e irrealidades que nos conforman. El pretexto es la poesía como vehículo de expresión, el contenido es el hombre y su existencia. Tu poema, estupendamente conformado en el ritmo y coherente en su desarrollo, adolece -tal vez- de excesiva adjetivación que lo eleva a tonos épicos. Quizás limado de esas aristas estos versos resultaran más ásperos y crudos, más descarnados, si cabe. Pero la combinación de dos estilos no da mal resultado, pues puede percibirse un canto majestuoso, monumental, sobre las ruinas de la existencia en la que vivimos y de la que bebemos.
Salud.

Hola Paco.
Veo que continuas inmerso en ese tipo de poesía que se adentra en las alcantarillas de la misma para buscar sus podredunbres y sus ausencias y mostrárnoslas, pero aún así (o quizá por ello), tus versos siguen alcanzando cotas elevadas, tanto en lenguaje como en lirismo, aunque sea un lirismo un tanto triste y desesperanzado. Un fuerte abrazo, amigo mío.
Mario.