Editorial Alaire

http://www.slide.com/r/nsxqjmEF5z9icxa4 ... bedded_url

Inocencio tenía los ojos buenos, tanto casi como mandarinas en abriles.El pelo revuelto por halarlo y un olor permanente a lunas desmayadas.¡Lastima! - dijo el Profesor Macedo al alumnado. Es una pena, que elcotolongo (psiquiátrico) le haya reducido el seso, de este modo-. Perobueno, maestro-inquirió Jiménez el más aventajado alumno. Su cerebro espara nosotros ahora: Un garbanzo de a libra._ Concluyó con la miradapuesta sobre aquélla masa casi amorfa y liviana sobre sus manos.

Alejandra, es maravilloso todo lo que decís con tan pocas palabras!
Me gustó mucho, muchísimo!

Besos.

Alejandra Goerne escribió:http://www.slide.com/r/nsxqjmEF5z9icxa4 ... bedded_url

Inocencio tenía los ojos buenos, tanto casi como mandarinas en abriles.El pelo revuelto por halarlo y un olor permanente a lunas desmayadas.¡Lastima! - dijo el Profesor Macedo al alumnado. Es una pena, que elcotolongo (psiquiátrico) le haya reducido el seso, de este modo-. Perobueno, maestro-inquirió Jiménez el más aventajado alumno. Su cerebro espara nosotros ahora: Un garbanzo de a libra._ Concluyó con la miradapuesta sobre aquélla masa casi amorfa y liviana sobre sus manos.

Ale.

Recibe un gran saludo. Creo que la narración no concluye del todo; mi sentimiento es que espero algo inminente, no lo sé, que Inocencio abrirá los ojos y exigirá que le devuelvan el cerebro, o que contará cómo fue que le estalló el seso, algo así. Quizá podrías trabajar mas en el relato.

Eduardo.

Aubriel Camila de la Prad escribió:Alejandra, es maravilloso todo lo que decís con tan pocas palabras!
Me gustó mucho, muchísimo!

Besos.

Aubriel... muchas gracias por asomarte compañera, te mando un beso.

Eduardo R. de la Cruz escribió:

Alejandra Goerne escribió:http://www.slide.com/r/nsxqjmEF5z9icxa4 ... bedded_url

Inocencio tenía los ojos buenos, tanto casi como mandarinas en abriles.El pelo revuelto por halarlo y un olor permanente a lunas desmayadas.¡Lastima! - dijo el Profesor Macedo al alumnado. Es una pena, que elcotolongo (psiquiátrico) le haya reducido el seso, de este modo-. Perobueno, maestro-inquirió Jiménez el más aventajado alumno. Su cerebro espara nosotros ahora: Un garbanzo de a libra._ Concluyó con la miradapuesta sobre aquélla masa casi amorfa y liviana sobre sus manos.

Ale.

Recibe un gran saludo. Creo que la narración no concluye del todo; mi sentimiento es que espero algo inminente, no lo sé, que Inocencio abrirá los ojos y exigirá que le devuelvan el cerebro, o que contará cómo fue que le estalló el seso, algo así. Quizá podrías trabajar mas en el relato.

Eduardo.

Que bonito saber de ti Eduardo. Ya estoy viviendo el DF. Me voy a poner en contacto contigo a ver si nos tomamos un cafecito. Las acotaciones que me haces, me parecen pertinentes, pensaré en ello. Te mando un abrqazo grande.

me encanta esa luna desmayada de olor permanente, bravo amiga!!!

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Alonso, que alegría tenerte en algo mio amigo. Gracias por tu lectura y tu comentario. Un abrazo cruzando el charco.

Me gusta este relato, con imágenes elocuentísimas, contundentes, armoniosas. A mi parecer, no necesita nada más. Es preciso y deja tarea.
Aplausos y un beso