Editorial Alaire

La boca que te acoge
la mano que te invoca
el corazón que te inventa
el párpado que te mide
el pie que te danza
la pupila que te sueña
el dedo que te indaga
el vientre que te espera
el muslo que te enhebra
la lengua que te estudia
el sexo que te nombra
tu nombre en las arterias
tú
yo
al margen de tu piercing.

Qué concentración poética tan espléndida, Valentín! Declaras y ejerces el universo físico; se intuye amor en cada explosión sanguínea...

Muchísimos aplausosss!

Un beso grande y felicitaciones.

Hallie

Me llevó de un tirón al piercing (que me gustan mucho, además).
Un poema dinámico y veloz.
Mis felicitaciones.
Un beso.

La boca que te acoge
la mano que te invoca
el corazón que te inventa
el párpado que te mide
el pie que te danza
la pupila que te sueña
el dedo que te indaga
el vientre que te espera
el muslo que te enhebra
la lengua que te estudia
el sexo que te nombra
tu nombre en las arterias
tú
yo
al margen de tu piercing. (Valentín Martín)


Sin ninguna duda, llega a alcanzar el éxito sexual, porque fuera del piercing, todo queda registrado para actuar en consecuencias...Original e innovador poema, cuyo credo es altamente claro. Aquí haces uso indiscriminado de las asonancias, algo raro ver en tus poemas, pero ha quedado, como dicen los infantes, del diez.

Un abrazo de los grandes, para un amigo poeta, idem.

José Manuel F. Febles

Gracias por tu aproximación y lectura, Hallie. Ya ves, una leve geografía de lo sensual y un poema leve también, que no todo van a ser profundidades sombrías.

Un beso.

Como bien dices, no todo van a ser profundidades sombrías (qué aburrimiento si así fuera)... Y en tu poesía se nota que es que tú no eres ni aburrido ni sombrío... Me ha encantado, para no variar.

Te mando un beso,

Carmen

Gracias, Daniela, los piercing son una seña de identidad. El poema es una aproximación al encuentro amoroso y como tal está concebido, me alegran tus palabras.

Un beso.

Me encantó ese despliegue en el encuentro. Un placer
Abrazos
Pilar

Gracias, José Manuel, por tu atenta lectura. ¿Las asonancias? Estoy bailando en el poema y todas conducen a los versos finales, al éxtasis. (Ya sé que -académicamente- son repudiables, pero no quise restarle frescor a los versos).

Un abrazo.

Un poema veloz para adentrarse en la geografía de la amada. Me gusta que utilizas muchos de los sentidos, tal y como debe ser. Saludos.

Precioso de principio a fin, amigo Valentín; toda una anatomía de percepción poética, además con una sorpresiva e irónica etocacada final.

Un fuerte abrazo, querido amigo.

Gracias por acercarte y dejar esa hermosa huella tuya, Carmen. Procuro que no se me note que estoy en la flor de la decrepitud, de ahi poemas como este.

Un beso.

Hola Valentín.
Hermoso poema, amigo mío.
Supongo que el piercing no sería óbice para que el amor alcanzase su cúspide
Un placer leerte, abrazos.
Mario.

Pilar, me agrada esa aprobación tuya: hay que ir al amor festivo con todas las velas desplegadas. Gracias por tus palabras.

Un beso.

Alejandra, es una obviedad lo que voy a decir, pero en el acto del amor hay que poner todos los sentidos incluso alguno más que nos inventemos: así he tratado de escribirlo. Me alegra tu percepción del poema, gracias por tus palabras.

Un beso.