
“Yo soy agua de sal –lo has comprobado-
llego desde la voz hasta el cansancio
para ganar terreno en bajamar y corroer tu nombre”
Marina Centeno
.VII.
No volveré a recoger astillas
que quedan varadas entre los agujeros
después que el lodo siniestra en tenues capas
cada centímetro del cuerpo
No volveré en marisma
asentar la lengua a las orillas del puerto
No volveré
El peso del sol vence al invierno
en suave orla con su vaivén de agua
cae sobre el cascajo
como señuelo que atrapa peces muertos...