Editorial Alaire

LA BRÚJULA DEL SUEÑO



-Siempre quise sentirte de este modo
tan cercano a la muerte,
encajonar los días y sus noches
para que fueran simplemente tumbas
donde no ser contigo,
y atado a la existencia me dormía,
como un Houdini triste.

Con tu antorcha en mis manos
iluminaba huellas en los sótanos
antiguos de mi beso.

Temeroso del ruido, desojado,
estrangulaba el trino de los coches,
el claxon de los pájaros,
arrastraba sin prisa los cadáveres
del trueno y de la lluvia
hacia el lado impermeable del silencio.

La brújula del sueño señalaba
la evanescencia de tu realidad.

Esposado a tus sombras,
los ojos resistían el interrogatorio de la luz,
y bostezaba entonces,
con tu boca en mi boca,
en un cansancio cada vez más nuestro.

Condenados a muerte,
ejecutados
luego, sobre el muro vencido de las sábanas
sentí tu eternidad,
la distraída forma del amor para siempre.

-Desnudo junto a ti,
bajo esta lápida de tiempo indefinido,
te escucho todavía respirar…
tú cruzas por mi lluvia
y yo regreso al mundo
con tu antorcha mojada.

¡Oscura claridad la de este día!

…y me pierdo en la niebla,
arrastrando las cuerdas del insomnio.



Luis Oroz.

Un gusto leerte. Saludos cordiales.

Me gusta esta forma tuya de hacer poesía, con un lenguaje cercano pero removiendo la tierra para buscar las raíces con las que nutrir tu propio paisaje.

Combinas las palabras hasta casi exprimirlas de contenido y continente. Y sugieres, como si fueras el puente a otras palabras.

En resumidas cuentas, que tus palabras abren mis ojos y abren mis manos.

Un saludo.

Luis, sos genial.
Es un poema maravilloso desde el verso inicial hasta el último, si quisiera resaltar algo tendría que resaltarlo todo, es perfecto.

Besos y mi admiración.

Genial poema, Luis. Tu poesía es impresionante, además de pulcra y bien cuidada en la forma.

Felicitaciones
Un abrazo
Ana

Luis Oroz,

Versos de maestro


te felicito

Un abrazo fuerte, querido amigo

¨ Desnudo junto a ti, bajo esta lápida de tiempo indefinido
te escucho todavía respirar…
tú cruzas por mi lluvia y yo regreso al mundo
con tu antorcha mojada.

¡Oscura claridad la de este día!

…y me pierdo en la niebla, arrastrando las cuerdas del insomnio. ¨


Hermoso poema. Lo encuentro muy bien trabajado, simple, dócil a la lectura. Me ha gustado también el clima en que se sumergen los versos, nubloso y rojizo. Y por último, para destacar el cierre, es maravilloso.

Bueno Luis, ha sido un placer leerte.
Un abrazo.-

Impresionante inicio de poema para un final espectacular. Aplaudo con el alma estos versos que se dicen solos y llenos de emoción. Gracias, amigo Luis; es un privilegio leerte y una ocasión de aprender a decir bien. Con un abrazo.
Salud.

Hola Luis.
Ya sabes que soy un ferviente admirador de cuanto escribes, amigo mío, pero aún sabiendo de tu maestría, siempre me sorprende la belleza de tus nuevos versos. Un verdadero placer leerte. Abrazos.
Mario.

Rolando del Pozo escribió:Un gusto leerte. Saludos cordiales.

El gusto es mío, Rolando, gracias por tu paso.

Un cordial saludo.


Luis Oroz.

Luis Oroz escribió:-Siempre quise sentirte de este modo tan cercano a la muerte,
encajonar los días y sus noches para que fueran simplemente tumbas
donde no ser contigo,
y atado a la existencia me dormía, como un Houdini triste.

Con tu antorcha en mis manos
iluminaba huellas en los sótanos antiguos de mi beso,
temeroso del ruido, desojado, estrangulaba el trino de los coches,
el claxon de los pájaros,
arrastraba sin prisa los cadáveres del trueno y de la lluvia
hacia el lado impermeable del silencio.

La brújula del sueño señalaba la evanescencia de tu realidad.

Esposado a tus sombras los ojos resistían el interrogatorio de la luz,
y bostezaba, entonces, con tu boca en mi boca,
en un cansancio cada vez más nuestro.

Condenados a muerte, ejecutados
luego, sobre el muro vencido de las sábanas
sentí tu eternidad,
la distraída forma del amor para siempre.

-Desnudo junto a ti, bajo esta lápida de tiempo indefinido
te escucho todavía respirar…
tú cruzas por mi lluvia y yo regreso al mundo
con tu antorcha mojada.

¡Oscura claridad la de este día!

…y me pierdo en la niebla, arrastrando las cuerdas del insomnio.





Luis Oroz.

¡Qué casualidad encontrarme este poema! Anoche me dieron las tantas, no podía conciliar el sueño (últimamente me ocurre a menudo) leo...los versos que destaco en negrita son magníficos. El poema, de p.madre (exquisito). Muchas veces he estado junto a ella perdido entre las sombras. Un placer leerte, Luis. Un cálido abrazo Poeta.

javi

Magnífico poema, como todos los tuyos. El poema seduce al lector de principio a fin. Mi felicitación y un abrazo.

Me gusta mucho este poema-relato de unos acontecimientos que expones de forma cronológica dando una prespectiva interesante de tu punto de vista de la situación.
Me ha parecido un poema muy cercano como si me lo estuviera recitando un amigo, me lo he hecho mío rápidamente.
Mis felicitaciones y un fuerte abrazo
Joan

Qué preciosidad de poema. Lo he leído varias veces y cada vez me gusta más, veo más profundo el decir. Ha sido un verdadero placer seguir tus versos
Abrazos
Pilar

Muy hermoso poema, querido amigo Luis, trufado de recursos retóricos en dirección al umbral del escritor cuajado.
Es una gran satisfacción conocer tus avances en el complicadísimo estrato de la técnica poética. Unido a tu gran sensibilidad, el conocimiento de los intríngulis del poema está haciendo verdaderas maravillas, compañero.
Ha sido un placer leerte, estás soltando la mano, jajaja, y bien que se nota en un trabajo que me ha parecido muy reseñable; un buen poema, para recrearse.
Abrazotes.