Editorial Alaire

Porque apenas estamos,
por este acontecer que mira al cielo, para doblar creencias,
o por la realidad que se consume, como una risa, extraña de existir.

Por la incógnita dulce del amargo silencio,
por el dolor a medias o el placer impreciso,
por otra sinrazón que no voy a imprimir, pero que imprimo
en el papel de la melancolía;
me siento inacabado.

Pero bendigo el don de la ignorancia,
el modo inconfundible con que nos confundimos,
la frágil soledad que empuja los entornos
para alejarnos de nosotros mismos.

Porque apenas estamos, y es otro el “sinlugar” que nos cobija,
podemos esperar…
y hundir el punto frío de la interrogación
en la arena caliente del fracaso,
o sumergir su curva en el mar de la herida,
para observar, ingrávidos,
cómo le crecen branquias a la muerte.

Por mi parte, me quedo persiguiendo esa certeza que me aleja de todo,
la quieta finitud que mueve al mundo,
el ojo de cristal donde planean,
el olvido y el tiempo,
el último comienzo en que rendirse.




Luis Oroz.

Toda una lección de poesía, Luis. Ha sido magnífico leer tu poema. Un abrazo.

Caray, qué vuelo, qué maestría, qué dominio.

Me retiro (de nuevo) a meditar, verde de envidia.

AbraÇo

F.-

Precioso. Te iba a reseñar unos versos, pero no he podido decidirme, me quedo el poema entero. Cuántas verdades escondes entre líneas...
Aplausos
Un abrazo grande
Pilar

Guau, chaval. Tú si que sabes...vuelvo a leerlo. besos

Luis, magnífico, por mi parte... un poema Grande. Un abrazo.

Ahí estas tú!! colega chef, todo un lujo de poema, esa expresión angustiosa de lo irremediablemente inacabado. Una propueta poética que seguro dará que hablar.

Un fuerte abrazo.

Ramón

Toda una lección de poesía, Luis. Ha sido magnífico leer tu poema. Un abrazo.

Mil gracias, compañero, todo un halago, más, viniendo de un poeta de tu talla.
Recibe mi sincero abrazo.

Luis Oroz.

Federico

Caray, qué vuelo, qué maestría, qué dominio.

Me retiro (de nuevo) a meditar, verde de envidia.

AbraÇo

Me haces sonreir, federico , te aseguro que tu no tienes nada que envidiar.
Muchas gracias por la benevolencia de tus palabras.
Abrazos, compañero.

Luis Oroz.

Un poema, cuya lectura es muy agradable y exitosa. Felicitaciones. El tiempo me impide hacer un comentario como es debido.

Abrazos

José Manuel F. Febles

Me quedo con la idea del final del poema, Luis, y aplaudo todo el buen trabajo que sé que hay ahí dentro....

Un placer. Y un beso,

Carmen

Pilar

Precioso. Te iba a reseñar unos versos, pero no he podido decidirme, me quedo el poema entero. Cuántas verdades escondes entre líneas...
Aplausos
Un abrazo grande
Pilar

Gracias, Pilar, por mirarme con tan buenos ojos.

Siempre es encantadora tu visita.
Un besazo desde la isla.

Luis Oroz.

Hola Luis.
decimos por aquí cuando algo es grande que es como la copa de un pino.Así me parece tu poema,el ritmo perfecto y el contenido,para leer y releer,hasta exprimir el jugo a cada verso.
Con tu permiso me lo guardo amigo,un cordial saludo.

Magnífico, Luis. Un poemazo.

Enhorabuena
Un beso
Ana

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Es verdad que somos productos inacabados, o mejor, en constante construcción. Por cierto, siempre que puedo me paso por tu blog. Bravo, poeta!

Abrazos - Iben



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