Editorial Alaire

Quería envejecer más rápido que un cuerpo hermoso y débil,
conservar el perfil sólo para las grandes ocaciones
en que somos visibles
y llenarme la boca de palabras esdrújulas
que sonaran impares
en los fondos marinos.

Quería estar muy quieto
para que tú me acurrucaras
con tus abrazos míticos,
con el miedo y la piel que sobra del deseo,
con los colores de una hembra entera.

La tristeza de un hombre
se debe a la adicción a la velocidad,
a correr y correr para ser joven
y dejarse su sombra
en un espejo estúpido
que se ríe del agua y de la tierra.

Del sonido agrietado de una orilla.

De los sueños maduros
que cada noche caen como humo verde.

Un poema que me ha gustado, tanto formal como conceptualmente; lo dices, y lo dices bien, Juanmi, bajo mi modesto punto de vista. "Llenarme la boca de palabras esdrújulas que sonaran impares..." Muy bueno. Luego, esta estrofa que da que pensar:

La tristeza de un hombre
se debe a la adicción a la velocidad,
a correr y correr para ser joven
y dejarse su sombra
en un espejo estúpido
que se ríe del agua y de la tierra.

Y la finalización, magnífica. Mi aplauso, compañero.
Un abrazo.
Julián Borao

La tristeza de un hombre
se debe a la adicción a la velocidad,
a correr y correr para ser joven
y dejarse su sombra
en un espejo estúpido
que se ríe del agua y de la tierra.

Estoy de acuerdo con Julián, esa estrofa es la más hermosa del poema y da muchísimo que pensar...

Un beso,

Carmen

Suscribo a Julián y Carmen, esa estrofa es hermosa y con una filosofía que hace pensar.
Enhorabuena
Abrazos
Pilar

Juanmi Jerónimo, de los pies a la cabeza es hermoso tu poema, dejando un bello sentir a mi alma, un abrazo,y en hora buena.

Felicitacionespor lo logrado.