Editorial Alaire

Escribes dolorida con ganas de revancha somos muchos escupiendo en sus

coronas.

Abrazos un placer.

La lluvia, la nieve, la niebla…
quedan fuera, morían antes de llegar a tu destino


Cada viaje era un sueño inconcluso,
una aventura rugiendo entre vagones,
sorteando señales; atravesando túneles, cuyas bocas
oscuras te transportaban un instante hasta el infierno.

Cada destino, morir un poco y renacer en otra dimensión.

Ya nadie arrastra su pasado en maletas con correas;
ahora, es tan liviano, que cabe en un portafolios
o se comprime milagrosamente en un pendrive de moda.

No has llegado y ya conoces la hora del regreso. [/quote]

MAR, ¡Qué gratos recuerdos me hizo rememorar tus versos!...aquellos viajes en tren donde contaba las estaciones, donde asomarse a las ventanillas era una aventura, donde entablabas contacto con todo tipo de gente y había tiempo para todo...ahora todo transcurre tan deprisa...me encantó tu poema, lleno de imágnes que tengo grabadas en la memoria y resurgen muchas veces....el final es magnífico...esos túneles que nos daban miedo de pequeños y a su vez contábamos el tiempo que tardaba el tren en salir y ver la luz de nuevo...tantos y tantos momentos que se clavaban hondos....gracias por hacerme coger un tren y viajar en él a través de tus letras...una maravilla. Un fuerte abrazo.

javi

[quote="MarRevuelta"]

Recuerdo esa sensación, al mirar a través de la ventanilla, de que era el mundo el que se movía, no yo.

Un beso.

Marcos

MarRevuelta escribió:A veces,
al asomarte a la ventana veías el mundo

Un mundo cambiante;
azul y verde o gris y negro.
Pasaba ante tus ojos con la rapidez del rayo
mientras tu retina giraba loca en busca de apoyo
que guardara el equilibrio.

La lluvia, la nieve, la niebla…
quedan fuera, morían antes de llegar a tu destino

Incluso había veces,
que una sonrisa llena de mocos
te robaba el alma y prometías
volver sobre tus pasos
para buscar esa mirada
y asomarte a ella.

Casi siempre, sólo quedaba en la intención.

Cada viaje era un sueño inconcluso,
una aventura rugiendo entre vagones,
sorteando señales; atravesando túneles, cuyas bocas
oscuras te transportaban un instante hasta el infierno.

Cada destino, morir un poco y renacer en otra dimensión.

Ya nadie arrastra su pasado en maletas con correas;
ahora, es tan liviano, que cabe en un portafolios
o se comprime milagrosamente en un pendrive de moda.

No has llegado y ya conoces la hora del regreso.

Mar ... no me alcanzan las palabras para decir lo que sentí al leer tu poema.
Es bellísimo, transporta. El final es una genialidad.

Besos y aplausos muy fuertes.

He realizado bastantes viajes en tren y tu poema ha conseguido que evocara algunos momentos que guardo gratamente en la memoria. Me gusta como describes el contraste entre las sensaciones más "humanas" que se veían en los antiguos trenes frente a la asepsia de los actuales. El verso final es muy bueno. Mi felicitación y un abrazo.

Joan Port escribió:Escribes dolorida con ganas de revancha somos muchos escupiendo en sus

coronas.

Abrazos un placer.

Pero...tanto se nota? La revancha a veces nos libera de tensiones. Besos, compañero.

Javier Cañas Belmar,

Gracias por tu comentario y para mí es todo un gusto que hayas disfrutado.
He viajado en tren hace muy poco, no lo hago apenas, el coche es muy cómodo pero he recordado una época en que viajaba en aquellos correos muy a menudo. Me ha gustado la sensación de volver a revivirlo. Creo que repetiré más a menudo. Besos

Qué bien lo describes y como nos transportas a esos tiempos. Un placer haberte leído
Un abrazo grande
Pilar

Muy bien descrito, Mar, siempre me han atraido las estaciones y los viajes en tren y, de hecho, sigo haciéndolo de vez en cuando y lo he plasmado en algún poema. Tus versos finales tienen algo de reproche, pero también hay, a lo largo del poema, plácida nostalgia y una acertada recreación de sensaciones y paisajes. Un poema para releer y disfrutar.
Abrazos.
Julián Borao

.


Algunos se van al poema, yo casi siempre me interesó más por el tema. *sonrisas* Trenes Bala, o de Alta velocidad, como se les llame tienen también su lado seductor, el paisaje también se observa y nada más desagradable que la lentitud de los trenes antiguos. En todo caso no me parece que las relaciones humanas se hayan vuelto más frías. Soy un fiel pasajero del tren bala Stuttgart –Frankfort y siempre encontré alguien para charlar. Pero en fin, no deja de ser verdad que había un lado más romántico en esos lerdos trenes del pasado cuya atmosfera describes tan bien. Un placer leerte. ¡Bravo, poeta!.Besos - Iben


.<o:p></o:p>

Marcos de la Mancebía escribió:

MarRevuelta escribió:

Recuerdo esa sensación, al mirar a través de la ventanilla, de que era el mundo el que se movía, no yo.

Un beso.

Marcos

Así es Marcos, mirar al horizonte era un placer pero a lo inmedito, un mareo. Sin embargo, me encantaba dejar volar a la imaginación. Era, como te diría...dos viajes en uno. Qué lo voy hacer, para depende que cosas, soy una romántica. Un placer que estés por aquí cerca. Besos.

[quote="Aubriel Camila de la Prad


Mar ... no me alcanzan las palabras para decir lo que sentí al leer tu poema.
Es bellísimo, transporta. El final es una genialidad.

Besos y aplausos muy fuertes.[/quote]





Tú que eres un encanto. Me alegro que te haya gustado pero he jugado con ventaja, ¿quién no recuerda un viaje en tren?
Besos para tí y que lleguen lejos.

Ramón Carballal escribió:He realizado bastantes viajes en tren y tu poema ha conseguido que evocara algunos momentos que guardo gratamente en la memoria. Me gusta como describes el contraste entre las sensaciones más "humanas" que se veían en los antiguos trenes frente a la asepsia de los actuales. El verso final es muy bueno. Mi felicitación y un abrazo.

Iben dice que no se pueden comparar, y es verdad. No serían prácticos hoy en día pero... que quieres, a mi me gustaban. Agradezco tus palabras y me alegro haberte llevado un buen recuerdo. Besos.

Hola Mar.
Si, es una sensación que se antoja conocida, ese viajar, ese abrir los ojos al mundo, ese equipaje que hoy se hace casi innecesario.
me gustó el poema, amiga mía. Un abrazo.
Mario.