Editorial Alaire

"Y otras veces la vida se me va con lo que escribo"
( Joaquín Sabina)

Yo viajero aferrado a un sueño de arcilla,
¿en qué ciudad antigua se perdió mi equipaje
de amor entre la duda?.
Un gélido anatema persigue a mis instintos
y sin piedad apaga al deseo su fiebre.
Ahora cuando cae la luz por el talud de la noche
advierto un temblor de lodo agitándome la sangre
y en cada poema que escribo se detiene algún latido.
Un escalofrío de amnesia mis credenciales borró
y solo camino hacia el ocaso donde grabados en mi sed
hay cántaros de rabia saciándome las vísceras.
Huérfano ya de vida, al otoño presiento
con su pulso de hojarasca que a mi piel
siempre la está lacerando.

A veces tengo miedo de abrir los párpados al alba
y que descubran la sombra que contra mi utopía conspira.
Como una mentira tangible quedaron en la memoria
esas máscaras del tiempo con su irreversible engaño .
Hoy estoy aquí desnudo de esperanza, con la soledad
cubriendo esta carne de ayunos lastimada.
Se hospeda algo turbio en mis muertes interiores
y va cegándome esa luz que aguarda serenísima
del otro lado del silencio para alumbrar mi voz adormecida.
Desde el vacío tengo querencia a renacer y a veces,
dudo si soy final o soy promesa y si aún pueden los sueños
resurgir de entre esta bruma que envejece a mis días,
pero la herida telúrica del futuro sangra por este dolor
que sólo codicia habitar a perpetuidad el infinito.

Rafael Valdemar escribió:"Y otras veces la vida se me va con lo que escribo"
( Joaquín Sabina)

Yo viajero aferrado a un sueño de arcilla,
¿en qué ciudad antigua se perdió mi equipaje
de amor entre la duda?.
Un gélido anatema persigue mis instintos
y sin piedad apaga al deseo su fiebre.
Ahora cuando cae la luz por el talud de la noche
advierto un temblor de lodo agitándome la sangre
y en cada poema que escribo se detiene algún latido.
Un escalofrío de amnesia mis credenciales borró
y solo camino hacia el ocaso donde grabados en mi sed
hay cántaros de rabia saciándome las vísceras.
Huérfano ya de vida, al otoño presiento
con su pulso de hojarasca que a mi piel
siempre la está lacerando.

A veces tengo miedo de abrir los párpados al alba
y descubran esa sombra que contra mi utopía conspira.
Como una mentira tangible quedaron en la memoria
esas máscaras del tiempo con su irreversible engaño .
Hoy estoy aquí desnudo de esperanza, con la soledad
cubriendo esta carne de ayunos lastimada.
Se hospeda algo turbio en mis muertes interiores
y va cegándome esa luz que aguarda serenísima
del otro lado del silencio para alumbrar mi voz adormecida.
Desde el vacío tengo querencia a renacer y a veces,
dudo si soy final o soy promesa y si aún pueden los sueños
resurgir de entre esta bruma que envejece a mis días,
pero la herida telúrica del futuro sangra por este dolor
que sólo codicia habitar a perpetuidad el infinito.

Es un texto compacto que acarrea infinitas sensaciones y reconstruye pasadizos secretos y vitales. Toda una promesa de goce poético.

Enhorabuena y aplausos!

Hallie

mucha pasion en este poema
javier

Rafael Valdemar escribió:"Y otras veces la vida se me va con lo que escribo"
( Joaquín Sabina)

Yo viajero aferrado a un sueño de arcilla,
¿en qué ciudad antigua se perdió mi equipaje
de amor entre la duda?.
Un gélido anatema persigue a mis instintos
y sin piedad apaga al deseo su fiebre.
Ahora cuando cae la luz por el talud de la noche
advierto un temblor de lodo agitándome la sangre
y en cada poema que escribo se detiene algún latido.
Un escalofrío de amnesia mis credenciales borró
y solo camino hacia el ocaso donde grabados en mi sed
hay cántaros de rabia saciándome las vísceras.
Huérfano ya de vida, al otoño presiento
con su pulso de hojarasca que a mi piel
siempre la está lacerando.

A veces tengo miedo de abrir los párpados al alba
y que descubran la sombra que contra mi utopía conspira.
Como una mentira tangible quedaron en la memoria
esas máscaras del tiempo con su irreversible engaño .
Hoy estoy aquí desnudo de esperanza, con la soledad
cubriendo esta carne de ayunos lastimada.
Se hospeda algo turbio en mis muertes interiores
y va cegándome esa luz que aguarda serenísima
del otro lado del silencio para alumbrar mi voz adormecida.
Desde el vacío tengo querencia a renacer y a veces,
dudo si soy final o soy promesa y si aún pueden los sueños
resurgir de entre esta bruma que envejece a mis días,
pero la herida telúrica del futuro sangra por este dolor
que sólo codicia habitar a perpetuidad el infinito.

Còmo decirte todo lo que este poema me hizo sentir? quizà porque esos cuestionamientos los siento muy cercanos, seguro, por còmo lo dijiste, un abrazo Rafael, Luna.-

Hallie gracias por pasarte por mis versos y dejar constancia de ello

saludos

raf

Javier gracias por pasarte por mis versos y dejasr consancia de tu paso

saludos

raf

Hola Rafael.
Tus poemas siempre están llenos de imágenes expléndidas y sugerentes, amigo mío. Imágenes que llegan.
me encantó la lectura. Un abrazo.
Mario.

Rafael Valdemar escribió:"Y otras veces la vida se me va con lo que escribo"
( Joaquín Sabina)

Yo viajero aferrado a un sueño de arcilla,
¿en qué ciudad antigua se perdió mi equipaje
de amor entre la duda?.
Un gélido anatema persigue a mis instintos
y sin piedad apaga al deseo su fiebre.
Ahora cuando cae la luz por el talud de la noche
advierto un temblor de lodo agitándome la sangre
y en cada poema que escribo se detiene algún latido.
Un escalofrío de amnesia mis credenciales borró
y solo camino hacia el ocaso donde grabados en mi sed
hay cántaros de rabia saciándome las vísceras.
Huérfano ya de vida, al otoño presiento
con su pulso de hojarasca que a mi piel
siempre la está lacerando.

A veces tengo miedo de abrir los párpados al alba
y que descubran la sombra que contra mi utopía conspira.
Como una mentira tangible quedaron en la memoria
esas máscaras del tiempo con su irreversible engaño .
Hoy estoy aquí desnudo de esperanza, con la soledad
cubriendo esta carne de ayunos lastimada.
Se hospeda algo turbio en mis muertes interiores
y va cegándome esa luz que aguarda serenísima
del otro lado del silencio para alumbrar mi voz adormecida.
Desde el vacío tengo querencia a renacer y a veces,
dudo si soy final o soy promesa y si aún pueden los sueños
resurgir de entre esta bruma que envejece a mis días,
pero la herida telúrica del futuro sangra por este dolor
que sólo codicia habitar a perpetuidad el infinito.

Un poemazo el que compartí...me vi totalmente identificado en tus versos, podría rubicar todos los sentimientos plasmados en ellos....de lo mejor que he leído últimamente...grato placer leerte. Un cálido abrazo.

javi

Rafael Valdemar,

Magnífica poesía, querido amigo
imágen y verso que atrapa



te felicito

Un abrazo fuerte

Rafael, unos versos esplendidos, con un ritmo que atrapa, mis felicitaciones!!! Un abrazo, Eduardo.

"Ahora cuando cae la luz por el talud de la noche
advierto un temblor de lodo agitándome la sangre
y en cada poema que escribo se detiene algún latido."

Hay muy buenas imágenes a lo largo del texto
que es realmente conmovedor.

Saludos.

lh

Luna gracias por pasarte por mis versos y dejar constancia de tu paso por ellos

saludos

raf

Mario gracias por pasarte por mis versos dejar constancia de tu paso por ellos

saludos

raf

Javier gracias por pasarte por mis versos y dejar constancia de tu paso por ellos

saludos
raf

Ricardo gracias por pasarte por mis versos y dejar constancia de tu paso

saludos
raf